Al fallecido Carlos Rama

Quisiera que estos moldes de tinta fuesen tan expresivos como la m¨²sica o la pintura para hacerte llegar m¨¢s intensamente mi sentir, que estoy segura ser¨¢ el de muchos que te conocimos y nos beneficiamos de tu fecunda semilla.Las clases de sociolog¨ªa en el Instituto de Profesores Artigas, de Montevideo, de los a?os 1967 y 1968, aparecen ahora como un espejismo delante de m¨ª; las espor¨¢dicas charlas en el caf¨¦, siempre flotando una aureola de encantamiento sobre ti y tu palabra sabia, que escuchaba con atenci¨®n y en silencio admirativo.

La distancia y los a?os borran l¨ªmites, acent¨²an la poes¨ªa y la belleza de aquellos d¨ªas maravillosos del fin de la adolescencia, d¨ªas de descubrimientos fant¨¢sticos; la vida ha rodado en sentidos distintos a partir de entonces para todos nosotros; pero ?cu¨¢nto te he echado de menos! Contra el tiempo transcurrido, mi recuerdo; contra el aparente olvido, mi gratitud,mi reconocimiento al inolvidable, profesor, y contra la muerte, la vida inextinguible de tu gran obra, la huella imborrable de tu fuerte, poderosa y, sin embargo, exquisita personalidad. Las tierras de Uruguay y Espa?a tienen mucho que agradecerte: tu entrega a la causa de su libertad y su cultura, lo que es sin¨®nimo de tu amor por ellas./ ex alumna del IPA de .