Veintis¨¦is m¨¦dicos defensores de la sanidad p¨²blica, sancionados por el Insalud de Las Palmas

Un total de veintis¨¦is m¨¦dicos de la residencia de la Seguridad Social de Las Palmas han sido represaliados por defender los intereses del sector p¨²blico, y oponerse a la pol¨ªtica actual de la Delegaci¨®n Provincial de Insalud, dominada por un poderoso grupo de m¨¦dicos con fuertes intereses en la medicina privada canaria.

Uno de los doctores represaliados es el jefe del servicio de anatom¨ªa patol¨®gica de la residencia, Antonio Aguacil, al que le han abierto expediente disciplinario con el prop¨®sito de despedirle. Todos sus compa?eros coinciden en afirmar que los cargos que le imputan son infundados y s¨®lo tienen el calificativo de calumnias. El propio Antonio Aguacil, que fue nombrado presidente de la Asociaci¨®n Pro Hospitales P¨²blicos de Las Palmas, asociaci¨®n que lleva once meses en el Gobierno Civil esperando ser registrada y ya ha servido de modelo para otras creadas en Espa?a, ha manifestado a este peri¨®dico que ?nunca he sabido de qu¨¦ se me acusaba? y que tiene el prop¨®sito de presentar una querella por las calumnias que figuran en el expediente contra su persona.Por otro lado, el resto de los doctores han sido sancionados por firmar una carta publicada en la Prensa local, en donde argumentaban que los m¨¦dicos con intereses en cl¨ªnicas privadas no deber¨ªan ocupar cargos p¨²blicos. Al mismo tiempo, hace unos d¨ªas fue llamado a declarar por la direcci¨®n de Insalud el doctor Diego Falc¨®n, jefe del servicio de radiolog¨ªa de la residencia y miembro del comit¨¦ de empresa, por hacer unas manifestaciones a Televisi¨®n Espa?ola en Canarias sobre la situaci¨®n penosa de los ambulatorios.

La ra¨ªz de este problema se remonta al a?o 1979, cuando la direcci¨®n de la Delegaci¨®n Provincial de Insalud deja de estar en manos de funcionarios p¨²blicos para ser ocupada por m¨¦dicos privados. Es cuando se produce el nombramiento de director de la residencia de la Seguridad Social al doctor Luis Martel, anestesista de la cl¨ªnica San Roque y relacionado con otras iniciativas sanitarias de car¨¢cter privado. Tambi¨¦n es nombrado director del Hospital Materno-Infantil, que entrar¨¢ en funcionamiento el pr¨®ximo a?o, el doctor Ricardo Rueda, que es jefe del departamento de tocoginecolog¨ªa de la residencia de la Seguridad Social y, al mismo tiempo, propietario de un centro m¨¦dico privado, accionista de la Cl¨ªnica Cajal y delegado provincial del partido Fuerza Nueva. Y, por ¨²ltimo, el pasado mes de julio era nombrado director provincial de Insalud al doctor Garc¨ªa-Talavera, que es jefe de unos laboratorios privados que se encuentran a menos de cincuenta metros de la residencia de la Seguridad Social.

No deja de resultar parad¨®jico que el juez-instructor nombrado en Madrid sea miembro del partido Fuerza Nueva y que figur¨® en las listas de las ¨²ltimas elecciones generales de Uni¨®n Nacional. Asimismo, el doctor, al que se pretende despedir, denunci¨® una serie de irregularidades entre diversos departamentos de la residencia de la Seguridad Social y las cl¨ªnicas privadas mucho antes de estos nombramientos.

En los c¨ªrculos sanitarios de Las Palmas existe gran indignaci¨®n ante el expediente disciplinario que se ha abierto contra el doctor Aguacil, debido a su trayectoria como profesional de la medicina. Formado en la facultad de Madrid, y tras dos a?os de la cl¨ªnica de Puerta de Hierro, Antonio Aguacil se especializ¨® como pat¨®logo en la Universidad de Minnesota, en Estados Unidos, en donde residi¨® cuatro a?os. En 1976, regresa a Las Palmas, donde es nombrado jefe del servicio de anatom¨ªa patol¨®gica, que alterna con la docencia en el Colegio Universitario de Medicina de Las Palmas.