Agricultura, pesca y energ¨ªa, intereses contrapuestos

La tercera tanda de informes y recomendaciones referidos al medio ambiente europeo, estudiados y aprobados por la Asamblea Parlamentaria del Consejo de Europa en la semana que hoy termina, alude a los problemas planteados por la pesca y la agricultura, y sus relaciones con la energ¨ªa y el entorno medioambiental. Si en el tema de la energ¨ªa nuclear el Consejo de Europa se ha mostrado claramente partidario de continuar la l¨ªnea pronuclear, en cuestiones agr¨ªcolas las diversas recomendaciones son claramente demostrativas de una actitud casi ecologista.

En efecto, la resoluci¨®n sobre agricultura y energ¨ªa, preparada por el cristianodem¨®crata alem¨¢n Adolf Spies von B¨¹llesheim, ?invita insistentemente a los Gobiernos de los Estados miembros a promover la producci¨®n de energ¨ªa a partir de los desechos agr¨ªcolas, en especial la paja y los detritus forestales, y a utilizar otras fuentes de energ¨ªa en las pr¨¢cticas agr¨ªcolas, tales como la energ¨ªa solar, geot¨¦rmica, e¨®lica y maremotriz?.Es necesario reducir el consumo energ¨¦tico derivado del petr¨®leo en la agricultura. Los abonos representan probablemente la parte m¨¢s importante de este consumo, alrededor del 40% en el conjunto de la factura energ¨¦tica de la agricultura europea. Para producir un kilo de abono nitrogenado se necesita 1,5 litros de petr¨®leo, utiliz¨¢ndose cada a?o cien millones de toneladas de petr¨®leo con este fin.

Pero lo m¨¢s interesante, sin duda, es el aprovechamiento de nuevas fuentes de energ¨ªa. La biomasa, es decir, la utilizaci¨®n de los residuos vegetales para obtener productos energ¨¦ticos (alcohol, gas) le ofrece a la agricultura un amplio campo de acci¨®n. El alcohol puede ser obtenido con cierta facilidad a partir de ciertos cereales, de la ca?a de az¨²car, la remolacha, la mandioca, la melaza, el ma¨ªz, la madera e incluso diversas algas, pero el gas metano se obtiene a¨²n m¨¢s f¨¢cilmente mediante la descomposici¨®n de residuos vegetales por fotos¨ªntesis (energ¨ªa solar) y gracias a la acci¨®n de ciertas bacterias descomponedoras. El metano obtenido por la digesti¨®n de la biomasa es directamente utilizable en explotaciones agr¨ªcolas para mover maquinaria o para calentar viviendas o establos.

Tambi¨¦n es posible obtener energ¨ªa mediante la combusti¨®n de la madera, poco energ¨¦tica, y de la paja seca, posibilidad ¨¦sta que despierta sumo inter¨¦s en el mundo agron¨®mico, por la cantidad de combustible utilizable y por su mejor rendimiento calor¨ªfico. Seg¨²n c¨¢lculos recientes, un pa¨ªs como Alemania Federal podr¨ªa obtener casi el 8% de la energ¨ªa que necesita gracias a la paja de que dispone habitualmente como desecho.

Finalmente, el informe de Adolf Spies recomienda la adopci¨®n de peque?as centrales e¨®licas o solares en las explotaciones agr¨ªcolas, obteni¨¦ndose as¨ª una energ¨ªa barata.

Es evidente que tanto la agricultura como la pesca utilizan energ¨ªa para producir energ¨ªa, en este caso bajo la forma de alimentos. La contaminaci¨®n de ?as aguas y del suelo, debida a las pr¨¢cticas agr¨ªcolas y, sobre todo, a la industria, plantea problemas cuya soluci¨®n parece dif¨ªcil a corto plazo. Por lo que al mar se refiere, el informe sobre la pesca, preparado para la Asamblea del Consejo de Europa en Estrasburgo por los parlamentarios Raoul Bonnel, liberal belga, y Baldomero Fern¨¢ndez Calvi?o, de UCD, se?ala una contaminaci¨®n tal que la pesca profesional se ha hecho casi imposible en ciertas zonas mediterr¨¢neas, del mar del Norte y del B¨¢ltico, as¨ª como en varios grandes lagos escandinavos.

Bien es verdad que muchos pa¨ªses europeos no tienen costas y su inter¨¦s en estas cuestiones es m¨ªnimo; incluso en pa¨ªses en los que la pesca es importante, otros sectores industriales requieren mucha mayor atenci¨®n por su trascendencia. Sin embargo, la producci¨®n de alimentos que origina la industria, pesquera le ha conferido una importancia grande a la recomendaci¨®n aprobada por la Asamblea Parlamentaria, mediante la cual, entre otras medidas, se requiere de los Gobiernos miembros la adopci¨®n de directrices energ¨¦ticas para reanudar con la m¨¢xima energ¨ªa la lucha contra la contaminaci¨®n de las aguas marinas y continentales, fomentando asimismo la investigaci¨®n y la educaci¨®n en cuestiones mar¨ªtimas, y respetando con la m¨¢xima escrupulosidad los acuerdos internacionales sobre cuestiones mar¨ªtimo-pesqueras.

En suma, el Consejo de Europa, que desde el punto de vista industrial se muestra muy preocupado y recomienda la intensificaci¨®n de todos los esfuerzos, incluso de origen nuclear, para la obtenci¨®n de energ¨ªa, es m¨¢s flexible en otras cuestiones, y sus recomendaciones se alinean, en algunos aspectos, con las reivindicaciones de los grupos ecologistas, como la adopci¨®n en la agricultura de energ¨ªas alternativas y la protecci¨®n de mares, r¨ªos y lagos contra la contaminaci¨®n que pone en peligro la pesca. Actitud contemporizadora, que muchos denominar¨ªan realista, ante los contrasentidos que plantea la pol¨ªtica energ¨¦tica de hoy frente a un medio ambiente cada vez m¨¢s amenazado.