La polic¨ªa niega que los hermanos Perret tengan relaci¨®n con el atentado contra el bar Hendayais
Las investigaciones llevadas a cabo por Fern¨¢ndez Dopico le llevan a afirmar que los hermanos Perret no forman parte del comando detenido en la frontera francesa el pasado 23 de noviembre, momentos despu¨¦s del atentado contra el bar Hendayais, y puesto en libertad horas m¨¢s tarde en Ir¨²n. Concluye, asimismo, que la Comisar¨ªa General de Informaci¨®n no tiene capacidad para financiar extraoficialmente a los comandos anti ETA; que es irrelevante la pertenencia de los informadores o confidentes de la polic¨ªa a la OAS (organizaci¨®n terrorista de apoyo a una Argelia francesa) o a cualquier otra organizaci¨®n, y que no se tiene constancia de que se hayan practicado registros en domicilios de supuestos miembros de estos comandos y que, habi¨¦ndose encontrado armas, por ¨®rdenes superiores se evitara la posibilidad de emprender una acci¨®n judicial contra los responsables.La supuesta participaci¨®n de los hermanos Gilbert y Clement Perret en el incidente fronterizo antes mencionado es desmentida en el informe Fern¨¢ndez Dopico, en base a las declaraciones de los propios hermanos y como resultado de las diligencias de reconocimiento practicadas entre los funcionarios que se encontraban de servicio el d¨ªa 23 de noviembre en el puente de Hendaya y en la comisar¨ªa de Ir¨²n, adonde fueron trasladados los protagonistas del incidente y en donde fueron puestos en libertad, al parecer, por orden de Manuel Ballesteros.
Los hermanos Gilbert y Clement Perret prestaron declaraci¨®n voluntaria, seg¨²n dice el informe, el pasado d¨ªa 30 de enero, despu¨¦s de que el d¨ªa anterior solicitaran protecci¨®n en la comisar¨ªa de Castell¨®n de la Plana, por miedo a sufrir un atentado de ETA. Gilbert declara que pide protecci¨®n porque tiene constancia de -haber sido seguido por elementos de esta organizaci¨®n terrorista y sospecha que ello es debido a que su tel¨¦fono obrara en poder de un tal Szonek, condenado por un tribunal franc¨¦s como responsable de la muerte en atentado de un militante de ETA Militar.
En el informe se admite como posible que el tel¨¦fono de Gilbert Perret figurara en la agenda de Szonek como cliente ocasional de la pasteler¨ªa que la esposa de Gilbert regenta en Benicasim, cuya popularidad, as¨ª como la bondad de sus tartas, glosa el informe.
Los Perret niegan haber participado en el incidente fronterizo del d¨ªa 23 de noviembre, por encontrarse ese d¨ªa en Castell¨®n. Ese d¨ªa se celebra la festividad de san Clemente, por lo que celebraron, dicen, en una reuni¨®n familiar, el santo del menor de los hermanos. Como prueba de que ese d¨ªa se encontraban en esa ciudad Gilbert alega que, despu¨¦s de comer, sali¨® con su mujer y sus hijos a la feria, y all¨ª se encontr¨® con el polic¨ªa que tramita en la comisar¨ªa de Castell¨®n la documentaci¨®n de los extranjeros.
Por lo que respecta a las diligencias de reconocimiento practicadas entre los funcionarios de servicio en el puente de Hendaya y en la comisar¨ªa de Ir¨²n, fueron efectuadas sobre dos fotograf¨ªas en las que no constaba nombre alguno y s¨®lo un n¨²mero. Los cuatro polic¨ªas de servicio en el puente y los cuatro que practicaron las diligencias oportunas en la comisar¨ªa de Ir¨²n coinciden en ?negar rotundamente? que las fotograf¨ªas que se les exhiben pertenezcan a ninguno de los tres detenidos aquel d¨ªa, despu¨¦s de que en el atentado contra el bar Hendayais murieran dos personas y otras varias resultaran heridas. Previamente, a la pregunta de si podr¨ªan reconocer a los detenidos, los ocho afirmaban, por unanimidad, que ?posiblemente s¨ª?.
Los guardias civiles de servicio en el puente dicen no poder reconocerles porque los ocupantes del veh¨ªculo interceptado salieron con las manos en la nuca y la cabeza agachada y a varios metros del lugar donde se hallaban. El cabo, por el contrario, s¨ª les vio de cerca y niega que las fotograf¨ªas correspondan a ninguno de los tres detenidos aquel d¨ªa.
