Aprobada la ley sobre clasificaci¨®n de mandos y ascensos en el Ej¨¦rcito de Tierra

Ds importantes leyes militares ocuparon ayer la m¨¢xima atenci¨®n del Pleno del Congreso de los Diputados. Por una parte, se aprob¨® el proyecto le ley sobre clasificaci¨®n de mandos y ascensos en r¨¦gimen ordinario para los militares de carrera del Ej¨¦rcito de Tierra, con el rechazo de casi todas las enmiendas de la izquierda, incluida una a la totalidad de los socialistas. Por otra, UCD perdi¨®, por falta de diputados centristas, una modificaci¨®n introducida por el Senado en el proyecto de ley sobre creaci¨®n de la reserva activa.

La enmienda citada atribu¨ªa la capacidad de hacer pasar a esta situaci¨®n al Ministerio de Defensa, en lugar de al ministro, como inicialmente aprob¨® el Congreso. La enmienda senatorial a?ad¨ªa la exigencia de previa propuesta del Consejo Superior Militar correspondiente, en lugar de previo informe. Precisaba el texto del Senado que la decisi¨®n del paso a la rererva activa se podr¨ªa tomar en los impuestos se?alados en el art¨ªculo s¨¦ptimo, que especifica la necesidad de que existan insuficiencias psicof¨ªsicas o profesionales. Esta precisi¨®n se hab¨ªa realizado en el Senado para evitar, seg¨²n las tesis de UCD y de los t¨¦cnicos militares del Ministerio de Defensa, interpretaciones torcidas sobre una supuesta posibilidad de decisiones arbitrarias.Una primera votaci¨®n por procedimiento electr¨®nico dio un resultado de empate a 117 votos. Al repetirse la votaci¨®n, por el sistema de ponerse en pie, la enmienda fue rechazada por cien votos a favor (UCD y CD) y 108 en contra. El evidente disgusto de los dirigentes centristas, incluido el presidente del Gobierno, se hizo m¨¢s patente cuando, al abrirse las puertas tras conocerse el resultado de la votaci¨®n, entr¨® en el hemiciclo m¨¢s de una docena de diputados centristas, que habr¨ªan sido suficientes para evitar la derrota.El grupo centrista no hab¨ªa advertido el cambio de la palabra Ministerio por ministro, hasta el punto de que el diputado Blas Camacho pidi¨® que se corrigiera lo que entend¨ªa era un error de imprenta. El presidente de la C¨¢mara, Landelino Lavilla, le explic¨® que la memoria enviada por el Senado acompa?ando las modificaciones introducidas en el proyecto de ley explicaba que el cambio era intencionado.

"Criterios objetivos para la clasificaci¨®n de mandos"

El resto de las enmiendas del Senado, incluida la que eleva en un a?o la edad de pase a la reserva activa de los generales, fueron aprobadas. El socialista Luis Solana acus¨® a UCD de retroceder en la C¨¢mara alta e intentar defender a los generales, cuando ¨¦stos en realidad no quieren esa ?defensa?, porque aceptan la reserva activa.

En el proyecto de ley sobre clasificaci¨®n de mandos y ascensos en el Ej¨¦rcito de Tierra, s¨®lo prosper¨® una enmienda socialista al art¨ªculo segundo, en el que se establece la forma de realizar la clasificaci¨®n de mandos para que, de acuerdo con las actitudes de cada uno de ellos, se acomoden a distintas funciones y los m¨¢s aptos accedan a los empleos de mayor responsabilidad. El art¨ªculo establece que la clasificaci¨®n citada se fundamentar¨¢ en el estudio y valoraci¨®n del expediente de clasificaci¨®n individual. La primera parte de la enmienda socialista consisti¨® en a?adir que tal estudio y valoraci¨®n se realizar¨¢ ?con criterios objetivos?.

Entre los datos del expediente de clasificaci¨®n figuran los informes' personales reglamentarios de calificaci¨®n desde que se alcanz¨® el empleo de teniente o de sargento. La modificaci¨®n a propuesta socialista establece que tales informes personales ?deber¨¢n ser elaborados por tres oficiales generales o particulares de empleos superiores y los m¨¢s inmediatos al del calificado?.

En cambio, no fue aceptada la enmienda a la totalidad defendida por el socialista Enrique M¨²gica, quien manifest¨® que todos los mandos deben tener los mismos derechos, sean o no procedentes de academia, y critic¨® la situaci¨®n que crear¨¢ la ley al admitir que existan cinco clases de tenientes distintas con arreglo a las diferentes escalas Manifest¨® tambi¨¦n que la Guardia Civil no deber¨ªa incluirse en una ley dedicada estrictamente a militares del Ej¨¦rcito de Tierra, al margen de la condici¨®n militar de la Benem¨¦rita. Se?al¨® que la mayor¨ªa de las funciones de la Guardia Civil son policiales, como quedar¨¢ de manifiesto en la pr¨®xima ley de Seguridad Ciudadana.

