Contestaci¨®n a Sender
Su peculiar sentido del agradecimiento me ha colocado en una situaci¨®n perpleja, a mitad de un camino entre la verg¨¹enza y el orgullo herido.Remont¨¢ndonos al origen de este desafortunado asunto (v¨¦ase EL PAI S del 13-12-1981), creo recordar que a mediados de diciembre ¨²ltimo se public¨® en este diario su primera carta solicitando, por favor, datos sobre su madre, Amparo Baray¨®n de Sender. A esa llamada, que pudo ser le¨ªda por 250.000 personas, lectoras cotidianas de este peri¨®dico, solamente acud¨ª yo empleando el mismo medio. Lo natural hubiera sido que el destinatario, haciendo uso de lo que suele ser costumbre y estilo de una correcta educaci¨®n -en este continente-, acusara recibo del informe sin otras interferencias extempor¨¢neas que pretendieran poner en tela de juicio los sinceros testimonios que yo voluntariamente aport¨¦.
Como me hallo muy bien dispuesto a dar un rotundo carpetazo a este molesto incidente, desde aqu¨ª pregono mi firme prop¨®sito de no seguir en el juego que se me empieza a vislumbrar un tanto equ¨ªvoco, ya que despu¨¦s de haber le¨ªdo con extra?eza su largo texto del d¨ªa 19 de mayo he sacado la conclusi¨®n de que entre usted, su hermana Benedicta y su admirada prima Magdalena pose¨ªan el mejor banco de datos sobre la vida y la muerte de su mam¨¢, con lo cual podemos resumir que resultaba obvia una nueva demanda de informes que a?adieran algo nuevo al exhaustivo conocimiento que ustedes ya ten¨ªan almacenado.
Y nada m¨¢s, se?or Sender: solamente me resta a?adir que disfrute usted muchos a?os la bella amistad y el impagable parentesco que le une fielmente a su admirable prima, directora consorte de los antiguos diarios del Movimiento Nacional, que tanto nos han hecho disfrutar a los espa?oles en general, y a los zamoranos en particular, durante los aproximadamente 37 a?os ¨²ltimos que lleva dirigi¨¦ndolos con tanto acierto como lealtad. Esta faceta, sin matices peyorativos, deseo dejarla a modo de colof¨®n que cierre con siete llaves un asunto en el que lamento haber intervenido. /
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