El pregonero Francisco Fern¨¢ndez Ord¨®?ez

"Tengo que estudiarlo, porque nunca he hecho pregones. Tengo afici¨®n literaria, pero de pregonero es la primera vez en mi vida". Francisco Fern¨¢ndez Ord¨®?ez, el ministro de Justicia, va a estrenar el pr¨®ximo d¨ªa 29, en Santa Pola, localidad donde veranea y adonde acude con asiduidad, una faceta hasta ahora desconocida para ¨¦l: la de pregonero de las fiestas que se celebrar¨¢n la primera semana de septiembre en honor de la Virgen de Loreto."Esto es como el que firma una letra: que en el momento de firmarla nunca piensa que se la van a pasar al cobro, y cuando llega el momento se vuelve a llevar otra sorpresa. Lo mismo me pas¨® a m¨ª. Hace cinco o seis meses me pidi¨® el alcalde que hiciera el preg¨®n y dije que bueno. Y ahora veo que va en serio y he de prepararlo. Para m¨ª esto es una prueba de confianza de las gentes de Santa Pola y lo acepto. Me gusta".

Y es que a Fern¨¢ndez Ord¨®?ez todo lo que se relacione con Santa Pola le gusta. Tanto que, como ¨¦l mismo dice, "yo soy un se?or que vive en Madrid y que a veces viene a Santa Pola, pero que aspira a ser un se?or que vive en Santa Pola y que a veces va a Madrid".

All¨ª, en su chal¨¦ Mary Paz, junto al mar, descansa, pasea en bici y juega con sus dos perros pastores alemanes, Iv¨¢n y Roco, este ¨²ltimo hermano de otro igual que tiene Adolfo Su¨¢rez y que le regal¨® a su esposa un m¨¦dico de Avila criador de perros. Tambi¨¦n hace sus pinitos de pesca en barca, pensando quiz¨¢ en el d¨ªa en que se venga a vivir aqu¨ª definitivamente, "porque en Santa Pola todo el mundo vive volcado hacia el mar. Incluso gentes cuya profesi¨®n no tiene ninguna relaci¨®n con el mar tienen una barca para salir a pescar". No obstante, ¨¦l se declara de tierra adentro y no muy aficionado a las excursiones mar¨ªtimas. Aunque, quiz¨¢ por aquello de la novedad, ayer mismo en su jornada marinera hab¨ªa pescado un pez "de este tama?o" -indicaba, separando las manos-, que, junto con otros mucho m¨¢s peque?os, hab¨ªa ido a parar a la sopa que hab¨ªa preparado su mujer para comer.

"Durante las vacaciones escribo mucho. Cosas que ten¨ªa pendientes. Nada de importancia. No; la poes¨ªa la dej¨¦ hace ya tiempo. Son notas, ideas que tengo apuntadas y, que luego desarrollo. De todas formas, en el mar se trabaja menos de lo que parece, porque el mar no induce a la actividad. Es contemplativo. En general, no se aprovecha mucho el tiempo".

Junto con su hermano Jos¨¦ Antonio, que estos d¨ªas se encontraba en Santa Pola, preparaba una excursi¨®n a Bicorp y a Alpera para ver pinturas rupestres. Con los niapas extendidos sobre la mesa, ironizaba: "Ya ves cu¨¢l es en estos momentos la preocupaci¨®n del ministro de Justicia: encontrar una carretera por donde llegar a las pinturas". Porque de la ley de Divorcio todav¨ªa se resiste a hablar. Tan s¨®lo ha comentado las primeras demandas que se han presentado. "Una vez m¨¢s, este pueblo ha demostrado su madurez. Aquellos que cre¨ªan que los primeros d¨ªas iba a haber grandes colas se han equivocado". Y poco m¨¢s sobre este tema, del que, por otra parte, ha tenido ampliamente informados a los vecinos de Santa Pola a trav¨¦s de la asociaci¨®n de vecinos. "Ya antes de empezar a discutir la ley tuve una reuni¨®n en la asociaci¨®n de vecinos, con una pizarra incluso, en la que explicaba lo que quer¨ªamos hacer con esta ley". Luego, posteriormente, les ha seguido informando en sucesivas reuniones. "Es que se me presentan aqu¨ª los vecinos y es muy dif¨ªcil resistirse a la presi¨®n de los se?ores que viven al lado. Con tus vecinos no te puedes negar".

Aun as¨ª, todav¨ªa hay gente que le para por la calle para preguntarle cosas. "Me paseo en bicicleta por el pueblo, sin escolta ni nada. Y la gente me para para preguntarme cosas sobre el divorcio. Hablo con ellos y luego sigo paseando, hasta la pr¨®xima parada".

Ahora piensa en el preg¨®n, en su estreno como pregonero. "Es que no he hecho nunca pregones, aunque creo que el pol¨ªtico, por vocaci¨®n, ha de ser un poco pregonero. He hecho de todo: m¨ªtines, discursos, conferencias, libros; de todo, menos de pregonero".