Estados Unidos pide cuentas a la Junta salvadore?a por el asesinato de cuatro religiosas
Una importante misi¨®n diplom¨¢tica estadounidense, encabezada por el subsecretario de Estado, William Bowdler, y el ex secretario de Estado, William Rodgers, lleg¨® a primera hora de la ma?ana de ayer a San Salvador en un viaje sorpresa directamente motivado por el asesinato de cuatro monjas norteamericanas. El juez que reconoci¨® los cad¨¢veres de las religiosas apareci¨® asesinado ayer, tras ser secuestrado el jueves. Se cree que la misi¨®n notificar¨¢ a la Junta la retirada de toda ayuda militar y econ¨®mica, en tanto no se aclare el suceso de las cuatro religiosas, para cuya investigaci¨®n el Gobierno norteamericano estar¨ªa dispuesto a utilizar sus propios medios.
El Ministerio de Defensa anunci¨® ayer que est¨¢ dispuesto a aceptar la colaboraci¨®n de una misi¨®n investigadora internacional formada por la Interpol o por agentes del FBI, para esclarecer el su ceso de las cuatro religiosas, en un intento de distanciar a las fuerzas armadas de este crimen que ha despertado enorme eco en la opini¨®n p¨²blica norteamericana.La visita de ambas personalidades norteamericanas se produce en momentos en que la crisis de poder resulta cada vez m¨¢s evidente en el pa¨ªs, en el que casi nadie duda ya de que la extrema derecha se ha adue?ado de la situaci¨®n. Lo ¨²nico que falta por saber es si habr¨¢ una sustituci¨®n de altos cargos del Estado que clarifique m¨¢s la actual relaci¨®n de fuerzas, o si se mantendr¨¢ la fachada reformista de la Junta.
Una renovaci¨®n de la Junta parece casi inevitable tras las disensiones detectadas en el seno de los dem¨®cratas cristianos y el consejo dado al coronel Majano de que no regrese al pa¨ªs por ?razones de seguridad?.
Ment¨ªs gubernamental
El Partido Dem¨®crata Cristiano ha convocado para hoy una conferencia extraordinaria de sus dirigentes que, seg¨²n todos los indicios, va a analizar la situaci¨®n pol¨ªtica salvadore?a y la propia permanencia del partido en el actual equipo gobernante.
El ministro de Relaciones Exteriores, Fidel Ch¨¢vez, desminti¨® ayer unas declaraciones que seg¨²n la agencia Efe habr¨ªa efectuado en Panam¨¢ y que supondr¨ªan un ultim¨¢tum del Partido Dem¨®crata Cristiano a las fuerzas armadas para que en el plazo perentorio de 48 horas contestasen si se hab¨ªan decidido por una soluci¨®n militar a la crisis salvadore?a, o si manten¨ªan la opci¨®n pol¨ªtica. Siempre de acuerdo con la versi¨®n de la agencia espa?ola, los democristianos abandonar¨ªan el Gobierno en el primer caso.
Pese al ment¨ªs de Ch¨¢vez, fuentes bien informadas aseguran que en el seno del Partido Dem¨®crata Cristiano existe una fuerte tendencia partidaria de abandonar la nave gubernamental, en un intento de salir honorablemente de la actual situaci¨®n y no comprometerse a¨²n m¨¢s en la pol¨ªtica represiva del r¨¦gimen. Se tratarla, en definitiva, de no respaldar con su presencia la pol¨ªtica de extrema derecha que se estar¨ªa practicando en el pa¨ªs.
En medios locales se estima, sin embargo, que el PDC ha permanecido demasiado tiempo en el Gobierno como para que su cambio de actitud merezca ahora demasiada credibilidad. En todo caso, las declaraciones ¨²ltimas de Napole¨®n Duarte han estado permanentemente dedicadas a resaltar el papel desestabilizador de la extrema derecha, y a definir distancias entre su partido y las bandas paramilitares.
Posible abandono democristiano
A la posible salida de la Junta de los dos representantes democristianos se une el consejo dado al coronel Majano para que no regrese al pa¨ªs, lo que equivaldr¨ªa a una prohibici¨®n de hecho. Majano se ha dirigido a las fuerzas armadas salvadore?as desde Panam¨¢, para denunciar el intento de un sector derechista del Ej¨¦rcito de apartarle del poder.
Tras negar que sea comunista, e insistir en el programa de reformas sociales anunciado el 15 de octubre de 1979, tras el golpe que derrib¨® al general Humberto Romero, el coronel Majano ha insistido en que no, dimitir¨¢ de la Junta.
Pese a todo, ¨¦sta puede quedar reducida en los pr¨®ximos d¨ªas a s¨®lo dos miembro, el coronel conservador Jaime Abdul Guti¨¦rrez y el independiente Avalos, que, seg¨²n todas las fuentes, es un simple n¨²mero. En esta situaci¨®n parece probable una sustituci¨®n global de toda la Junta, con un ascenso casi seguro de los coroneles m¨¢s derechistas y quiz¨¢ el acompa?amiento de alguna personalidad independiente para tratar de mantener la imagen de un Gobierno no exclusivamente militar.
La misi¨®n norteamericana, integrada por pesos pesados de la pol¨ªtica exterior, tratar¨ªa posiblemente de frenar el imparable avance derechista, poniendo para ello en juego el tema de la ayuda estadounidense. Los sectores derechistas no parecer¨ªan excesivamente preocupados, en la esperanza de conseguir una mayor comprensi¨®n por parte de Reagan.
La retirada de la ayuda militar y econ¨®mica decretada el viernes por el Departamento de Estado tendr¨ªa un impacto preferentemente diplom¨¢tico, ya que la oligarqu¨ªa local est¨¢ en condiciones de poder sustituir los cinco millones de d¨®lares otorgados por Estados Unidos en concepto de asistencia militar, siempre que el Gobierno se comprometa a frenar las reformas sociales y, muy especialmente, el programa de reforma agraria.
La Junta salvadore?a no dio ayer ninguna respuesta a la decisi¨®n del Departamento de Estado. Un portavoz se limit¨® a decir que no ten¨ªa conocimiento oficial del tema, y que, por tanto, tampoco pod¨ªa haber a¨²n una reacci¨®n oficial.
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