La nataci¨®n se reune en Holanda, tras el boicoteo ol¨ªmpico

La ciudad holandesa de Amersfoort, cercana a Amsterdam, ser¨¢ el importante escenario, durante tres jornadas, desde hoy viernes hasta el domingo, de la primera gran reuni¨®n de nataci¨®n en piscina ol¨ªmpica de cincuenta metros, tras el boicoteo de los Juegos de Mosc¨². Competir¨¢n varios de los mejores nadadores del mundo, especialmente de la URSS (Salnikov), la RDA (Petra Selmeider) y de Estadios Unidos (Tracy Caulkins y Mary Meagher), estos ¨²ltimos grandes ausentes el pasado verano. Ser¨¢, en cualquier caso, un segundo contacto despu¨¦s de Gainesville (Florida), donde ya se reunieron en piscina peque?a de veinticinco metros a primeros de este mes.

El boicoteo ol¨ªmpico perjudic¨® a muchos deportes del programa de los Juegos de Mosc¨². Aunque ¨¦stos llegaron a su t¨¦rmino con cierta gloria, lo hicieron con la pena de haberse perdido la oportunidad de la cita al m¨¢ximo nivel deportivo de todos los tiempos. La ausencia norteamericana arrastr¨® a muchos otros pa¨ªses, aunque s¨®lo ¨¦sta y las de la RFA, Canad¨¢ e incluso Jap¨®n pudieron ser catalogadas de entidad. A fin de cuentas, no se puede olvidar que el mejor nivel deportivo mundialse encuentra en general en los pa¨ªses de la ¨®rbita socialista y todos ellos hicieron los m¨¢ximos esfuerzos para que los primeros Juegos organizados en su zona fueran un ¨¦xito.

Mano izquierda

Una vez salvados los Juegos, con el espa?ol Juan Antonio Samaranch de nuevo presidente del Comit¨¦ Ol¨ªmpico Internacional, la diplomacia y la mano izquierda en el mundo del deporte te¨®ricamente amateur se dispuso a afrontar la dif¨ªcil etapa posol¨ªmpica. ?Responder¨ªan los pa¨ªses socialistas, afectados por el boicoteo occidental, con la misma moneda? ?Lo har¨ªan incluso antes de los pr¨®ximos Juegos concedidos, para mayorfacilidad, a la californiana Los Angeles en 1984? La contestaci¨®n ha sido positiva para el mov¨ªmiento ol¨ªmpico. Aunque se produjeron las primeras suspicacias por las ausencias de: atletas sovi¨¦ticos y alemanes orientales en algunas competiciones despu¨¦s de los Juegos -en los campeonatos mundiales femeninos de atletismo de pruebas no ol¨ªmpicas, como los 3.000 metros y los 400 metros vallas, disputadas en Sittard (Holanda), por ejemplo- la realidad es que se comprobaron posteriormente las razones t¨¢cticas de dichas acciones. Toda la preparaci¨®n hab¨ªa ido destinada a los Juegos Ol¨ªmpicos y ni la forma f¨ªsica ni la ps¨ªquica era ya la adecuada. Buena prueba de todo ello fue que atletas campeones ol¨ªmpicos fueron claramente derrotados en reuniones atl¨¦ticas no de m¨¢ximo nivel, pero aceptaron participar en ellas. El dato m¨¢s, positivo, aunque las marcas en general fuesen muy discretas, estuvo en el Torneo de las Ocho Naciones, tambi¨¦n de atletismo, disputado en Tokio, donde por primera vez se enfrentaron a nivel de equipos, ya no s¨®lo individualmente, pa¨ªses que estuvieron o no en los Juegos. Estados Unidos y Polonia obtuvieron en ¨¦l cuatro victorias, por tres de la U RSS y la RFA, dos de Italia y una de Jap¨®n y Reino Unido.Precisamente, la presencia sovi¨¦tica en Tokio fue esgrimida recientemente, a primeros de diciembre, como acto de buena voluntad y ejemplo de querer mantener los contactos deportivos internacionales con los pa¨ªses capitalistas ?a pesar de lo ocurrido?, por Dimitri Prokhorov, jefe del servicio de relaciones internacionales del Comit¨¦ de los Deportes de la URSS. En realidad, Juan Antonio Samaranch, con experiencia sobrada en el tema por su estancia como embajador de Espa?a en la URSS, tuvo inmediatamente despu¨¦s de ser nombrado presidente del COI las garant¨ªas sovi¨¦ticas de que no boicotear¨ªan los Juegos de Los Angeles y, menos a¨²n, competiciones m¨¢s cercanas, de menor nivel. Su reciente visita a Mosc¨², en la que fue recibido por el jefe de Gobierno Tijonov, sucesor de Kosiguin, no ha hecho m¨¢s que asegurar el tema.

