Vinader, ma?ana
( ... ) Una vez m¨¢s, el delito del informador ha sido el de informar. Xavier Vinader ha sido procesado por publicar una entrevista en la que el ex polic¨ªa Ros Frutos contaba, con pelos y se?ales, c¨®mo se infiltra la extrema derecha en ETA. Luego, dos personas mencionadas en aquellas declaraciones fueron asesinadas. Para los acusadores del periodista, ETA habr¨ªa operado como los c¨ªent¨ªficos sovi¨¦ticos, seg¨²n lo narrado m¨¢s arriba: en vez de investigar, para obtener la bomba at¨®mica o perpetrar atentados mortales, unos y otros se conforman con actuar a partir de los datos del peri¨®dico.Nos causar¨ªa sonrojo tal hip¨®tesis si el caso no fuese tan dram¨¢tico. Sobre el compa?ero que realiz¨® aquella entrevista pende la amenaza de una condena de veintisiete a?os de c¨¢rcel. En cambio, los graves hechos que denunciaba en el reportaje incriminado nunca fueron investigados. En cambio, tampoco se ha podido aplicar todo el rigor de la ley sobre los asesinos. En el fondo, desde la Roma cl¨¢sica a hoy ha sido siempre m¨¢s f¨¢cil despedazar al mensajero portador de las malas noticias -en este caso, al periodista que recog¨ªa un testimonio sobre las infiltraciones de la extrema derecha- que acabar con ellas. En el caso de los cr¨ªmenes de ETA, adem¨¢s, una forma eficaz de combatir a la organizaci¨®n terrorista es desmontar su aparato de informaci¨®n, en vez de evitar que los etarras lean los peri¨®dicos.
, 12 de noviembre
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