Es preciso hacer notar que esta diligencia de reconocimiento carece de sentido, toda vez que la identidad de los ocupantes del veh¨ªculo que provoc¨® el incidente fronterizo es conocida por la polic¨ªa, dado que fueron detenidos, esposados y puestos en libertad por orden superior. Sin embargo, este dato no consta en el informe. Por otra parte, desde el punto de vista procedimental, la prueba de la identificaci¨®n por fotograf¨ªa es de una validez relativa, por no existir constancia judicial de que las fotograf¨ªas exhibidas correspondan realmente a los hermanos Perret.
Entre las circunstancias, que el informe califica de ?indubitadas?, figuran adem¨¢s de la no participaci¨®n de los Perret en el incidente fronterizo, la constataci¨®n de Jacques Debessa no puede ser, como han se?alado algunos medios informativos, el tercer hombre del comando, ya que, desde el 6 de septiembre de 1980, se encuentra en prisi¨®n por falsificaci¨®n de moneda. Es otra ?circunstancia indubitada? la falta de constancia de que los Perret hayan pertenecido a la OAS. Seg¨²n el informe, son poco m¨¢s de una veintena los ex miembros de la OAS que viven en la costa de Castell¨®n y Alicante y se encuentran desde siempre bajo control.
No obstante, se afirma que los integrantes de las ?redes informativas?, tanto en territorio nacional como extranjero, se seleccionan con independencia de su nacionalidad o de su pertenencia a la OAS o a cualquier otra organizaci¨®n, dato que, seg¨²n el informe, ?puede ser desconocido por la polic¨ªa?. Es la disposici¨®n y las posibilidades de cada colaborador lo que se tiene en cuenta a la hora de su selecci¨®n.
Confidentes: secreto profesional
Respecto a la posibilidad de que la Comisar¨ªa General de Informaci¨®n emplee fondos ?incontrolados? para subvencionar atentados dirigidos contra supuestos miembros de ETA residentes en el sur de Francia, se afirma que ello no es posible ya que la citada comisar¨ªa no dispone de recursos econ¨®micos propios, por lo que cualquier cantidad destinada a ?colaboradores? ha de contar con la autorizaci¨®n previa del director de Seguridad del Estado y con cargo a la aplicaci¨®n 251/144 de los Presupuestos Generales del Estado. ?No existen, por tanto, fondos incontrolados?, se afirma.Se reconoce que la polic¨ªa aprovecha la informaci¨®n que pueden prestarle los confidentes, cuya utilizaci¨®n es generalizada por parte de todas las polic¨ªas. Por razones de secreto profesional y de eficacia policial, la identidad de los confidentes debe ser guardada con absoluta reserva. ?La confidencia, adem¨¢s de deber de ciudadan¨ªa, se convierte en funci¨®n policial cuando se realiza por personas al servicio de las autoridades?, seg¨²n el informe. Estos colaboradores realizan misiones puramente informativas programadas al nivel adecuado y son controlados por distintos procedimientos. El derecho al secreto no obliga, sin embargo, a ocultar la identidad de un informador que se ve implicado en la comisi¨®n de delitos, aun cuando fueran consecuencia de su misi¨®n de informador.
Manuel Ballesteros, jefe de la Comisar¨ªa General de Informaci¨®n en el momento de la elaboraci¨®n del informe, reconoce que es verdad que existen comandos en Francia, que alguien les debe pagar, que posiblemente algunos integrantes de los mismos hayan sido miembros de la OAS y que, ?efectivamente, hubo un atentado contra un bar en Hendaya, Argala fue asesinado en Anglet y alguien atent¨® contra Antonio Cubillo?. Niega, sin embargo, que exista relaci¨®n alguna entre las redes informativas de su comisada y esos supuestos comandos.
Respecto a los registros en busca de armas, el informe se limita a se?alar que no hay constancia de que se hayan practicado. Ante algunas informaciones publicadas que indicaban una presunta relaci¨®n entre los hermanos Perret y el polic¨ªa Antonio Fern¨¢ndez Pacheco, conocido por Billy el Ni?o, Fern¨¢ndez Dopico afirma que, a la vista de su expediente profesional, se trata de un polic¨ªa de excepci¨®n, caballero de la Orden al M¨¦rito Policial en todas sus categor¨ªas.
Se le considera a Fern¨¢ndez Pacheco art¨ªfice principal del ¨¦xito en numerosos servicios y se estima que si fuera verdad que controla una red de informadores demostrar¨ªa con ello su eficacia en la colaboraci¨®n con la justicia, la sociedad y el Estado. Concluye el informe se?alando que no hay evidencia que permita cambiar de criterio respecto a Fern¨¢ndez Pacheco, y que, ?si la hubiera, no se recoger¨ªa en este informe?.
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