El yate real golpea el Pe?¨®n

La explicaci¨®n dada por el Foreign Office debido a la cancelaci¨®n del rey Juan Carlos a la boda real no es lo suficientemente clara. Declarar, como dice el Ministerio de Asuntos Exteriores brit¨¢nico, que Gibraltar es solamente un sitio conveniente para empezar un crucero de luna de miel no es aceptable. Tampoco sirve la sugerencia de que la presencia del pr¨ªncipe y de la princesa de Gales en el Pe?¨®n es ?simplemente un asunto privado?. La sensibilidad de los espa?oles no puede ser m¨¢s clara, cuesti¨®n que ya fue resaltada por el ministro de Asuntos Exteriores, P¨¦rez-Llorca, al entrevistarse con lord Carrington en Bruselas. ( ... )La familia real est¨¢ constitucionalmente obligada a tomar en cuenta las directrices del Gobierno cuando desea trasladarse fuera. Por tanto, hay diferentes explicaciones posibles. Una es que el Gobierno no anticip¨® la reacci¨®n espa?ola y, cuando Madrid expuso claramente su postura, ya estaban demasiado comprometidos. Esto ser¨ªa un error inexcusable. Otra posibilidad ser¨ªa que el Gobierno conociese la reacci¨®n espa?ola y no le importase, lo cual ser¨ªa peor. Una tercera explicaci¨®n, la peor de todas, ser¨ªa que eI Gobierno sab¨ªa que habr¨ªa problemas, pero deliberadamente aconsej¨® a la familia real que siguiera adelante en sus planes para demostrar la actitud irracional de los espa?oles hacia Gibraltar. Esto parece improbable, pero es lo que se cree ampliamente en Espa?a. (... )

Este incidente no necesita forzosamente da?ar ni las relaciones hispano- brit¨¢nicas ni las ambiciones de Espa?a hacia Europa a largo plazo. ( ... )