Las desdichas de Mr. Haig
( ... ) Cada vez que Haig perd¨ªa una batalla burocr¨¢tica, anunciaba su dimisi¨®n. A la vez, se murmuraba en la Casa Blanca sobre c¨®mo el secretario de Estado desairaba al presidente y su programa econ¨®mico por su forzada y reiterativa presentaci¨®n de los problemas de pol¨ªtica exterior, especialmente El Salvador. ( ... )Finalmente, el desenlace: Haig manifest¨® en p¨²blico su disgusto ante la perspectiva de que se nombrase al vicepresidente George Bush mediador en caso de grave crisis de la pol¨ªtica exterior y tambi¨¦n se ocup¨® del control de la importaci¨®n de autos japoneses, lo que provoc¨® el susto del ministro de Asuntos Exteriores del Jap¨®n, Masayoshi lto. Al d¨ªa siguiente fue nombrado Bush y Haig dijo que no hab¨ªa sido consultado y que estaba irritado. El consejero de Reagan, Meese, y el jefe del Estado Mayor de la Casa Blanca estaban furiosos ante lo que consideraban una indiscreci¨®n de Haig.
De acuerdo con las ¨²ltimas informaciones, Haig sigue irritado y tambi¨¦n Meese. ( ... )
2 7 de marzo,
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