Muere la mezzosoprano Ana Mar¨ªa Iriarte, la mejor Beltrana

La mezzosoprano Ana Mar¨ªa Iriarte ha fallecido el d¨ªa 4 de febrero en Valencia a la edad de 98 a?os. Es muy dif¨ªcil describir en pocas palabras la magnitud del legado musical que nos deja, pero es todav¨ªa m¨¢s complicado resumir sus virtudes humanas como cantante, madre y maestra de tantos y tantas cantantes j¨®venes de este pa¨ªs.

Debut¨® en 1945 en el Teatro Principal de Valencia con El So?ador del maestro Giner a la edad temprana de 18 a?os, compaginando el estudio en el Conservatorio de Madrid con la interpretaci¨®n, siendo una de sus cualidades principales, la disciplina en el estudio y la perfecci¨®n. Eso la llev¨® a estudiar dentro y fuera de Espa?a con las mejores, como Ramona Nieto, Lola Rodr¨ªguez Arag¨®n o Elvira Hidalgo, con interpretaciones de gran relevancia como Cavalleria Rusticana, Carmen y La Favorita.

En 1951 se desplaz¨® a Viena para seguir su formaci¨®n y perfeccionar en el ¨¢rea de oratorio, opera y lied, a lo que prosigui¨® una amplia gira por Espa?a, donde volvi¨® en 1952 para recibir el premio Nacional de Teatro y actuar en el Festival de Granada con la puesta en escena del Amor Brujo. Con posterioridad fue galardonada con el Gran Prix du Disque en Francia, en cuyo pa¨ªs se estableci¨® en 1957 para el estudio de la ¨®pera francesa, bajo la batuta de Pierre Bernac. En 1956 el Teatro de la Zarzuela reabri¨® sus puertas con la Zarzuela Do?a Francisquita, cuyo papel estelar, Beltrana, fue interpretada por Ana Mar¨ªa Iriarte en una actuaci¨®n estelar que se ha quedado como referencia en los escenarios y en la m¨²sica grabada por Discos Columbia, probablemente las mejores grabaciones de cl¨¢sica que se han hecho en Espa?a.

Entremedias de todo su periplo art¨ªstico y musical, tuvo tiempo para el amor y form¨® un matrimonio ¨²nico con Enrique Inurrieta, director de Discos Columbia, en cuyo cat¨¢logo figuran m¨¢s de 30 discos de zarzuela, opera y canci¨®n espa?ola, que a¨²n hoy son la gran referencia para music¨®logos espa?oles y extranjeros. Esta simbiosis art¨ªstica y compleja la llev¨® a retirarse joven y dejar un legado ¨²nico, por su voz, temple y capacidad art¨ªstica. Sus grandes actuaciones con Manuel Ausensi, dirigidos por el gran Ataulfo Argenta, son piezas de museo que quedan para la posteridad.

A partir de 1982, funda su Escuela de Canto, por la que han pasado muchos j¨®venes talentos, que han logrado triunfar en su vida profesional, gracias a su tes¨®n, generosidad, amor por la m¨²sica, y la Zarzuela en particular, pero sobre todo por el enorme talento que ella atesoraba. En 2006, funda su propia Fundaci¨®n, que lleva su nombre, y se lanza a la producci¨®n de obras in¨¦ditas, como La Celestina, de Nin Culmell, estrenada en el Teatro de la Zarzuela en 2008. Pero sin duda, su sue?o cumplido fue el Concurso Internacional de Zarzuela, celebrado en Gij¨®n y Madrid, que ha sido la cuna de nuevos talentos como Andeka Gorrochategui, Miren Urbieta o Alejandro del Cerro. En esta etapa le acompa?aron muchas personas maravillosas, como Pepe Garcia Quijada, Hilde S¨¢nchez Morales, Alicia Berri, Bel¨¦n Elvira, Oliver D¨ªaz, El¨ªas Romero, Ricardo Francia o Nacho Garc¨ªa, entre otros muchos.

Hoy todos los que la tratamos y la queremos nos congratula saber que, como todos los grandes, no se ha ido, permanece, y seguir¨¢ cantando entre nubes, hasta encontrar a su gran amor, Enrique, con quien mantendr¨¢ vivo el esp¨ªritu de la pareja m¨¢s musical y que m¨¢s ha hecho por la m¨²sica de este pa¨ªs.