Respecto a la nataci¨®n, su caso fue ya curioso cuando, sin haber terminado los Juegos Ol¨ªmpicos, aunque s¨ª las pruebas de nataci¨®n, se disputaron en Irvine (California) los campeonatos de Estados Unidos. L¨®gicamente, previstos como selecci¨®n para la cita ol¨ªmpica, el boicoteo los traslad¨® claramente como contestaci¨®n a las marcas conseguidas sin presencia norteamericana en Mosc¨². Pese a la falta de alicientes para los nadadores, pues sus triunfos no iban a tener nunca el premio de la participaci¨®n ol¨ªmpica y de la muy posible consecuci¨®n, en su gran parte, de medallas, las marcas obtenidas clurante cinco jornadas demostraren que Estados Unidos debi¨® ganar nada menos que el 50% de la nataci¨®n ol¨ªmpica. Sin contar con las bajas del canadiense Peter Szmidt, r¨¦cordman del mundo de 400 metros libres tres d¨ªas antes del comienzo de los Juegos; de la australiana Tracey Wickham, doble r¨¦cordwoman de 400 y 800 metros libres, o del alem¨¢n occidental Gerald Mocrken, de 100 braza, ocho norteamericanos habr¨ªan podido ganar once t¨ªtulos, de un total de veintid¨®s pruebas, en Mosc¨². Demasiado importante para ser ocultado por los 14.58.27 de SaInikov en 1.500 libres, primer hombre que baj¨® de los quince minutos en el kil¨®metro y medio o de los 54.79 de Barbara Krause en 100 libres, primera mujer que baj¨® de los 55 segundos en el hect¨®metro.

La nataci¨®n posol¨ªmpica se resinti¨® m¨¢s tiempo que el atletismo en los contactos, y aunque al m¨¢ximo nivel s¨®lo se podr¨¢n volver a encontrar todos los pa¨ªses en el verano de 1982, con motivo de los pr¨®ximos Campeonatos Mundiales de Concord (California) -otra curiosa coincidencia en el escenario-, al menos ha comenzado 1981 con reuniones que acogieron a boicoteadores y no boicoteadores. Antes de finalizar 1980 y nada m¨¢s terminar los Juegos, Estados Unidos hizo una gira comopremio a sus nadadores y tras recalar en China se organiz¨® una reuni¨®n en Honolulu (Hawai). En ambos casos -China tambi¨¦n estuvo ausente de los Juegos- fueron s¨®lo pa¨ªses bol coteadores y no hubo un gran nivel de marcas (aunque se constat¨® el progreso chino, por ejemplo), como si la tremenda herida hecha al deporte acu¨¢tico -mucho m¨¢s que al atletismo- fuera l¨®gico que tardara en cerrar.

Gainesville, ?cumbre peque?a?

