El problema de los profesores de religi¨®n

Perm¨ªtame que le felicite por el editorial sobre "El debate de la colza", del pasado domingo 13 de junio. Pienso, por experiencia, que ha dado en el, clavo: la pol¨ªtica, ejercida como profesi¨®n, y la "burocracia", mal que le pese al director general de Retribuciones a Funcionarios, que no le pesa, deshumanizan. Los ciudadanos estamos enfrentados a una Administraci¨®n con un coraz¨®n de piedra, no de carne. Los problemas no son, para ella, sentidos como realidades, a menudo, sangrantes. Los problemas son estudiados, cuando lo son, por robots, no por personas capaces de comprender, de enternecerse, de desvivirse por solucionarlos.Ciertamente, nuestro caso no es tan desgarrador como el grav¨ªsimo de la colza. Sin embargo, ante nuestro problema, el de los profesores de religi¨®n de formaci¨®n profesional que, acabado ya el curso e impartidas las clases durante el mismo, no hemos ni tan siquiera sido nombrados como tales, ni percibido remuneraci¨®n alguna, ni amparados por una Seguridad Social a la que tendr¨ªamos que haber tenido derecho, es otro bot¨®n de muestra de esa Administraci¨®n, que debe creer que "nuestro est¨®mago" puede seguir esperando a recibir su sustento hasta que se solucione el tr¨¢mite burocr¨¢tico que todav¨ªa est¨¢ pendiente a estas alturas de curso escolar.

Las cuerdas emocionales de esos se?ores ya han perdido la capacidad para vibrar. Seguro que no cuentan entre sus familiares con alg¨²n afectado por la colza, ni han dejado de percibir sus retribuciones, ni se les ha dicho que, si bien "Hacienda tiene recursos humanos e inforrn¨¢ticos para llegar a la verdad", esa verdad a la que arbitrariamente han llegado implica un sueldo recortado en un 50% al que estaba estipulado (como va a ocurrir con los nuevos profesores de religi¨®n de formaci¨®n profesional, a los que ese "sueldo de hambre" no va a alcanzar para hacer frente a las deudas que tienen, gracias a la inmoralidad de nuestra inhumana Administraci¨®n, carente de coraz¨®n).

Esperando que pronto "quienes se proclaman servidores del Estado" act¨²en como tales, agradecido por la publicaci¨®n de la presente, atentamente. /

Profesor de religi¨®n del Instituto de Formaci¨®n Profesional Diego de Valderr¨¢banos.