El Reino Unido ha pedido a la CEE que presione a Espa?a para reducir las barreras aduaneras a los productos comunitarios
El ministro brit¨¢nico de Comercio, Cecil Parkinson, ha planteado ante sus colegas de la Comunidad Econ¨®mica Europea (CEE) la necesidad de presionar a Espa?a para que reduzca sus tarifas aduaneras frente a los productos comunitarios, y muy especialmente en cuanto a autom¨®viles, bebidas alcoh¨®licas, chocolate y generadores el¨¦ctricos. Al parecer, la CEE ordenar¨¢ al comisario encargado de las negociaciones para la adhesi¨®n y de toda la pol¨ªtica mediterr¨¢nea, el italiano Lorenzo Natali, que advierta muy seriamente a Madrid sobre la posibilidad de renegociar el actual acuerdo preferencia de 1970.
La irritaci¨®n brit¨¢nica, que, seg¨²n portavoces de la CEE, comparten otros pa¨ªses, aumenta d¨ªa a d¨ªa no tanto por razones achacables a Espa?a, sino por la grave crisis que atraviesa su propia industria automovil¨ªstica. Hace menos de seis meses, cinco parlamentarios del Reino Unido plantearon ante el Parlamento Europeo una pregunta en la que se reclamaba la renegociaci¨®n del actual acuerdo con nuestro pa¨ªs, y calificaban la situaci¨®n de ?aut¨¦ntico esc¨¢ndalo comercial?. La misma tesis defendi¨® el presidente de la British Leyland, sir Michael Edwards, quien expres¨® ya el pasado mes de septiembre su inquietud por el aumento de las importaciones de veh¨ªculos procedentes de Espa?a. Seg¨²n Edwards, el Reino Unido compr¨® en 1979 cerca de 67.000 autom¨®viles espa?oles.Cecil Parkinson se?al¨® que la situaci¨®n segu¨ªa deterior¨¢ndose y que, por parte espa?ola, se estaba produciendo una aut¨¦ntica ?distorsi¨®n? del acuerdo del setenta, sin que los comunitarios hayan reaccionado. En concreto, el ministro brit¨¢nico se queja de las exportaciones espa?olas de Ford Fiesta, que, afirma, llegan al mercado comunitario con una tarifa de s¨®lo un 4%, mientras que los coches procedentes de la CEE no pueden entrar en Espa?a m¨¢s que en una cantidad determinada y, adem¨¢s, con una tarifa que, por unos conceptos y otros, alcanza el 46%.
Parkinson a?adi¨® que el mismo problema se planteaba con otros muchos productos, entre ellos el whisky o el chocolate, y advirti¨® que el Reino Unido apoya el ingreso de Espa?a en la Comunidad Econ¨®mica Europea, pero que no est¨¢ dispuesta a sufrir los perjuicios de un acuerdo firmado cuando la situaci¨®n industrial espa?ola era muy diferente.
Siempre seg¨²n fuentes comunitarias, la irritaci¨®n del ministro del Reino Unido fue compartida por otros pa¨ªses -entre ellos, Irlanda-, que llegaron a hablar de discriminaci¨®n. Al parecer, la Comisi¨®n Europea plantear¨¢ nuevamente al Gobierno de Madrid en fecha muy pr¨®xima la necesidad de que disminuya tajantemente sus tarifas aduaneras frente a los productos de los diez, arguyendo adem¨¢s que ¨¦sta ser¨ªa una buena manera de preparar a la industria espa?ola cara a la adhesi¨®n.
La Comisi¨®n Europea y el Consejo de Ministros de la CEE han defendido hasta ahora en las negociaciones hispano-comunitarias para la adhesi¨®n que Espa?a deber¨¢ abrir completamente sus fronteras a los productos comunitarios desde el momento mismo de la entrada de nuestro pa¨ªs en el Mercado Com¨²n, mientras que la delegaci¨®n espa?ola habla siempre de per¨ªodos transitorios para determinadoscap¨ªtulos, aunque sin precisar todav¨ªa los productos concretos ni el per¨ªodo de adaptaci¨®n.
En cuanto a la posible distorsi¨®n del acuerdo de 19710, los negociadores espa?oles han se?alado repetidamente que el balance fue negativo para Espa?a durante vakios a?os y que s¨®lo desde hace tres o cuatro comienza a experimentarse una ?recuperaci¨®n a nuestro favor?. La Comisi¨®n Europea, por su parte, ha afirmado ya en varias ocasiones que los pa¨ªses miembros pod¨ªan plantear en el seno de la comisi¨®n mixta de seguimiento del acuerdo los distintos problemas, y que s¨®lo en este caso ella podr¨ªa actuar en consecuencia.
Los datos que facilita la Comisi¨®n respecto, por ejemplo, a las tarifas aduaneras aplicadas por Espa?a no coinciden, por otra parte, con los proporcionados por el ministro brit¨¢nico. Seg¨²n afirmaba Lorenzo Natali en diciembre del a?o pasado, Espa?a establece un contingente cuantitativo de importaci¨®n de veh¨ªculos autom¨®viles comunitarios por valor de 1.748 millones de pesetas y unos derechos que van del 38% al 29,4%, seg¨²n el n¨²mero de plazas del coche. Frente a pa¨ªses terceros, es decir, no miembros de la CEE, los derechos aduaneros aumentaban hasta un 48,9% y un 37,4%, respectivamente.
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