Estados Unidos impone sanciones econ¨®micas y militares a Argentina y promete apoyo log¨ªstico al Reino Unido
Estados Unidos se une definitivamente a las tesis del Reino Unido en el conflicto de las islas Malvinas, al declarar el secretario de Estado, Alexander Haig, en nombre del presidente Ronald Reagan: "Responderemos positivamente a las peticiones de apoyo material para las fuerzas brit¨¢nicas".
"Estados Unidos", dijo Alexander Haig, "ha desplegado esfuerzos extraordinarios orientados a conseguir una soluci¨®n pac¨ªfica de la crisis. Estos esfuerzos fueron adoptados porque la crisis evidencia la cuesti¨®n vital de la solidaridad del hemisferio en un momento en el cual el adversario comunista busca posiciones de influencia en Am¨¦rica Latina". En un espectacular giro, que acaba con su neutralidad en el litigio argentino-brit¨¢nico, Estados Unidos impone sanciones militares, econ¨®micas y crediticias al Gobierno militar argentino, sum¨¢ndose a la actitud de los pa¨ªses miembros de la Comunidad Econ¨®mica Europea. Washington escoge, sin dudarlo, el bando de su aliado en la OTAN.La dura actitud norteamericana hacia Buenos Aires se interpreta como un esfuerzo de ¨²ltimo minuto para presionar a la Junta Militar argentina hacia la mesa de negociaciones. La posici¨®n estadounidense podr¨ªa generar tambi¨¦n un posible cambio en la c¨²spide militar argentina, donde no ser¨ªa de extra?ar un desplazamiento del presidente, Leopoldo Fortunato Galtieri, por otros militares o incluso miembros civiles.
Alexander Haig dijo, al anunciar las medidas en el Departamento de Estado, que el presidente Ronald Reagan orden¨® "la suspensi¨®n de todas las exportaciones militares hacia Argentina, el cese de nuevos cr¨¦ditos del Import-Export Bank y la cancelaci¨®n de otras facilidades crediticias".
Exponiendo los "serios temores" de que Argentina y el Reino Unido se envuelvan en "una amplia acci¨®n militar", el jefe de la diplomacia norteamericana, que durante doce d¨ªas viaj¨® entre Buenos Aires y Londres en busca de soluciones negociadas a la crisis, a?adi¨® que "Estados Unidos contin¨²a preparado para asistir a ambas partes en la b¨²squeda de un acuerdo".
En el plano espec¨ªficamente militar, Alexander Haig matiz¨® que Estados Unidos no piensaenvolverse directamente en una posible guerra entre Argentina y el Reino Unido, a pesar de la inequ¨ªvoca declaraci¨®n de que "responder¨¢ positivamente a las peticiones de apoyo material para las fuerzas brit¨¢nicas".
Washington recuerda que los primeros en utilizar la fuerza para resolver el litigio de las Malvinas fueron los militares argentinos. Repite tambi¨¦n que Buenos Aires rechaz¨® las ¨²ltimas propuestas para un acuerdo de paz, que incluyen el cese de las hostilidades, la retirada de todas las fuerzas militares del ¨¢rea, el cese de toda sanci¨®n contra Argentina, la administraci¨®n provisional de las islas bajo un mando conjunto brit¨¢nico-argentino-norteamericano y el inicio de negociaciones para una soluci¨®n final que respete los puntos de vista de los habitantes de las islas.
En las Naciones Unidas, en Nueva York, el ministro de Asuntos Exteriores argentino, Nicanor Costa M¨¦ndez, se entrevist¨® con el secretario general de la organizaci¨®n, el peruano Javier P¨¦rez de Cu¨¦llar. Costa M¨¦ndez pidi¨® al m¨¢ximo responsable de las Naciones Unidas una "r¨¢pida mediaci¨®n de la ONU" en el litigio, pero hasta el momento nada permite prever tal eventualidad. Igualmente, el ministro argentino reafirm¨® que su pa¨ªs no aceptar¨¢ negociar el "principio de la soberan¨ªa" de las islas Malvinas.
El Consejo de Seguridad vot¨® por la retirada de las tropas argentinas y la continuidad de las conversaciones. En medios diplom¨¢ticos de la ONU, con clara predominancia num¨¦rica de pa¨ªses en v¨ªas de desarrollo, la actitud de Estados Unidos se interpretaba como el paso hacia "una nueva guerra colonial".
Medios militares del Pent¨¢gono se?alaron ayer en Washington que las p¨¦simas condiciones climatol¨®gicas que predominan actualmente sobre las islas Malvinas convierten en "improbable" la posibilidad de un ataque inmediato. La climatolog¨ªa quiz¨¢ sea, por el momento, la mejor aliada para un ¨²ltimo esfuerzo diplom¨¢tico.
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