La Comunidad, ante la Europa de la segunda generaci¨®n
El 30 de mayo de 1980, el Consejo Europeo transmit¨ªa a la Comisi¨®n el mandato para que propusiera las reformas necesarias para solucionar la crisis que, desde hace casi tres a?os, afecta a la vida comunitaria.El 24 de junio del presente a?o, la Comisi¨®n Europea present¨® un informe que, seg¨²n palabras de su propio presidente, G. Thorn, recog¨ªan las orientaciones de car¨¢cter general que deber¨ªan servir para solucionar los problemas comunitarios de orden interno, as¨ª como para constituir la base para la Europa de la segunda generaci¨®n. En dicho documento, la Comisi¨®n recomendaba la puesta en pr¨¢ctica de una estrategia global que se puede sintetizar en los siguientes tres aspectos:
- Desarrollo de nuevas pol¨ªticas comunitarias (energ¨¦tica, industrial, investigaci¨®n ... ) que estimulen la creaci¨®n de nuevos empleos y favorezcan un nuevo crecimiento econ¨®mico.
- Reforma y readaptaci¨®n de la pol¨ªtica agr¨ªcola com¨²n (PAC) dentro del respeto de los principios de base de la mencionada pol¨ªtica.
- Finalmente, aportar al problema presupuestario las correcciones necesarias, en espera de que el desarrollo de las pol¨ªticas comunes facilite la soluci¨®n deseada.
Si bien puede parecer reiterativo, creo que vale la pena recordar que fue el Reino Unido quien origin¨® la crisis planteando el problema presupuestario, problema que posteriormente fue compartido por la Rep¨²blica Federal de Alemania, al ser ambos Estados importantes contribuyentes al presupuesto comunitario que no ven con buenos ojos que la Comunidad destine la mayor¨ªa de sus recursos propios (aproximadamente el 70%) a su pol¨ªtica agr¨ªcola. Por otra parte, el Gobierno alem¨¢n ha manifestado reiteradamente su oposici¨®n a aumentar los recursos propios (*), por ejemplo, mediante incremento de la base imponible del impuesto sobre valor a?adido (IVA), si antes no hay una verdadera reforma de la PAC que reduzca su porcentaje actual con respecto al total del presupuesto y d¨¦ m¨¢s margen al desarrollo de las dem¨¢s pol¨ªticas. En otras palabras, los alemanes quieren evitar que el gasto agr¨ªcola crezca m¨¢s r¨¢pidamente que los recursos propios, y todo ello, claro est¨¢, ante las perspectivas de una futura Comunidad de doce Estados, con la incorporaci¨®n de pa¨ªses con un importante sector primario.
Resolver el "impasse" de la Comunidad
Volviendo al famoso mandato, a partir del mes de julio los servicios de la Comisi¨®n han procedido a elaborar toda una serie de proposiciones m¨¢s precisas y operativas sobre la estrategia a seguir para resolver la situaci¨®n de impasse en que se halla la Comunidad, propuestas que aparecieron a la luz p¨²blica en el ¨²ltimo Consejo de Luxemburgo, del pasado 26 de octubre.
As¨ª pues, en lo que a la PAC se refiere, se dan una serie de l¨ªneas directrices para los objetivos de producci¨®n y de precios de los principales productos, el funcionamiento de los reg¨ªmenes de intervenci¨®n, las ayudas directas y nacionales, y, finalmente, para una pol¨ªtica, activa de exportaci¨®n agraria. Adem¨¢s, se pone especial ¨¦nfasis en la agricultura mediterr¨¢nea (s¨®lo el 11% del fondo de garant¨ªa se destina a la misma), proponi¨¦ndose toda una serie de acciones para sus regiones, cuya particular situaci¨®n se debe no s¨®lo al nivel de desarrollo, sino tambi¨¦n al car¨¢cter espec¨ªfico de su econom¨ªa, por otra parte fuertemente marcada por la importancia de su agricultura.
Por lo que respecta a las nuevas pol¨ªticas, y a la industrial en particular, la Comisi¨®n de Bruselas considera qu¨¦ la Comunidad tiene que estimular la creaci¨®n y el desarrollo de empresas integradas en una estrategia global a nivel europeo. En efecto, si la industria europea quiere superar el desaf¨ªo tanto norteamericano como japon¨¦s, la Comunidad tiene que adoptar una estrategia industrial comparable a la de las dem¨¢s econom¨ªas industrializadas. Si no es as¨ª, siempre se ver¨¢ obligada a adaptar continuamente su estructura e ir a remolque de los dem¨¢s. En este sentido, se ponen en cuesti¨®n las respectivas pol¨ªticas nacionales que, a menudo discriminatorias, tienden por lo general a crear obst¨¢culos suplementarios a la integraci¨®n.
Ayudas a las regiones con declive industrial
Asimismo en la ¨²ltima reuni¨®n de Luxemburgo las proposiciones de la Comisi¨®n hac¨ªan especial referencia a la pol¨ªtica regional, con una importante modificaci¨®n del Fondo Europeo de Desarrollo Regional (Feder) y, en especial, de su secci¨®n "fuera cuota" de cara a ayudar a las regiones con declive industrial, y a la pol¨ªtica social, con toda una serie de acciones para intensificar la lucha contra el desempleo juvenil y femenino.
En ¨²ltimo lugar, y por lo que al presupuesto se refiere, se considera que su reforma no se podr¨¢ llevar a cabo hasta que el Consejo no haya profundizado sobre los dem¨¢s temas. De todos modos, dicho aspecto fue objeto de discusi¨®n y seguir¨¢ siendo tratado activamente por la Comisi¨®n una vez que se hayan valorado las consecuencias de las propuestas, tanto agr¨ªcolas como no.
Traje comunitario
Es evidente, pues, que el traje comunitario (en palabras que recientemente o¨ª a nuestro secretario de Estado para las Relaciones con las Comunidades Europeas) se est¨¢ quedando peque?o. Si en una empresa, fundada en un principio por seis socios, se produce la entrada de otros y heterog¨¦neos accionistas, es normal que, para la buena marcha de la misma, se replanteen tanto las condiciones de participaci¨®n como la pol¨ªtica a seguir.
Por tanto, es l¨®gico que la empresa comunitaria, empresa econ¨®mica y pol¨ªtica a la vez, tenga la necesidad de ajustarse a la nueva realidad. Y si tenemos en cuenta que nuestro pa¨ªs se quiere incorporar a la misma, se trata de un asunto importante a seguir muy atentamente. ?No les parece?
* Recursos propios = derechos aduaneros + pr¨¦l¨¨vements agr¨ªcolas + 1% de la base imponible del IVA.
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