La actitud centrista anuncia un plan para anticipar las elecciones, seg¨²n el PSOE
El Estatuto de Autonom¨ªa valenciano puede romper, con consecuencias incalculables, la pol¨ªtica de concertaci¨®n en materia auton¨®mica entre el Gobierno Calvo Sotelo y el Partido Socialista Obrero Espa?ol (PSOE). El n¨²mero dos del PSOE, Alfonso Guerra, hizo ayer serias advertencias en este sentido al Gobierno y a Uni¨®n de Centro Democr¨¢tico (UCD) en la sesi¨®n de la Comisi¨®n Constitucional, en la que UCD y CD lograron introducir serias modificaciones respecto al texto concordado en Benicasim y Pe?¨ªscola, que convierte al Estatuto valenciano en inaceptable para la izquierda, mayoritaria en el Pa¨ªs Valenciano.Por encima de las dificultades para que el texto estatutario, fruto de la coincidencia UCD-CD, se convierta en ley org¨¢nica -este tipo de ley requiere mayor¨ªa absoluta; es decir, 176 votos en el Congreso de los Diputados-, con la oposici¨®n socialista, lo que ayer qued¨® de manifiesto fue la voluntad centrista de imprimir un giro al proceso auton¨®mico valenciano. Fuentes socialistas manifestaron a EL PAIS que esta decisi¨®n y el hecho de que Calvo Sotelo no haya parado la operaci¨®n s¨®lo pueden guardar una relaci¨®n coherente con el prop¨®sito gubernamental, hasta ahora negado, de anticipar las elecciones generales. Las fuentes citadas aseguraron no comprender de otra manera que Calvo Sotelo estuviera dispuesto a perder uno de sus m¨¢s firmes apoyos para permanecer en el poder: la pol¨ªtica concertada con el PSOE en materia auton¨®mica.
La ruptura del PSOE valenciano y el 23-F
En este contexto adquieren significado las apelaciones hechas ayer por Alfonso Guerra a la condici¨®n de consejero del presidente del Gobierno que concurre en el presidente de la Comisi¨®n Constitucional, Emilio Attard, a quien pidi¨® que dirigiera hacia Calvo Sotelo las llamadas a la cordura realizadas a trav¨¦s de los medios de comunicaci¨®n social.La desesperaci¨®n socialista era visible ayer en la Comisi¨®n Constitucional. Los esfuerzos de los socialistas valencianos por alcanzar un Estatuto aceptable para todos se ve¨ªan, premiados con una ? fuga de UCD hacia la derecha?, que dejaba al PSOE, a pesar de sus sucesivas renuncias, sin el protagonismo que le correspond¨ªa en el mejor estatuto posible, mientras que permanec¨ªan los desgarros en el seno del PSOE por no haber mantenido las iniciales aspiraciones auton¨®micas de la izquierda valenciana.
Por eso, cuando Alfonso Guerra atac¨® duramente a UCD por la violaci¨®n del acuerdo con el PSOE y por las consecuencias desestabilizadores de este hecho, y neg¨® a Calvo Sotelo capacidad intelectual suficiente para darse cuenta de que, a cambio de dar ?perras a un pregonero en decadencia?, creaba para s¨ª ?un peligro aut¨¦ntico?, Fernando Abril, destinatario de las diatribas, record¨® a Guerra que en la asamblea que dio su aprobaci¨®n al texto auton¨®mico concordado, el PSOE valenciano se rompi¨® por su ala nacionalista.
Abril record¨® a Guerra que los socialistas valencianos estaban por la v¨ªa del art¨ªculo 151 de la Constituci¨®n, y que ?s¨®lo los elementos de maduraci¨®n de febrero hicieron arriar esa bandera?, en una referencia que pareci¨® relacionar el esp¨ªritu conciliador de los socialistas en la asamblea de Benicasim el 23 de marzo de este a?o al efecto producido en el PSOE por el intento golpista de un mes antes. Cuando, inmediatamente despu¨¦s, Guerra pregunt¨® a Abril, si el ?elemento de maduraci¨®n? a que se refer¨ªa era el intento de golpe de Estado, Fernando Abril tuvo la oportunidad de clarificar el alcance de sus palabras, mediante la siguiente observaci¨®n: ?No me refiero al golpe de Estado, como es obvio, sino al esfuerzo de maduraci¨®n registrado por el PSOE, que en.algunos temas se produjo en febrero ... ?.
La hegemon¨ªa electoral en Valencia
La operaci¨®n centrista parece encaminada a descabalgar a los socialistas de su hegemon¨ªa electoral en Valencia, mediante la confrontaci¨®n de las contradicciones intemas del PSOE con sus sectores nacionalistas, sobre la base de forzar la ruptura entre el enfoque estatal de los socialistas en Madrid y las corrientes autonomistas que tradic¨ªonalin ente nutren las bases del PSOE en el Pa¨ªs Valenciano. Para eso, el giro a la derecha de UCD s¨®lo tiene la utilidad de forzar una ruptura m¨¢s estrepitosa y profunda de la hasta ahora producida en el PSOE valenciano, pol¨ªticamente incapacitado para defender un estatuto con la denominaci¨®n, la bandera y la simbolog¨ªa tradicionales de la derecha.Si el PSOE valenciano, presionado desde Madrid, se situ¨® en la frontera con su electorado cuando acept¨® cambiar de la v¨ªa del 151 a la del 143, introducir una referencia al Reino de Valencia y aceptar la franja azul en la bandera, el texto estatutario resultante de la Comisi¨®n Constitucional le empuja a traspasar esa frontera y situarse en franca oposici¨®n a la pol¨ªtica auton¨®mica de los centristas, aliados ahora a Coalici¨®n Democr¨¢tica.
Por su parte, UCD no puede mantenerse en el poder con una guerra declarada del PSOE, como la que su oposici¨®n auton¨®mica en el Pa¨ªs Valenciano le presagia. Dentro del propio apoyo parlamentario al Gobierno, los diez diputados de Acci¨®n Democr¨¢tica (el partido de Francisco Fern¨¢ndez Ord¨®?ez) se inhibir¨ªa en este problema entre los dos grandes partidos, como ayer lo hizo absteni¨¦ndose en la Comisi¨®n Constitucional el diputado de este sector Luis Berenguer, quien manifest¨® despu¨¦s a EL PAIS: ?No pretendemos santificar los acuerdos obtenidos en Benicasim, pero s¨ª defendemos la necesidad de un acuerdo, y por ello cualquier modificaci¨®n que suponga que el Estatuto sea s¨®lo de una parte de los valencianos y no de la inmensa mayor¨ªa, no podr¨¢ contar con nuestro apoyo?.
El Estatuto de Autonom¨ªa para el Pa¨ªs Valenciano no lleva, pues, camino de lograr los votos necesarios para convertirse en ley org¨¢nica. La operaci¨®n desencadenada por la convocatoria de la Comisi¨®n Constitucional, al filo del fin de a?o, avala, seg¨²n las impresiones m¨¢s solventes recogidas por este peri¨®dico, la opini¨®n de que se ha iniciado la campa?a de unas elecciones anticipadas.
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