El sol, el viento y el mar ser¨¢n las fuentes de energ¨ªa en un futuro cercano, seg¨²n el especialista norteamericano Robert Cohen
El mayor desaf¨ªo actual que tiene el hombre es lograr pasar de las fuentes f¨®siles de energ¨ªa a las renovables, seg¨²n Robert Cohen, especialista norteamericano en energ¨ªas alternativas que visita Espa?a estos d¨ªas. El doctor Cohen, asesor del Departamento de Energ¨ªa de los Estados Unidos, ha participado desde hace diez a?os en los programas de energ¨ªa solar, y actualmente est¨¢ especializado en el desarrollo de la energ¨ªa procedente de los oc¨¦anos.En sus contactos con los especialistas espa?oles, el doctor Cohen ha hablado sobre todo de las energ¨ªas solar y e¨®lica, las que mayor futuro pueden tener en su opini¨®n en Espa?a a corto plazo. Para aprovechar la segunda se piensa en una primera instalaci¨®n experimental en la zona de Tarifa, donde ya se encuentran avanzados los estudios sobre los vientos.
Respecto a la solar, es de la opini¨®n de que no deben descartarse ninguna de las diversas tecnolog¨ªas que existen para el aprovechamiento de la radiaci¨®n procedente del sol. "Lo mejor es desarrollar de forma paralela todas las que puedan ser rentables econ¨®micamente ". Le parece bien, por tanto, que se est¨¦ trabajando en la construcci¨®n de centrales solares de mediana potencia, como las situadas en Almer¨ªa, sin abandonar, sin embargo, la conversi¨®n fotovoltaica directa para usos fundamentalmente dom¨¦sticos y agr¨ªcolas.
El desarrollo de las energ¨ªas renovables se enfrenta con una gran inercia, seg¨²n este especialista norteamericano, que se?ala, sin embargo, que se trata del mayor desaf¨ªo que tiene actualmente el hombre. "Igual que pas¨¦ de la le?a, biomasa al fin y al cabo, a los combustibles f¨®siles, carb¨®n, petr¨®leo y gas, debe efectuar la transici¨®n a las energ¨ªas renovables para asegurar su futuro".
Para Cohen la radiaci¨®n solar es fuente de la energ¨ªa e¨®lica, la de fotos¨ªntesis, la almacenada en los oc¨¦anos e incluso la hidroel¨¦ctrica -"la de peor impacto ecol¨®gico"-, adem¨¢s de la conocida normalmente como energ¨ªa solar. En este sentido, se?ala que la potencia procedente del Sol que llega a la Tierra alcanza los mil kilovatios por metro cuadrado, de los que actualmente se aprovecha un porcentaje ¨ªnfimo.
De los molinos a las turbinas
La escasez de energ¨ªa y el alza de precios han hecho que se experimente seriamente con el aprovechamiento energ¨¦tico del viento, volviendo as¨ª a una fuente ilimitada que se hab¨ªa utilizado desde tiempo inmemorial en Europa. En Estados Unidos se han dise?ado en los ¨²ltimos a?os turbinas que producen hasta 2.500 kilovatios de potencia. Un modelo de esta potencia, construido por la NASA en el Estado de Washington, consta de un gigantesco rotor de dos aspas de noventa metros de di¨¢metro, situado sobre una torre de sesenta metros de altura. El tope te¨®rico est¨¢ en los siete megavatios de potencia.
"Se han realizado prototipos de muy diversos tama?os y potencias, y lo que falta ahora es perfeccionarlos para reducir al m¨ªnimo las aver¨ªas y gastos de mantenimiento, y conseguir que sean operativos durante un tiempo econ¨®micamente rentable". Las turbinas pueden producir electricidad a partir de una velocidad del viento de veinte kil¨®metros por hora, y trabajar durante un tercio del d¨ªa, frente a s¨®lo un quinto, que es la media que alcanzan las instalaciones de energ¨ªa solar.
En tiempos del presidente Carter, el tema de las energ¨ªas alternativas alcanz¨® su c¨¦nit tanto por el n¨²mero de programas en marcha como por el dinero para investigaci¨®n de que se dispon¨ªa. Se fij¨® el objetivo de lograr en el a?o 2000 que el 20% de la energ¨ªa total procediera de fuentes renovables. Un objetivo que en Espa?a se reduce al 1,6%. Cohen recuerda esos a?os con cierta nostalgia, ya que las cifras sufrieron un gran recorte con la llegada de Reagan. "Este a?o disponemos de 250 millones de d¨®lares para todas las tecnolog¨ªas de energ¨ªa solar. Antes ten¨ªamos seiscientos millones. Ahora el Gobierno piensa que la t¨¦cnica est¨¢ ya bastante estudiada y que no se deben utilizar subsidios federales en tecnolog¨ªas aptas para ser desarrolladas comercialmente".
El mar, fuente ilimitada
El tema favorito del doctor Cohen, sin embargo, es la conversi¨®n en electricidad de la energ¨ªa t¨¦rmica de los oc¨¦anos, t¨¦cnica que s¨®lo se puede utilizar en las zonas tropicales y subtropicales, y que es la que se encuentra en fase m¨¢s avanzada entre las posibles formas de aprovechamiento del mar. Otras cuatro en estudio son las que se refieren a las olas, las mareas, las corrientes oce¨¢nicas y la diferencia de salinidad entre dos soluciones acuosas.
En la tecnolog¨ªa OTEC (del ingl¨¦s Ocean Thermal Energy Conversi¨®n) se utiliza la diferencia en temperatura existente entre el agua de la superficie del mar, calentada por el Sol, y la de unos mil metros de profundidad. Se puede aplicar en ¨¢reas donde exista una diferencia m¨ªnima de 18?C, lo que significa unos 22?C en la superficie.
No son los norteamericanos, sino los japoneses, los que se encuentran en una fase experimental m¨¢s avanzada en esta tecnolog¨ªa. Disponen de una planta en la isla de Nauru, a la que se hace llegar, por tuber¨ªas diferentes, el agua fr¨ªa y la caliente procedentes de un punto cercano a la costa. El proceso es similar, pero invertido, al que se realiza en cualquier refrigerador dom¨¦stico. El agua caliente procedente del mar produce la expansi¨®n de un l¨ªquido, que puede ser amoniaco o fre¨®n -aunque tambi¨¦n se podr¨ªa directamente vaporizar el agua en un vac¨ªo parcial-, cuyos gases hacen funcionar una turbina. El ciclo se cierra con el enfriamiento mediante el agua fr¨ªa, tambi¨¦n procedente del mar.
En Estados Unidos se han realizado experimentos similares en un barco situado junto a Hawai, donde se 19gr¨® la obtenci¨®n de un megavatio de potencia por cuarenta megavatios t¨¦rmicos, un rendimiento muy bajo si se compara con otro tipo de centrales para producci¨®n de electricidad, pero esperanzador para los cient¨ªficos. El doctor Cohen piensa que con este m¨¦todo se podr¨ªa lograr la producci¨®n de hasta 50.000 megavatios, fundamentalmente en zonas costeras de pa¨ªses en v¨ªas de desarrollo.
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