Pocas diferencias en los programas de cobertura social de partidos, sindicatos y patronales
La evidencia de los graves problemas que deterioran los sistemas de protecci¨®n en el mundo (mayor lucha por elreparto de la renta en tiempos de crisis econ¨®mica, para generalizado, envejecimiento de la poblaci¨®n), todos ellos acrecentados en Espa?a, ha impedido diferencias sustanciales en las propuestas de reforma durante los ¨²ltimos a?os. Sin embargo las coincidencias no han sido aprovechadas desde el poder; la cr¨ªtica actual m¨¢s generalizada de los sindicatos es que Gobierno y patronal han seguido la t¨¢ctica de degradar el sistema p¨²blico, para facilitar la inversi¨®n del sector privado.
La coincidencia en el diagn¨®stico, e incluso en la elecci¨®n de temas a reformar, ha sido resaltada en el ¨²ltimo Libro Rojo que redactaron el pasado verano expertos del Instiuto de Estudios de Sanidad y Seguridad Social (que, por causa, el Gobierno no ha publicado, al entender que no refleja la postura de la Administraci¨®n). Ciertamente, no resulta extra?a: al menos, tiene un antecedente impactante en la Constituci¨®n, redactada por los grupos pol¨ªticos mayoritarios y refrendada en 1978.El art¨ªculo 41 de la Constituci¨®n dice: "Los poderes p¨²blicos mantendr¨¢n un r¨¦gimen p¨²blico de SS para todos los ciudadanos, que garantice la asistencia y prestaciones Sociales sufientes situaciones de necesidad, especialmente en caso de desempleo. La asistencoia y prestaciones complementarias ser¨¢n libres". Tambi¨¦n es especialmente, imperativo el art¨ªculo 50: "Los poderes p¨²blicos garantizar¨¢n, mediante pensiones adecuadas, y peri¨®dicamte actualizadas, la suficiencia econ¨®mica a los ciudadanos durante la tercera edad".
Pero la extensi¨®n de la SS a todos los ciudadanos no est¨¢ su jeta a ning¨²n plazo. Cabr¨ªa universalizar, de una tacada (la propuesta del Gobierno es empezar por la asistencia sanitaria) o generalizarla por ampliaciones sucesivas, pr¨¢ctica caracter¨ªstica del r¨¦gimen franquista, cuyas leyes fundamentales conten¨ªan un mandato semejante, jam¨¢s agotado en su realizaci¨®n. Y todas las fuerzas sociales, incluso la patronal, desean el sistema universalizador, yendo m¨¢s all¨¢ de sus programas iniciales.
En las alternativas de partidos pol¨ªticos y fuerzas sociales, algunos ya apartados de sus primitivas ofertas, destacan los fundamentos comunes en materia de financiaci¨®n del sistema, incrementando las aportaciones del Estado. S¨ª hay matices importantes en materias de estructura, organizaci¨®n y gesti¨®n de los servicios, y diferencias de alguna entidad en ciertas, manifestaciones de acci¨®n protectora, particularmente en desempleo, protecci¨®n familiar y pensiones.
Las alternativas m¨¢s "depuradas, completas y profundas", en expresi¨®n del Libro Rojo, son las que proceden de las organizaciones sindicales (UGT, en particular) y de la CEOE. El hecho resulta curioso, pues los partidos pol¨ªticos saben que los temas de sanidad y protecci¨®n social son absolutamente prioritarias entre los electores, sobre todo en tiempo de crisis. En s¨ªntesis, las posturas eran hasta hace varios meses han sido:
Universalizaci¨®n. Los cuatro partidos mayoritarios, los sindicatos y la CEOE demandan este objetivo, si bien UCD no considera apropiada la actual situaci¨®n econ¨®mica para proceder a dicha extensi¨®n, de inmediato (en la Ley B¨¢sica de Empleo. (dej¨® fuera de protecci¨®n a quienes buscan primer empleo, aut¨®nomos, algunos agrarios, madres trabajadoras...). La CEOE propugnaba un necesario gradualismo.
