Tejero e Ynestrillas: las cosas claras

Ha hecho un a?o ya del asunto ?Galaxia?, episodio con ribetes castrenses que puso a la clase pol¨ªtica al borde del disparadero. Nunca estuvo tan convulsa, ni tan asustada, una situaci¨®n pol¨ªtica entera, no s¨®lo una parte. La democracia no tiene bien ajustados los cojinetes y a cualquier movimiento sospecha que alguien les pueda echar arena. Tejero, e Ynestrillas son dos militares de Espa?a, inquietos y preocupados por la cosa p¨²blica, queen este caso afecta a su patria, parte integrante y primordial de sus desvelos. Igual que ellos, es decir, atenta a lo que pasa, se alinea otra formaci¨®n militar, aunque esta m¨¢s arrimada a la l¨ªnea constitucional, que puede ser parad¨®jico, pero que no lo es. La Constituci¨®n es un texto fundamental que obliga a todos de la misma manera, si bien unos la han aceptado de mejor talante que otros. ( ... )Y a todo esto a¨²n siguen en Alcal¨¢ de Henares, en prisi¨®n militar, dos soldados presuntamente implicados en un caso que alguien, con fuerte proyecci¨®n en las Fuerzas Armadas, calific¨® de ?tonter¨ªa?. Como todo asunto que es cosa de capitanes generales y de auditor¨ªas de guerra, la tramitaci¨®n del expediente es seria, reposada, minuciosa. Si hubiese sido un tr¨¢mite civil, incluso con presunci¨®n grave, pero con determinado signo, tal vez el giro hubiese sido notable. La democracia como r¨¦gimen pol¨ªtico ha llegado a todas partes: al Ej¨¦rcito tambi¨¦n, ya lo vemos a trav¨¦s de los que escriben con graduaci¨®n a pie de p¨¢gina sobre la bondad constitucional y de las sanciones a los que no van precisamente por ese sendero laudatorio. Me gustar¨ªa saber, eso s¨ª, si esos escritos -los primeros- son espont¨¢neos o pasan antes por alg¨²n despacho oficial del ramo. ( ... )

Ya sabemos que la oposici¨®n quiso poner en posici¨®n de firmes, en el Parlamento, a Guti¨¦rrez Mellado. Y creo que lo consigui¨®. A ver si por temor a que se repita la historia estos dos militares van a pagar consecuencias ajenas. Que se vea, que se estudie, que se decida y que se aplique la ley militar. Pero, en seguida, antes de que dos miembros de las Fuerzas de Orden P¨²blico paguen por todos los pecados que est¨¢ cometiendo la clase pol¨ªtica. ( ... )

24 de noviembre de 1979