El Real Madrid no tuvo dificultades para vencer
El Madrid no tuvo dificultades para vencer al Valladolid. El equipo que el pasado domingo bati¨® a la Real Sociedad anoche fue un aut¨¦ntico bomb¨®n. El empate que logr¨® la pasada temporada fue esta vez un sue?o irrealizable. Hubo cuatro goles, pero el encuentro ser¨¢ mejor olvidarlo. Los tantos esta vez s¨®lo fueron ruido; faltaron las nueces.El Real Madrid festej¨® anoche los cuarenta a?os del gas¨®geno. En la posguerra, a falta de gasolina, los veh¨ªculos a motor tuvieron que quemar c¨¢scaras de almendra y carb¨®n para poder circular. Con aquellos viejos cacharros no se pod¨ªa tumbar aguja en Perdices. Y de cuando en cuando el conductor deten¨ªa el coche, recargaba de combustible el hermoso dep¨®sito exterior y continuaba el viaje. El Madrid circul¨® futbol¨ªsticamente anoche con la fuerza del gas¨®geno Poca potencia en los motores, poquita velocidad y parones para cargar energ¨ªa.
Con ese f¨²tbol de trotecito lento hay que comenzar a distinguir, como tambi¨¦n suced¨ªa en los a?os cuarenta, la achicoria del caf¨¦. Hay que comenzar a pedir el f¨²tbol-f¨²tbol para no confundirlo con el juego actual. El espect¨¢culo que se brinda en la actualidad es de lo m¨¢s pobret¨®n. Es como si se hubiera adoptado tambi¨¦n aquella vieja costumbre de sacar a provincias obras teatrales de ¨¦xito con otra compa?¨ªa y otros decorados. Los decorados ra¨ªdos y los actores segundones los tenemos hasta en los estrenos. O sea, que todos los espectadores de f¨²tbol sufrimos id¨¦ntica discriminaci¨®n. El perjuicio ha sido general.
Si el f¨²tbol espa?ol no mejora, tendremos que darle las gracias a Saporta por haber vendido el 65% de las entradas del Mund¨ªal-82 en el extranjero. De aqu¨ª al pr¨®ximo junio el p¨²blico va a estar ah¨ªto de partidos propicios a la somnolencia y al cr¨®nico aburrimiento. El Valladolid hizo el domingo la proeza de ganarle a la Real. A Chamart¨ªn vino va satisfecho de su acci¨®n. Para celebrarlo se encerr¨® en su ¨¢rea y dej¨® todo el terreno libre al Madrid. Tanto que Carcel¨¦n se pudo dedicar a misiones de ceritrocampista. Tanto que Camacho fue m¨¢s extremo que defensa. Tanto que la zaga madridista ¨²nicamente tuvo que vigilar al argentino Al¨ª Navarro, que es especialista en caer en el fuera de juego. Al¨ª busca todas sus oportunidades detr¨¢s del defensa, esperando al fallo de ¨¦ste.
Boskov tard¨® medio tiempo en darse cuenta de que los espectadores estaban hasta el gorro del encuentro. Tras el descanso sali¨® Ito y se anim¨® el juego. En un partido de casi guante blanco y con un adversario consciente de su propia debilidad, hac¨ªan falta delanteros natos y rematadores de larga distancia. Desde fuera del ¨¢rea intent¨® el gol Cort¨¦s y estrell¨® un soberbio balonazo en el poste, y desde fuera de la olla consigui¨® Stielike abrir la cuenta de goles.
El Valladolid fall¨® m¨¢s de lo esperado. Aunque Mor¨¦ movi¨® bien a sus compa?eros y Gilberto estuvo siempre en su sitio, la zaga anduvo insegura y Fenoy se dedic¨® a saludar a los amigos en los balones bombeados. Ante un portero que dio tantas facilidades no cab¨ªa otro recurso que cruzar pelotas desde los extremos. La funci¨®n de Ito fue esa. Bast¨® con que el salmantino comenzara a ejercer de extremo para que el Valladolid se desmoronara.
El tanto de los visitantes fue la compensaci¨®n a las dos magn¨ªficas ocasiones de marcar que tuvo Mor¨¦, y que no supo aprovechar. El Madrid, sin arriesgar un alamar, se hizo con el triunfo. Todo fue bastante sencillo, a pesar de la tardanza en obtener el primer gol.
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