Quini: "En algunos momentos pens¨¦ en suicidarme"
Quini manifest¨® ayer, en conferencia de Prensa, que ?en algunos momentos que pas¨¦ en la cueva pens¨¦ en suicidarme. Aunque los secuestradores no me amenazaron en ning¨²n momento con hacerme da?o f¨ªsico, e incluso me dec¨ªan que pasara lo que pasara no iba a ocurrirme nada, fueron unas horas muy dif¨ªciles en las que pens¨¦ que no saldr¨ªa vivo de all¨ª?. Quini se entren¨® ayer en el Camp Nou durante algunos minutos, volver¨¢ a hacerlo hoy y ser¨¢ cuando se decida definitivamente si juega el pr¨®ximo domingo en el Bernab¨¦u. Una editorial ya le ha ofrecido cinco millones de pesetas por la historia del secuestro.
Durante las 602 horas que dur¨® el secuestro, Quin? afirm¨® que, ?ante todo, quer¨ªa olvidarme de la familia, de lo contrario, lo pasaba muy mal. Hasta el domingo no sab¨ªa cu¨¢ntos d¨ªas hab¨ªan transcurrido, o si era de d¨ªa o de noche. Me dio tiempo a pensar de todo, hasta en suicidarme. Cre¨ªa que no saldr¨ªa con vida de all¨ª, pese a lo que me dec¨ªan. Desde que me metieron en un caj¨®n dentro del coche, para trasladarme al lugar donde he estado, el peor momento de todos, sin embargo, fue el ¨²ltimo, el del rescate?.Quini recuerda con especial intensidad los momentos finales. ?Ya ten¨ªa la televisi¨®n desde el domingo, aunque se ve¨ªa muy mal, apenas nada. Estaba presenciando el partido de la selecci¨®n y a poco de comenzar el segundo tiempo o¨ª un jaleo grande, golpes, mucho ruido. Me dije que se acababa todo, m¨¢xime cuando se abri¨® la trampilla y vi a un hombre con una pistola. Cog¨ª el colch¨®n y me acurruqu¨¦ en una esquina. Quer¨ªa esconderme de todo. Cre¨ªa que bajaban a matarme, porque, adem¨¢s, o¨ª que gritaban arriba: ?No te muevas o te pego un tiro! Luego un polic¨ªa baj¨®, se dio a conocer y me tranquiliz¨®. S¨ª, lo primero que dije era que quer¨ªa jugar en Madrid. Me sali¨® del coraz¨®n?.
Quin? recalc¨® que no pudo ver nunca a sus secuestradores, aunque ?ellos s¨ª me ve¨ªan a m¨ª a trav¨¦s de un cristal desde arriba, y algunas veces me dijeron que les perdonase por tenerme as¨ª, lejos de mi familia, pero que ellos lo hac¨ªan para cambiar su situaci¨®n econ¨®mica. Amenazas f¨ªsicas no tuve ninguna, pero las condiciones del lugar donde estaba eran muy malas. A veces me ten¨ªan que inyectar aire a trav¨¦s de un tubo, porque no pod¨ªa respirar. Aquello estaba muy cerrado, y otra cosa fatal era la humedad y el dolor en piernas y espalda?.
Despu¨¦s de se?alar que para los contactos telef¨®nicos de los secuestradores con su familia se le ped¨ªan datos ¨ªntimos de su vida, -?para que supieran que me encontraba bien?- y asegurar que su gran preocupaci¨®n ahora es el estado de su mujer -?a la que he visto muy mal?-, Quini dijo que espera recuperarse lo m¨¢s r¨¢pidamente posible para recobrar el ritmo de juego de sus compa?eros y mantener la posici¨®n del Pichichi, m¨¢ximo goleador de Primera Divisi¨®n, que, a pesar de los tres partidos que no ha jugado, a¨²n sigue ostentando. El jugador azulgrana dio las gracias ?a toda Espa?a, a esta afici¨®n maravillosa del Barcelona, y a la gente que tambi¨¦n se ha interesado por m¨ª en el extranjero Todos se han portado maravillosamente?. En ese momento, Quini comenz¨® a llorar. Hay que a?adir tambi¨¦n que en los primeros momentos de su liberaci¨®n mantuvo una conversaci¨®n telef¨®nica con el predidente del Gobierno, Leopoldo Calvo Sotelo.
Respecto a la posibilidad de que Quini juegue el domingo contra el Real Madrid, este extremo se decidir¨¢ hoy, tras el nuevo entrenamiento del equipo barcelonista. Quin? correte¨® ayer por el Camp Nou, aunque no lleg¨® a dormir en la noche del mi¨¦rcoles. Marc¨® dos goles -uno de penalti- en el partidillo montado por Helenio Herrera. Volver¨¢ a ejercitarse esta ma?ana y ser¨¢ cuando se decida en consecuencia. Ha perdido s¨®lo un kilo en los veinticinco d¨ªas que dur¨® su secuestro, aunque acus¨® molestias en las piernas tras acabar el entrenamiento de ayer. Quin? fue sometido a una exhaustiva exploraci¨®n m¨¦dica, y el doctor Gonz¨¢lez Adrio afirm¨® que hasta las pr¨®ximas horas no se podr¨¢ conocer con exactitud si estar¨¢ en condiciones de jugar.
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