Nueva retenci¨®n de "Al filo de la oscuridad"

Aunque hace m¨¢s de dos a?os que Televisi¨®n Espa?ola autoriz¨® el dobjale castellano de la pel¨ªcula de Lewis Milestone Al filo de la oscuridad, prohibido en nuestro pa¨ªs desde 1943, fecha de realizaci¨®n, por suponer un ataque al nazismo, no hab¨ªa conseguido hasta ahora el visto bueno para su proyecci¨®n. Anunciada, por fin, para hoy, ha sufrido una nueva retenci¨®n, que el departamento de Prensa no se ha molestado en justificar.Incluso la pel¨ªcula sustituta ha sido improvisada de tal manera que son distintos los t¨ªtulos de los que informan en Prado del Rey; mientras en un departamento dan como seguro La mariposa amarilla, de Ralph Thomas, otros garantizan que ser¨¢ El cerebro de Frankenstein la que veremos esta noche en el espacio Largometraje, a las 22.00 horas, por la segunda cadena.

Siendo una copia de esta ¨²ltima la que ayer por la ma?ana se preparaba en la cabina de telecine, parece garantizada su proyecci¨®n. Es muy poco serio, de cualquier forma, que los espa?oles no podamos conocer en 1981 una pel¨ªcula b¨¦lica exhibida en todo el mundo desde los a?os cuarenta sin reparos ni censuras. Las cr¨ªticas extranjeras sit¨²an Al filo de la oscuridad entre las mejores pel¨ªculas de su director, Lewis Milestone, y entre los mejores guiones de Robert Rossen.

La resistencia noruega era contemplada por vez primera en el cine como una estructura dram¨¢tica que superaba la an¨¦cdota para transformarla en una consideraci¨®n general sobre el nazismo y la necesidad de vencerlo.

Si Televisi¨®n Espa?ola se permiti¨® hace una semana emitir los fragmentos mutilados en su d¨ªa de Sue?os de verano (aunque sin doblarlos previamente, continuando as¨ª la p¨ªcara tradici¨®n actual de algunas distribuidoras comerciales que, ahorr¨¢ndose el coste de un nuevo doblaje, aseguran que los fragmentos que ahora muestran mudos corresponden a la versi¨®n original de la pel¨ªcula. Es el caso, por ejemplo, de Con la muerte en los talones), parec¨ªa l¨®gico que Televisi¨®n Espa?ola no considerara horrible la exhibici¨®n de una pel¨ªcula que se limit¨® a condenar moralmente la ideolog¨ªa de quienes fueron vencidos en la segunda guerra mundial.

El cerebro de Frankenstein data de 1968. Realizada por uno de los m¨¢s claros especialistas del g¨¦nero, Terence Fisher, a quien se deben numerosos y excelentes t¨ªtulos que se inspiran en novelas cl¨¢sicas, pero que en sus manos toman variantes imprevisibles. La pel¨ªcula de hoy actualiza el mito de Frankenstein, desprendi¨¦ndolo de efectismos f¨¢ciles para aplicarlo al problema ¨ªntimo de un hombre que debe aceptar el cambio de su cuerpo, aunque no de su cerebro. La tragedia de su nueva identidad es la base de esta nueva adaptaci¨®n de la novela de Mary Shelley.