Claudio Coutinho, un entrenador poco popular para sus m¨¦ritos
La muerte de Claudio Coutinho, al ahogarse en una playa de Copacabana, caus¨® impresi¨®n en el mundillo balomp¨¦dico. Sin embargo Coutinho no era tan popular como merec¨ªa por su historial futbol¨ªstico. S¨®lo ahora lo ha conseguido. Nacido en un pa¨ªs como Brasil, donde los astros del balompi¨¦ nacen por generaci¨®n espont¨¢nea, el entrenador parece importar muy poco. La "torcida" estima que poseen tantos jugadores de t¨¦cnica impecable que basta con reunir a once de ellos -para vencer a cualquiera. Esto pod¨ªa considerarse bastante cierto hace algunos a?os, pero desde los setenta, con el f¨²tbol-fuerza y los sistemas defensivos, la situaci¨®n ha variado, aunque en Brasil sigan convencidos de que lo importante es contar con grandes futbolistas y no con preparadores.Pese a que muri¨® joven -42 a?os-, llevaba una veintena de a?os metido en el ¨¢mbito deportivo, porque fue, antes que nada, preparador f¨ªsico, misi¨®n en la que destac¨® cuando era oficial del Ej¨¦rcito, pasando luego al voleibol, para recalar finalmente en el f¨²tbol, desde 1966, en la selecci¨®n brasile?a. El balompi¨¦ se hab¨ªa convertido en una implacable lucha f¨ªsica -como pudo apreciarse en el Mundial de Inglaterra en 1966-, y la labor de Coutinho dio sus resultados en 1970, cuando Brasil conquist¨® el cetro mundial en M¨¦xico, con genio y fuerza fisiea. Pero los genios aut¨¦nticos cada vez resultan m¨¢s raros y Brasil ya no domina como antes. Era dif¨ªcil imponer disciplina a unos jugadores acostumbrados a jugar a su aire. En 1974, en la Rep¨²blica Federal Alemana, los brasile?os se vieron dominados por los jugadores europeos.
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