Mugabe lanza el Ej¨¦rcito y la aviaci¨®n contra los partidarios de Nkomo amotinados en Bulawayo
El primer ministro de Zimbabue, Robert Mugabe, confirm¨® ayer la participaci¨®n del Ej¨¦rcito y la aviaci¨®n en los violentos combates de Bulawayo -la segunda ciudad de Zimbabue (ex Rodesia)-, donde guerrilleros del Ej¨¦rcito Revolucionario del Pueblo (ZIPRA), leales al dirigente Joshua Nkomo, protagonizan una verdadera insurecci¨®n contra el Gobierno.
Los acontecimientos han cobrado en las ¨²ltimas horas un cariz que ha llevado a Mugabe a calificarlos de ?dram¨¢ticos? ante el Parlamento de Salisbury. Para Mugabe, la situaci¨®n de Bulawayo, en el suroeste del pa¨ªs, ?obedece a un plan predeterminado ?.Obervadores extranjeros califican de virtual guerra civil los enfrentamientos entre facciones armadas del primer ministro Mugabe y el dirigente del Frente Patri¨®tico, Nkomo. Se han contabilizado desde el s¨¢bado m¨¢s de cincuenta muertos, y los heridos sobrepasan el centenar.
Tropas regulares se opusieron ayer con carros de combate a los amotinados del ZIPRA. La aviaci¨®n de Zimbabue, a las ¨®rdenes del primer ministro, ha atacado una columna blindada de once veh¨ªculos, leal a Nkomo, que in tentaba llegar a Bulawayo, aut¨¦ntico basti¨®n pol¨ªtico y ¨¦tnico de Joshua Nkonio. La parte occidental de la ciudad, en la que predominan los barrios blancos, es la m¨¢s afectada por los combates.
Helic¨®pteros
Dos helic¨®pteros artillados han entrado tambi¨¦n en acci¨®n contra los hombres del ZIPRA, que se dirigen a Bulawayo desde el campo militar del r¨ªo Gwai, a unos 150 kil¨®metros de la ciudad. Los helic¨®pteros bombardean y ametrallan las posiciones de los amotinados.El Gobierno de Zimbabue orden¨® hace tiempo la incorporaci¨®n de los grupos guerrilleros al nuevo Ej¨¦rcito nacional en formaci¨®n. Los seguidores de Nkomo mantienen una oposici¨®n armada a la medida, acentuada por el hecho de que su l¨ªder, que fue ministro del Interior, ha sido degradado a ministro sin cartera, en un reciente reajuste ministerial del jefe del Gobierno.
Defender la legalidad
Robert Mugabe dijo ayer ante el Parlamento que ?estoy dispuesto a aplastar a los enemigos del pueblo que se oponen al Gobierno por la fuerza de las armas?. Un portavoz oficial desminti¨® que se haya celebrado una entrevista Mugabe-Nkomo. El segundo permanece, seg¨²n todas las informaciones, en Bulawayo.Ambos l¨ªderes fueron estrechos aliados durante la guerra de independencia de Zimbabue, pero las tensiones entre sus partidarios -no s¨®lo pol¨ªticas, sino en buena parte tribales- no han dejado de aumentar desde la independencia, el a?o pasado, de la ex colonia rebelde brit¨¢nica de Rodesia.
Situaci¨®n de guerra
Las facciones en lucha utilizan cohetes, metralletas, morteros y proyectiles trazadores. Bulawayo, que tiene 375.000 habitantes, est¨¢ virtualmente paralizada. La poblaci¨®n ha sido advertida para que no acuda al trabajo, y las escuelas permanecen cerradas. La carretera principal, que la une con la capital, Salisbury, est¨¢ cortada. Miles de personas se dirigen desde los barrios perif¨¦ricos al centro de la ciudad, que est¨¢ convertido en un verdadero ?campo de refugiados?.El Ej¨¦rcito y la polic¨ªa han acordonado, con ayuda de reservistas, la parte occidental de la ciudad. Las tropas han tomado posiciones en los lugares estrat¨¦gicos y, sobre todo, junto al cuartel de Glennville, donde el martes se produjeron violentos combates.
El s¨¢bado de la semana pasada se produjo el primer incidente en un acuartelamiento a treinta kil¨®metros de Bulawayo, desde donde se extendieron a otros cuarteles cuando miembros del Ej¨¦rcito Revolucionario del Pueblo de Zimbabue robaron armas del polvor¨ªn.
De otra parte, el Gobierno de Salisbury denunci¨® ayer en la conferencia de no alineados, de Nueva Delhi, que Africa del Sur est¨¢ entrenando a 8.000 ex militares rodesianos para que invadan el territorio de Zimbabue, independiente.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.