Normalidad laboral en British Leyland

Los trabajadores de la British Leyland (BL) retornaron ayer al trabajo, dos d¨ªas despu¨¦s de haber comenzado la huelga. Las plantas que la v¨ªspera hab¨ªan rechazado la oferta de la direcci¨®n de un aumento salarial de un 3,8% decidieron ayer acatar la decisi¨®n de la mayor¨ªa. La amenaza de la direcci¨®n de cerrar las f¨¢bricas que se declarasen en huelga ha triunfado. El presidente de BL, Michael Edwardes, no quiso, sin embargo, pavonearse de su victoria al borde del precipicio, sabiendo que la pr¨®xima vez su estrategia podr¨ªa no resultar. Por tercera vez consecutiva, la l¨ªnea dura de Edwardes ha logrado sus prop¨®sitos, salt¨¢ndose a la torera la oposici¨®n de los enlaces sindicales, apelando directamente a la fuerza laboral y a los l¨ªderes sindicales a nivel nacional.En los casos anteriores se hab¨ªa tratado de la expulsi¨®n de un militante sindical, Derek Robinson, y de forzar a los trabajadores a aceptar cambios en las normas laborales. En este caso, los enlaces sindicales se hab¨ªan apresurado a convocar una huelga en cuanto la direcci¨®n de BL les ofreci¨® un m¨¢ximo aumento salarial de un 3,8%.

El miedo al paro y la aceptaci¨®n por la mayor¨ªa de los l¨ªderes sindicales nacionales de que "no hab¨ªa m¨¢s dinero" en los fondos de la BL orientaron el resultado de la votaci¨®n anteayer de los 58.000 trabajadores manuales de la divisi¨®n de coches de la empresa nacional.

Ayer, sin embargo, la gran mayor¨ªa de la Prensa brit¨¢nica de calidad, admitiendo la victoria de Edwardes, ped¨ªa una reforma de las estructuras de negociaciones laborales en la British Leyland, especialmente de cara al esperado momento en que esta empresa comience a cosechar beneficios. Los trabajadores pedir¨¢n entonces tambi¨¦n realismo, pues el comentario general de los trabajadores ayer era que "un 3,8% es mejor que nada".