La situaci¨®n sanitaria en Toledo

Le escribo la presente carta con el ruego de que la publique en el diario que usted dirige si as¨ª lo estima conveniente, o haga el mejor uso de ella, seg¨²n su criterio personal. Considero los hechos que a continuaci¨®n relato una muestra de la que, a mi juicio, considero una deficiente situaci¨®n sanitaria en Toledo, tema que creo pueda ser de inter¨¦s p¨²blico.En enero del a?o en curso fui durante diecis¨¦is d¨ªas m¨¦dico titular del servicio de urgencia del ambulatorio de San Ildefonso, de Toledo, puesto del que tuve que dimitir por motivos deontol¨®gicos. La causa de mi postura era la falta de asistencia en el trabajo de los ATS de guardia durante las mismas, al llegar la noche, causando un deterioro evidente de la asistencia sanitaria en dicho servicio. A pesar de mis ¨®rdenes, los ATS se negaron repetidamente a obedecerme, siendo la situaci¨®n conocida, consentida y amparada por parte del inspector m¨¦dico, del director del ambulatorio y del director provincial del Insalud de Toledo. Todo esto, y seg¨²n mis noticias, y las que me dieron los propios implicados, tanto ATS como responsables superiores, realizado desde hace a?os.

Ante lo que consider¨¦ una gravedad de la situaci¨®n, y que evidentemente cualquier d¨ªa pueda ocurrir alguna desgracia humana perfectamente evitable si todos cumpliesen su trabajo, denunci¨¦ repetidas veces los hechos en el Insalud de Toledo sin ning¨²n resultado positivo. Por este motivo, volv¨ª a denunciar la situaci¨®n en el Grupo de Investigaci¨®n Territorial n¨²mero 1 de Inspecci¨®n M¨¦dica, concretamente al inspector se?or Ramos. Oralmente se me comunic¨® que hab¨ªan comprobado mi denuncia, y que con los resultados de la investigaci¨®n practicada hab¨ªan elevado el expediente a la Subdirecci¨®n General de Inspecci¨®n M¨¦dica, aproximadamente a finales de febrero, sin que hasta la fecha se haya realizado ninguna acci¨®n punitiva contra los culpables. Y mucho me temo que el caso quede paralizado desde el punto de vista administrativo. Mientras tanto, y siempre seg¨²n mis noticias, la actuaci¨®n de los ATS y de sus responsables superiores no ha variado.

Con fecha 8 de mayo de 1982 envi¨¦ una carta certificada al actual ministro de Sanidad, se?or N¨²?ez, exponi¨¦ndole los hechos y sin recibir respuesta alguna. El 28 de mayo de 1982 volv¨ª a mandar otra carta certificada con acuse de recibo al se?or ministro, sin haber recibido respuesta tampoco.

Manteniendo lo que considero es por parte m¨ªa una postura ¨¦tica y una coherencia ideol¨®gica, y evitar suceda alguna desgracia o que prosiga el deterioro sanitario en Toledo, creo que deben de pedirse explicaciones p¨²blicas y, si procede, responsabilidades a la Subdirecci¨®n General de Inspecci¨®n M¨¦dica y al actual ministro de Sanidad. Ser¨ªa interesante, por otra parte, investigar la posibilidad de la existencia de m¨¢s expedientes paralizados" sobre la situaci¨®n sanitaria en Toledo, dentro de la Subdirecci¨®n de Inspecci¨®n M¨¦dica./