La patronal del f¨²tbbol comienza a ceder
La patronal del f¨²tbol intent¨® echar al p¨²blico contra los jugadores desde el comienzo de la huelga. El pasado fin de semana, Jos¨¦ Luis N¨²?ez poco menos que pidi¨® la intervenci¨®n de la polic¨ªa para perseguir a quienes le merec¨ªan el mismo respeto que los secuestradores de Quini. Esta semana se ha iniciado con una reuni¨®n en la que, junto a la amenaza de alinear a aficionados y juveniles, los dirigentes han accedido a conceder junto al pago de las deudas la supresi¨®n de la norma sub-20. Federaci¨®n y clubes quieren que la AFE desconvoque la huelga y comienzan a poner los medios para que ello se produzca. Pero amenazan para enmascarar su derrota. Quieren meter un gol consumido el tiempo reglamentario. No quieren admitir el triunfo de la AFE.
A los espectadores del f¨²tbol que son mayores de edad, que saben lo que es hacer huelgas, les quiere convertir la patronal futbol¨ªstica en seres irracionales, incapaces de comprender las razones de peso que expone la AFE. A los aficionados quieren hacerles creer que los jugadores les van a birlar la parte alicuota de sus contribuciones como socios. Incapaces de resolver los problemas quieren descargar sobre los profesionales del f¨²tbol sus propias ineptitudes. La patronal futbol¨ªstica no supo encontrar la comisi¨®n id¨®nea para negociar un acuerdo. El nuevo emperador del Paralelo s¨®lo tuvo como recurso la humillaci¨®n de sus interlocutores ech¨¢ndoles encima de la mesa la promesa de cien millones de pesetas. Los corifeos, que los tiene, estuvieron a punto de convertirle en las primeras p¨¢ginas de la semana pasada en un dios del Olimpo. Pero N¨²?ez es hombre al que sus ideas matutinas le son indigestas por la tarde y las que medita por la noche resultan monstruosas a la luz del sol. Por eso ofrece y quita con la facilidad de un vendedor de baratijas. Si fuera catal¨¢n tendr¨ªa un sentido fenicio del negocio y ser¨ªa mucho m¨¢s pragm¨¢tico.
Porta es el m¨¢s h¨¢bil de los dirigentes del f¨²tbol espa?ol. En un conflicto exclusivamente suyo, entre otras razones porque se planteaba una soluci¨®n a promesas incumplidas, supo poner de parapeto a la comisi¨®n de clubes. Porta se meti¨® en un burladero para ver c¨®mo lidiaban el toro de la huelga sus poderdantes. Porta no quiere que nadie le roce la taleguilla.
Los presidentes se reunieron ayer y decidieron amenazar con la alineaci¨®n de sus jugadores aficionados y juveniles corno ¨²nica salida a la huelga. Pero debajo de esa amenaza, que no tiene otra intenci¨®n que salvar el tipo para no seguir haciendo el rid¨ªculo, se esconde el deseo de arreglar el tema. Los clubes conceden el pago de las deudas y la supresi¨®n de la norma sub-20, que eran puntos b¨¢sico para la AFE, y aceptan estudiar aunque de manera sibilina, los temas del fondo de garant¨ªas y la participaci¨®n en publicidad.
Se trata ahora de enmascarar la victoria de la AFE. A la patronal futbol¨ªstica le cuesta trabajo reco nocer que ha habido triunfo de los futbolistas. Estos, ahora, resueltos los dos puntos fundamentales, tendr¨¢n que aflojar la presi¨®n. Y habr¨¢ quien dir¨¢, cuando desconvoquen la huelga, que ha triunfado la Federaci¨®n, que han vencido los clubes y que los rojos al pared¨®n.
No ser¨ªa bueno enquistar m¨¢s el tema. La vuelta a la competici¨®n ser¨¢ bien recibida y desde luego no supondr¨¢, por dos semanas de retraso, ning¨²n grave contratiemp para la selecci¨®n nacional. Los ale manes, por ejemplo, finalizar¨¢n sus competiciones oficiales dos se manas antes de que se inicie el campeonato del mundo. Llegar¨¢n rodados y en plena forma. Los futbolistas pierden el tono de la competici¨®n en las largas y aburridas concentraciones. Lo que ocurre es que aqu¨ª surgen, por todas partes, defensores de las f¨®rmulas argentinas. Como dice un amigo mio, todo el plan Menotti no habr¨ªa servido de nada de no haber sido por la ayuda arbitral en los encuentros contra Hungr¨ªa y Francia. 0 de haber entrado aquella pelotita holandesa que en el ¨²ltimo minuto de la final se estrell¨® en un poste. Las concentraciones prolongadas provocan un desgaste psicol¨®gico enorme. El atleta de elite rinde mucho m¨¢s en un ambiente natural. Est¨¢ contraindicado mantener prolongadamente a un hombre joven en ambiente monacal. Sobre todo de cintura para abajo. Los holandeses y los alemanes hacen incluso una tregua dentro del mundial para que las mujeres de los futbolistas puedan participar de la concentraci¨®n durante un par de d¨ªas. Y al que ni siquiera tiene novia se le manda a la calle para que la busque.
Los jugadores no son esquiroles por participar en los tomeos europeos. Precisamente porque su huelga es de solidaridad y no desean dafio alguno para sus clubes. Su enemigo es la Federaci¨®n Espa?ola.
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