M¨¢s tarde, y aunque tambi¨¦n en piscina peque?a de veinticinco metros -m¨¢s r¨¢pida, por ello, que la ol¨ªmpica de cincuenta, al hacerse doble n¨²mero de virajes en las pruebas y ganar ese impulso-, se disput¨® en Galnesville (Florida), los d¨ªas 2, 3 y 4 de enero, la mejor reuni¨®n posol¨ªmpica. Adem¨¢s de los mejores nadadores europeos, sovi¨¦ticos y alemanes, estuvieron, al fin, los norteamericanos. La localidad situada al norte del Estado de Florida, cercana ya al de Georgia, entre ciudades tan conocidas como Jacksonville, Orlando y Daytona -c¨¦lebre por las pruebas automovil¨ªsticas de las 6 y las 24 horas-, reuni¨® por primera vez despu¨¦s de los Juegos a los nadadores y nadadoras que anteriormente s¨®lo en c¨¢lculos pudieron decidir oficiosamente un vencedor.Un total de quince plusmarcas mundiales -al no ser en piscina ol¨ªmpica, como sucede en la pista cubierta de atletismo, no se puede hablar de r¨¦cord- fueron superadas en los tres d¨ªas de competiciones. La reuni¨®n, con m¨¢s de doscientos nadadores en liza, fue la m¨¢s amplia desde los Mundiales de Berl¨ªn-78. Estados Unidos logr¨® once de esas quince plusmarcas y una de sus dos ni?as prodigio, ahora ya con dieciocho a?os, Tracy Caulkins, logr¨® cuatro: 100 braza, 1.07.47; 400 estilos, 4.33.44; 100 espalda, 1.01.11, y 200 estilos, 2.10.80. Adem¨¢s colabor¨® en las dos de relevos: 7.58.74 en 4 X 200 libres y 4.06.95 en 4X 100 estilos. Por si fuera poco, fue segunda en 100 y 200 mariposa, tercera en 50 libres y cuarta en 200. Realmente asombroso, como ya lo fue en Berl¨ªn-78, sin que desde entonces -Juegos Ol¨ªmpicos incluidoshubiese brillado.

Tanto Tracy Caulkins como su vencedora en las dos pruebas de mariposa, con nuevas plusmarcas, 58.91 y 2.05.65, Mary T. Meagher, de s¨®lo diecis¨¦is a?os, ser¨¢n las grandes figuras femeninas del equipo norteamericano -un total de veinticuatro, entre hombres y mujeres- que estar¨¢ en Amersfoort este fin de semana. Mary T. Meagher, que tambi¨¦n contribuy¨® a las plusmarcas de relevos, tiene los r¨¦cords de ambas pruebas -¨ªndice de su dominio y calidadcon el mayor margen respecto a la segunda mejor marca mundial de todas las pruebas de cortas distancias. Imbatida desde hace dos a?os, ser¨¢ la primera vez que nade en Europa. Tracy Caulkins no posee, curiosamente, ning¨²n r¨¦cord en la actualidad, pero derrot¨® en Galnesville a las alemanas orientales Petra Schenider, r¨¦cordwoman de 200 y 400 estilos, con 2.13.00 y 4.36.29; a Utte Geweniger, de 100 braza, con 1. 10. 11, y a Rica Re¨ªnisch, de 100 espalda, con 1.00.86. Sus duelos ahora se presentan m¨¢s que interesantes

Entre los hombres, aparte de sovi¨¦ticos como SaInikov, Sidorenko o Fesenko, ya conocidos campeones ol¨ªmpicos, destacar¨¢n entre los nadadores norteamericanos en Amersfoort Rick Carey, Peter Rocca y David McCagg, sobre todo. El primero, ausente Rocca, mejor especialista mundial de 200 espalda, en Gainesville, gan¨® tambi¨¦n los 100, siempre ante el sueco Baron, campe¨®n en Mosc¨² del hect¨®metro. McCagg, aunque el alem¨¢n oriental Georg Wolthe, r¨¦cordman europeo y campe¨®n ol¨ªmpico de 100 libres, se convirti¨® en el nadador m¨¢s r¨¢pido del mundo al hacer 22.09 en los 50 libres -super¨® los 22.71 de Mike Bottom, antiguo campe¨®n ol¨ªmpico, que se quiso despedir as¨ª en la ¨²ltima reuni¨®n de Honolulu-, venci¨® en los 100 con 48.70 contra 48.89 del alem¨¢n. En 50 hizo 22.27. Ha desbancado como mejor sprinter norteamericano, tras la escuela de los Spitz, Montgomery y el surafricano Skinner -universitario en Estados Unidos- que a¨²n conserva el r¨¦cord mundial de 100 libres, con 49.44, a Rowdy Gaines, el cual posiblemente hubiese ganado en Mosc¨² a Wolthe. Ahora le supera incluso ¨¦ste. Gaines s¨®lo fue tercero en Gainesville con 49.74.