Por parte del Grupo Parlamentario Socialista defendi¨® las enmiendas a este proyecto de ley el diputado Jos¨¦ Miguel Bueno, quien se?al¨® que el informe del Consejo Superior del Ej¨¦rcito para clasificar a los coroneles al generalato debe ser lo menos vinculante posible. Propuso que s¨®lo se establezca la necesidad de ser o¨ªdo el citado Consejo para que el Consejo de Ministros pueda tomar verdaderamente la decisi¨®n. El centrista Arturo Moya contest¨® en este punto que el ascenso al generalato debe guiarse en primer lugar por un criterio profesional, y despu¨¦s pol¨ªtico, por lo que la enmienda socialista distorsionaba la filosof¨ªa del proyecto de ley.

Bueno pidi¨® tambi¨¦n que la Legi¨®n no fuera equiparada a los dem¨¢s cuerpos, a lo que Moya contest¨® que debe atenderse a las caracter¨ªsticas peculiares de la misma. Respecto a los capellanes, el diputado socialista pidi¨® que se les despoje de sus atributos temporales, tales como estrellas y s¨ªmbolos de mando, ya que en realidad no son militares. El diputado centrista asegur¨® que el cuerpo eclesi¨¢stico act¨²a en el Ej¨¦rcito de Tierra como personal militar, y como tal debe ser tratado. Al rechazarse la enmienda que ped¨ªa la exclusi¨®n del cuerpo eclesi¨¢stico de esta ley -tras repetirse la votaci¨®n electr¨®nica con resultado contrario a la enmienda-, el diputado socialista Gregorio Peces-Barba asegur¨® que la inclusi¨®n de los capellanes afectaba a los acuerdos con la Santa Sede y era inconstitucional, por lo que el Grupo Parlamentario Socialista plantear¨¢ recurso de inconstitucionalidad si antes no se modifica el texto.

El diputado socialista catal¨¢n Julio Busquets insisti¨® en la conveniencia de excluir a la Guardia Civil de esta ley, as¨ª como a otros cuerpos profesionales -m¨¦dicos, farmac¨¦uticos y dem¨¢s servicios-, cuya homologaci¨®n con la profesi¨®n castrense ser¨ªa perjudicial.

El comunista Sim¨®n S¨¢nchez Montero, quien se felicit¨® de que la clasificaci¨®n de mandos y ascensos se haya realizado por una ley discutida en el Parlamento, retir¨® la mayor¨ªa de las enmiendas de su grupo. e insisti¨® en el sistema de valoraci¨®n objetiva para el ascenso al grado superior inmediato de los generales, jefes, oficiales y suboficiales de carrera del Ej¨¦rcito. La enmienda, como las dem¨¢s de la izquierda -excepto la primeramente citada-, fue rechazada.

Convalidado el decreto de reconversi¨®n industrial

El Pleno del Congreso convalid¨® ayer el decreto-ley sobre reconversi¨®n industrial y decidi¨® tramitarlo como proyecto de ley, con lo que podr¨¢ ser modificado. La tramitaci¨®n como proyecto fue decidida un¨¢nimemente por todos los grupos y aceptada de forma expresa por el Gobierno, seg¨²n manifest¨® el ministro de Industria, Ignacio Bay¨®n, al presentar el decreto-ley.

Este recibi¨® fuertes cr¨ªticas de la mayor¨ªa de los grupos, excepto UCD, y la Minor¨ªa Catalana. Fundamentalmente se critic¨® el mismo procedimiento de regular un tema de tanta trascendencia mediante decreto-ley y se expresaron numerosas quejas al Gobierno.

En estas cr¨ªticas coincidieron el comunista Em¨¦rito Bono, el vasco Josu Elorriaga, el socialista Javier Solana y el diputado del Grupo Mixto Ram¨®n Tamames. Asimismo, Elorriaga acus¨® al Gobierno de haber eliminado del texto original del decreto la referencia a las comunidades aut¨®nomas y de ignorar los estatutos de autonom¨ªa. Por su parte, tanto Bono como Solana expresaron su preocupaci¨®n por la incidencia negativa que la reconversi¨®n industrial pueda tener en el empleo. Concretamente, Javier Solana afirm¨® que la reconversi¨®n industrial supone eliminaci¨®n de puestos de trabajo.