Dr¨¢stica restricci¨®n del agua para riego en la cuenca del Guadalquivir

La comisi¨®n de recursos hidr¨¢ulicos de la cuenca del Guadalquivir, reunida bajo la presidencia del gobernador civil de Sevilla, Jos¨¦ Mar¨ªa Sanz Pastor, ha decidido reducir a un 60% sobre los niveles ordinarios las dotaciones de agua para riego en todos los embalses y pantanos de la cuenca. La medida, consecuencia directa de la sequ¨ªa, ha causado preocupaci¨®n profunda en los medios agr¨ªcolas de la regi¨®n andaluza, que ayer especulaban con la posibilidad de acciones de protesta por parte de los campesinos afectados.

Mientras que en las ciudades andaluzas la sequ¨ªa se hizo notar de manera especialmente dura en el a?o 1981 (Sevilla, por ejemplo, sufri¨® restricciones durante once meses) y desapareci¨® como problema inmediato con las lluvias de finales de a?o, el sector agr¨ªcola de regad¨ªo pudo salir adelante gracias a las reservas acumuladas en los pantanos desde tiempos anteriores, reservas que ahora se encuentran a un nivel m¨¢s bajo que en marzo de 1981.La comisi¨®n de recursos, creada en diciembre pasado precisamente para facilitar las actuaciones encaminadas al m¨¢ximo aprovechamiento de los recursos de agua existentes, ha estimado llegado el momento de imponer estas restricciones, a la vista de la actual situaci¨®n meteorol¨®gica y teniendo en cuenta la improbabilidad de que se produzcan abundantes lluvias durante la presente primavera, en cuyo caso se suavizar¨ªan las medidas de ahorro.

Adem¨¢s de reducir el suministro de agua para riego agrario hasta un 60% del abastecimiento normal, la comisi¨®n acord¨® no conceder autorizaciones de riegos provisionales en la pr¨®xima campa?a y extremar el rigor en el control de los aprovechamientos abusivos, as¨ª como adoptar medidas que eviten cualquier tipo de despilfarro en los embalses de uso m¨²ltiple. La Comisar¨ªa de Aguas del Guadalquivir velar¨¢ por la operatividad real de estas limitaciones para los regantes particulares.

Solamente en la provincia de Sevilla se calcula en 150.000 el n¨²mero de hect¨¢reas afectadas por las restricciones, con la doble consecuencia de una sensible disminuci¨®n de la producci¨®n total y un descenso notable del n¨²mero de jornales facilitados a los obreros del campo, justamente en una coyuntura de paro alarmante en el sector rural.