Fraga rechaza la regulaci¨®n en la LAU del r¨¦gimen del profesorado
El presidente de Alianza Popular (AP), Manuel Fraga, se mostr¨® especialmente cr¨ªtico con la regulaci¨®n del r¨¦gimen del profesorado que hace el proyecto de ley de Autonom¨ªa Universitaria (LAU), en la carta que dirigi¨® al presidente del Gobierno, Leopoldo Calvo Sotelo, el pasado 26 de febrero, para pedirle la modificaci¨®n del proyecto. El contenido de la carta fue difundido ayer por Europa Press.Fraga expone "'la gravedad del enfoque del t¨ªtulo octavo de la ley, dedicado al profesorado", y a?ade que a juicio del grupo parlamentario que preside -Coalici¨®n Democr¨¢tica (CD)-, el contenido de ese t¨ªtulo y de varias disposiciones transitorias "abre la puerta a la posibilidad de graves arbitrariedades, tanto por contenerse previsiones normativas de aparente alcance general, pero que buscan desplazar a un sector prestigioso del profesorado de Ias posiciones de responsabilidad que ocupan en la vida acad¨¦mica (art¨ªculo 49.8), como por no respetar derechos leg¨ªtimos de ciertos profesores actuales (disposici¨®n transitoria segunda), o por establecer unas originales c¨¢tedras vitalicias sin habilitaci¨®n e incluso sin doctorado a cubrir digitalmente.
Tambi¨¦n estima Fraga que la redacci¨®n actual del proyecto propicia la degradaci¨®n del nivel y de la calidad de la ense?anza. "En general", afirma, "todos los dispositivos de selecci¨®n de los diversos cuerpos de profesores de universidad est¨¢n absolutamente alejados de las ense?anzas que se pueden extraer de nuestros realidad universitaria". As¨ª, "los dispositivos de habilitaci¨®n y adscripci¨®n que se articulan en el art¨ªculo 51, y concordantes con la ley, parecen especialmente dise?ados para que cualquier ignorante con apoyos pudiera ingresar r¨¢pidamente en el m¨¢s alto cuerpo elocente".
El l¨ªder aliancista pide una selecci¨®n "con arreglo a los principios de m¨¦rito y capacidad que consagra la Constituci¨®n", en lugar de "una seudo-democratizaci¨®n que parece seguir modelos for¨¢neos que ya han sido abandonados por sus propios iniciadores tras el irreversible deterioro de sus universidades". La carta alude tambi¨¦n a "la desconfianza con que se contemplan las universidades privadas" y califica de inconstitucional la posibilidad de que los alumnos, que libremente acudan a una universidad no p¨²blica, se vean privados de las ayudas que recibir¨ªan si fuesen a las p¨²blicas.
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