M¨¦xico y El Salvador

Los mexicanos son un pueblo bueno y buenos vecinos; su situaci¨®n especial debe tenerse en cuenta al formularse la pol¨ªtica de Estados Unidos. Pero los mexicanos puel den ser muy dif¨ªciles en algunos, asuntos que afectan los intereses de Estados Unidos, como El Salvador y el problema de la revoluci¨®n en Am¨¦rica Central. En este caso se trata de la reacci¨®n del ministro de Asuntos Exteriores sobre la reanudaci¨®n de la ayuda militar de Estados Unidos a El Salvador. Los salvadore?os, dijo, deben resolver sus propios problemas. En caso contrario, el derramamiento de sangre aumentar¨¢ y el conflicto se internacionalizar¨¢.Para la izquierda, es una vieja historia que la ayuda que proviene de Nicaragua, Cuba-Uni¨®n Sovi¨¦tica es leg¨ªtima y natural; pero la ayuda americana es internacional e intervencionista. ( ... )

Reagan no puede inaugurar su presidencia con una abierta disputa con M¨¦xico. Claro est¨¢, sin embargo, que no puede abandonar su pol¨ªtica de ayuda a El Salvador; porque, debido a la vulnerabilidad de M¨¦xico, los l¨ªderes mexicanos, p¨²blicamente al menos, se oponen a ello. El Salvador, Nicaragua y otros pa¨ªses son sombras laterales. La preocupaci¨®n de Estados Unidos sobre el apoyo exterior a la revoluci¨®n. y la peligrosa indulgencia de M¨¦xico representan puntos de vista opuestos que los dos pa¨ªses deben discutir.

27 de enero.