Clausurado en Roma el congreso sobre "Las ra¨ªces cristianas de las naciones europeas"

Se clausur¨® ayer en Roma el congreso internacional sobre Las ra¨ªces cristianas de las naciones europeas, al que han participado m¨¢s de doscientos intelectuales de veintid¨®s naciones diversas, pero con una presencia masiva de exponentes de la Europa del Este, y sobre todo polacos.

SI, por una parte, como hab¨ªa afirmado Juli¨¢n Mar¨ªas, la idea de reunir hombres de cultura de las dos Europas era ya un hecho positivo, no cabe duda que, por otra parte, un cierto faraonismo del congreso le ha quitado parte de aquella eficacia que hubiera podido tener. El mismo Juan Pablo II, en el discurso a los participantes, tuvo tina punta de iron¨ªa cuando afirm¨® que en un problema tan grave y actual como el de la reunificaci¨®n de Europa ?no basta quedarse en el ¨¢mbito puramente acad¨¦mico?.Trat¨¢ndose de una b¨²squeda de posibles acercamientos entre la Europa Occidental y capitalista y la Europa comunista a trav¨¦s de las ra¨ªces cristianas de anta?o, que hab¨ªan forjado la unidad europea de la edad media, uno de los momentos que se esperaban de mayor tensi¨®n en este congreso era el anunciado debate entre el fil¨®sofo marxista franc¨¦s Roger Garaudy y el te¨®logo de Cracovia Jozef Zischner. Pero en realidad, no hubo confrontaci¨®n ni di¨¢logo. Cada Lino habl¨® por su cuenta. El te¨®logo Zischner, que es, al parecer, uno de los ide¨®logos de Solidaridad, se limit¨® a la tem¨¢tica del trabajo, acusando duramente la teor¨ªa marxista que, dijo ?ha cesado de ser un m¨¦todo de examen del trabajo humano para convertirse en una propaganda al servicio de una batalla ideol¨®gica?. Y despu¨¦s se ech¨®, lanza en ristre, a una exaltaci¨®n patri¨®tica de su pa¨ªs con estas palabras: ?Polonia est¨¢ en el coraz¨®n de Europa. Es uno de los pa¨ªses m¨¢s interesantes del mundo entero. Su papel religioso es conocido y apreciado en todas partes. Tambi¨¦n el patriotismo polaco gusta al mundo entero. Por eso, los asuntos de Polonia no interesan s¨®lo a los polacos. Lo que est¨¢ sucediendo en nuestro pa¨ªs tiene resonancia en Europa y en todo el mundo?.

Objetividad

M¨¢s fiel al tema sobre Marxismo y cristianismo fue el fil¨®sofo Garaudy. Dijo que se trata de dos realidades que deben mirarse con objetividad: ?Hay que acabar con el prejucio de oponer un cristianismo ideal?, dijo Garaudy, ?a un socialismo real o un marxismo ideal, o un marxismo ideal a una cristiandad tal como hoy existe. En el campo pol¨ªtico, dig¨¢moslo claramente, no existe en el mundo ni una sociedad cristiana ni una sociedad socialista?.Seg¨²n el ex comunista franc¨¦s, a pesar de que se sigue hablando de una crisis del marxismo y del cristianismo, en realidad ?ni la fe cristiana ni el marxismo est¨¢n en crisis. Lo que est¨¢ en crisis es la cultura occidental, en la que ambas realidades se expresan?. Dijo que es provinciano considerar el di¨¢logo marxismo-cristianismo como una cosa que debe ser analizada s¨®lo por cristianos y marxistas, cuando hoy "todos los problemas adquieren dimensiones planetarias?.

Refiri¨¦ndose al congreso, en el que acept¨® participar, dijo que era l¨®gico que el papa Wojtyla deseara un di¨¢logo sobre las ra¨ªces del cristianismo cuando su pa¨ªs est¨¢ limitado por los comunistas, los ortodoxos y los protestantes. ?Lo malo fue?, dijo Garaudy, ?que en el congreso han estado pr¨¢cticamente ausentes, tanto los comunistas oficiales, como los ortodoxos y los protestantes?.