El toro "gallego " de Jos¨¦ Luis Marca

Plaza de Las Ventas. Ultima corrida del cincuentenario. Toros de Jos¨¦ Luis Marca, desiguales de presencia, feos, mansos, descastados; varios fueron protestados. Luis Francisco Espl¨¢: pinchazo sin soltar, estocada corta atravesada, rueda de peones y descabello (aplausos y saludos). Bajonazo (silencio). Nime?o II: bajonazo (aplausos con algunos pitos y salida al tercio). Estocada corta (protestas con algunas palmas cuando sale a los medios). Morenito de Maracay: estocada atravesada delantera, estocada atravesada que asoma y descabello (aplausos y saludos). Estocada atravesada y media estocada ca¨ªda (silencio). Presidi¨® muy mal el comisario Font, que fue abroncado en varias ocasiones. Buena entrada en una tarde que no fue muy apacible.Esto de Marca viene de Parlad¨¦, de Atanasio, y de no-se-que. Se podr¨ªa unir lo vazque?o, lo verag¨¹e?o y lo colome?o y dar¨ªa igual. Porque parece salido de cualquier pradera del Noroeste, metida en brumas, olor a hierba h¨²meda, guiado a golpe de garrota por el paisano, con su paraguas atr¨¢s, colgado del cuello del jersei. Toros gallegos en Las Ventas, valiente invento.

Jos¨¦ Luis Marca, un hombre hecho a s¨ª mismo seg¨²n sabemos, ha inventado el toro gallego y ¨¦sta ser¨¢ una de sus glorias. Bien, cuando un ganadero no puede seguir la l¨ªnea de bravura, o de casta, o de nobleza, de los toros que compra, hace bien, para su negocio y leyenda, en inventar el toro gallego.

Toro adem¨¢s feo, destartalado, cariavacado, con las fuerzas m¨ªnimas y las mansedumbres m¨¢ximas. Toro al que le da lo mismo ir al caballo que a las tablas. Toro que ahora embiste como tontito y un segundo despu¨¦s recula ara?ando la arena.

Hubo uno cuajado, armonioso y serio (que por cuajado, armonioso y serio deb¨ªa ser el garbanzo negro de la gallegada) y ese fue el primero, el cual adem¨¢s ten¨ªa nobleza. Espl¨¢ debi¨® entenderlo poco y, aparte un ayudado rodilla en tierra de acabada torer¨ªa (?el muletazo de la tarde! lo dem¨¢s que hizo fue un lamentable desperdicio de las boyantes embestidas. Las contadas embestidas que ten¨ªa el toro, pues, terciada la faena, le sali¨® la sangre gallega y tiraba al monte.

Nime?o embarc¨® con el pico al segundo, y Morenito de Maracay no embarc¨® con nada al tercero, porque era este un animal delgaducho, horroroso e inv¨¢lido, y el p¨²blico no le consinti¨® ni que toreara ni que banderilleara.

Al cuarto quiso Espl¨¢ lidiarlo como si fuera bravo y lo colocaba muy lejos para las varas. Se arrancaba, cierto, pero la embestida se le acab¨® en seguida y dec¨ªa ?Muuuaaauu¨²! (con acento en la u) que en idioma galaico del vacuno quiere decir exactamente: ?Muy se?or m¨ªo, por la presente s¨ªrvase llevarme al matadero, que a una le va lo natural y no estos sofocones de la lidia?.

Un fuerte alboroto provoc¨® en el tendido el quinto, por inv¨¢lido, por feo y por Marca, y la gente no quer¨ªa que Nime?o lo toreara. Pero el franc¨¦s, en uso de las libertades que le conceden nuestra Constituci¨®n y la suya, si bien se abstuvo de banderillear, no se abstuvo de pegar pases. Por su parte, el p¨²blico, en uso de las libertades que tambi¨¦n le concede la Constituci¨®n, no le hizo ni caso.

El sexto era tan gallego como los otros, pero como se qued¨® sin picar (el comisario-presidente no daba una) propici¨® un emocionante tercio de banderillas. Espl¨¢ se alivi¨® y puso un palo. Nime?o gan¨® limpiamente la fort¨ªsima arrancada y clav¨® arriba. Morenito... ?Ay!, que Morenito tom¨® por pasarela el estribo de la barrera, y sobre tan estrecho piso se peg¨® una carrera a pelo. ?Do va? ?Do va?, gritaba la afici¨®n.

Iba a por at¨²n, a ver al duque, y de paso a ver si provocaba la arrancada, pues al toro le hab¨ªa dado la ventolera, tambi¨¦n dec¨ªa Muuuaaauu¨² (con acento en la u) y se negaba a embestir. Como pudo puso medio par, y luego, jug¨¢ndose la vida literalmente, salv¨® el derrote alto del gallego, que estaba pegado a tablas, clav¨® y sali¨® de la suerte por puro milagro. Se gan¨® la gran ovaci¨®n.

La faena de muleta, con un desarme, un achuch¨®n, un disgusto, consisti¨® en perseguir al invento de Marca, ponerle la muleta delante cuando rara vez hab¨ªa ocasi¨®n, aguantarle las descompuestas cabezadas, y eso. Ni toro ni divisa merec¨ªan tanto empe?o y tanto valor. El mismo lo dec¨ªa: ?Muuuaaauu¨²! (con acento en la u).