Ex directora del diario "Egin", juzgada por apolog¨ªa del terrorismo
Mirentxu Purroy, ex directora del diario Egin, de San Sebasti¨¢n, compareci¨® ayer a juicio ante la Audiencia Nacional, acusada de un delito de apolog¨ªa de terrorismo, por el que el fiscal solicita un a?o y un d¨ªa de prisi¨®n. La causa contra la ex directora del citado diario vasco tiene su origen en un anuncio publicitario hecho p¨²blico en la edici¨®n de Egin del 9 de agosto de 1979. Seg¨²n el ministerio fiscal, en el anuncio se vert¨ªan frases de exaltaci¨®n de grupos de car¨¢cter organizado e incluso se animaba al pueblo vasco a la lucha armada.
En el interrogatorio, la periodista declar¨® que el anuncio publicitario fue insertado en el peri¨®dico sin su conocimiento y que proven¨ªa del departamento de publicidad de Bayona (Francia). Agreg¨®, asimismo, que no tuvo conocimiento del asunto hasta que en enero de 1980 fue citada por el juzgado de San Sebati¨¢n y que, tras cesar como directora de Egin, decidi¨® trasladarse a vivir a Pamplona, ciudad de la que es natural.Indic¨® tambi¨¦n que se encontraba en esta ciudad cuando fue decretada su busca y captura por el juez de San Sebasti¨¢n y que, tanto la polic¨ªa como los jueces de instrucci¨®n de Navarra, conoc¨ªan su paradero en Pamplona, debido a la protecci¨®n que hab¨ªa solicitado a ra¨ªz de un intento de ametrallamiento por parte de grupos ultraderechistas y a las denuncias por amenazas que present¨® en el juzgado.
Despu¨¦s de la vista del juicio, la ex directora de Egin declarar¨ªa a los periodistas que Ias amenazas proven¨ªan del Batall¨®n Vasco Espa?ol y de la Triple A.
El abogado defensor solicit¨®, por su parte, la libre absoluci¨®n de su patrocinada y destac¨® la importancia de este juicio para la profesi¨®n period¨ªstica, por enjuiciar la cuesti¨®n de si el director de un peri¨®dico es responsable de todo lo que se publica en su interior, aun en el caso de que no hubiera accedido a la inserci¨®n de un texto determinado. Con anterioridad, la procesada hab¨ªa hecho hincapi¨¦ en la din¨¢mica diaria de la elaboraci¨®n de un peri¨®dico, que impide conocer el contenido completo de todos los textos, anuncios comerciales incluidos.
Tras excluir la voluntad de su defendida en la publicaci¨®n del anuncio comercial, el abogado defensor cit¨® el art¨ªculo 32 del proyecto de C¨®digo Penal remitido por el Gobierno al Congreso, que en s¨ªntesis se?ala que la responsabilidad criminal por autor¨ªa, en relaci¨®n con un escrito impreso, depende del conocimiento que los autores tengan del contenido.
Durante su interrogatorio, la procesada no concret¨® nunca la persona o personas que gestionaron directamente desde Bayona la inserci¨®n del anuncio.
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