Valenciano y poderes p¨²blicos

Seg¨²n dice nuestra Constituci¨®n, art¨ªculo 3.3: ?La riqueza de las distintas modalidades ling¨¹¨ªsticas de Espa?a es un patrimonio cultural que ser¨¢ objeto de especial atenci¨®n y protecci¨®n?.Puede ser que con esta intenci¨®n se dieran los mal llamados decretos de biling¨¹ismo (s¨®lo podemos hablar de biling¨¹ismo cuando las dos lenguas disfrutan de igual trato). Estos decretos no se dictaron al mismo tiempo, lo que supone una primera discriminaci¨®n.

Si el Pa¨ªs Valenciano fue discriminado en el primer paso, su discriminaci¨®n contin¨²a, pues el decreto no se ha aplicado a¨²n, a pesar de ser obligatorio en el curso ya terminado, 1980-1981. Y no se ha aplicado porque los poderes p¨²blicos (Ministerio de Educaci¨®n, Consejo Preauton¨®mico) no han puesto excesivo empe?o en el asunto, sino todo lo contrario, a pesar del mandamiento constitucional ?los ciudadanos y los poderes p¨²blicos est¨¢n sujetos a la Constituci¨®n y al resto del ordenamiento jur¨ªdico", art¨ªculo 9.1.

Mal ejemplo me parece que dan quienes debieran cumplir y hacer cumplir las leyes para ir construyendo d¨ªa a d¨ªa el Estado de derecho basado en el imperio de la ley.

Por otra parte, el se?or ministro de Educaci¨®n, en una interpelaci¨®n parlamentaria en el Senado, prometi¨® estudiar y solucionar algunos aspectos del decreto que aparec¨ªan poco claros. La interpelaci¨®n lleva fecha 24-9-1980 y desconozco si ha tenido soluci¨®n. Pienso que no.

En cierta medida, tambi¨¦n podemos considerar a los medios de comunicaci¨®n estatales como poderes p¨²blicos, porque de ellos dependen. Pues bien, el tiempo dedicado por RNE, en Valencia, al valenciano no pasa de un cuarto de hora mal contado, siendo que en tiempos preconstitucionales le dedicaba una hora diaria, incluso s¨¢bados. Vamos avanzando. Como contrapunto dir¨¦ que en Catalu?a funciona una emisora estatal ¨ªntegramente en catal¨¢n. ?Ser¨¢ que los valencianos no pagamos suficientes impuestos?

Quiero finalmente hacer una llamada para que los poderes p¨²blicos eviten los llamados agravios comparativos y tambi¨¦n que entre todos contribuyamos a evitar que la Constituci¨®n sea papel mojado como fueron las Leyes Fundamentales de nefasto recuerdo, pues pienso que nuestra Constituci¨®n es una herramienta b¨¢sica para mejorar nuestra convivencia siempre bajo el imperio de la ley./