Niveles protectores. Todos aceptan la existencia de un nivel b¨¢sico (el universal, a financiar exclusivamente v¨ªa fiscal) y otro profesional, pagado con cotiza ciones sociales. UGT quer¨ªa extender el b¨¢sico a las pensiones ("pensiones de solidaridad", seg¨²n CEOE), protecci¨®n familiar y asistencia sanitaria, que tiendan a ser protegidas en Europa con independencia de la actividad profesional.
Cuant¨ªa m¨ªnima de las pensiones. UCD prometi¨® una "cobertura econ¨®mica suficiente", extendida a incapacidad, invalidez, muerte ' jubilaci¨®n y desempleo; el indicador del m¨ªnimo de subsistencia "se fija en la cuant¨ªa del salario m¨ªnimo interprofesional". Alianza Popular defrende que no debe existir ninguna pensi¨®n por debajo del salario m¨ªnimo ("Soluciones para una d¨¦cada"). Conclusi¨®n semejante s¨¦ desprende de los programas electorales del PSOE y PCE. CEOE no relaciona los m¨ªnimos del salario interprofesional con los m¨ªnimos de pensi¨®n; habla de suficiencia. UGT propugnaba cuant¨ªas m¨ªnimas diferenciadas a las situaciones familiares y circunstancias personales.
Aleance del nivel profesional. El PSOE propone "una pensi¨®n complementaria proporcional a las, cantidades cotizadas". Los otros tres partidos no explicitan nada al respecto. CEOE hace de este nivel el pilar de protecci¨®n, sustancial para:el futuro. UGT le atribu¨ªa el "m¨¢ximo alcance sofidario".
Nivel libre y gesti¨®n de los tres. Para UCD, el nivel libre o tercer nivel no debe tener nece sariamente car¨¢cter profesional. AP le otorga gran confianza como r¨¦gimen di protecci¨®n libre e instrumento de ahorro y capitalizaci¨®n. CEOE subraya tambi¨¦n el efecto-ahorro, y lo reserva exclusivamente a los aprivados, que deben gestionar mayoritariamente el anterior o profesional y tener las mismas oportunidades que el sector p¨²blico en el primero o b¨¢sico.
UGT entiende que este tercer nivel comporta la exclusi¨®n gestora del Estado y de otras instituciones p¨²blicas, y reserva a la iniciativa p¨²blica los dos anteriores. CC OO admite ¨²nicamente los dos primeros.
En resumen, CEOE rechaza que las instituciones p¨²blicas puedan participar en el nivel libre, igual que los sindicatos rechazan a los privados en las otras dos manifestaciones de la SS obligatoria.
-Sistema gestor. CEOE y, UGT quieren m¨¢s participaci¨®n social en las entidades gestoras, donde el sindicato desea excluir: a la burocracia oficial y dar, mayor. peso a los trabajadores que a los empresarios.AP y PCE se pronuncian decididamente porque la gesti¨®n, la lleven las actuales entidades gestoras, intensificando y clarificando las funciones de sus consejos generales. PSOE y UCD no aportan excesivas cr¨ªticas al sistema, si bien el partido del Gobierno, al hablar de cauces de participaci¨®n, incluye a los ancianos en los servicios para la tercera edad y a los minusv¨¢lidos en los de incapacitados.
-Financiaci¨®n. Tres son aqui las coincidencias fundamentales: descargar a las empr6as del excesivo coste que ahora soportan, principalmente reconduciendo las prestaciones b¨¢sicas del r¨¦gimen p¨²blico a financiaci¨®n, estatal plena; equilibrar mejor la contribuci¨®n de empresas y beneficiarios en el nivel p¨²blico profesional, acercando sus proporciones a las europeas; y localizar una base de determinaci¨®n de la carga que no sea ni el nivel de empleo ni el nivel de los salarios pagados.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.