Primera campa?a electoral en veinte a?os

Tras la denominada revoluci¨®n del 64, los partidos pol¨ªticos existentes fueron declarados ilegales, permaneciendo un ¨²nico partido, la Alianza Renovadora Nacional (Arena), que en la d¨¦cada de los setenta se convirti¨® en el actual partido gubernamental, Partido Democr¨¢tico Social (PDS). Arena tuvo que enfrentarse al ¨²nico partido de oposici¨®n legalizado, el Movimiento Democr¨¢tico Brasile?o (MDB), cuya existencia justificaba las victorias electorales de aqu¨¦lla, a veces con dificultad.Al asumir el poder, en 1979, el presidente Figueiredo prometi¨® conducir al pa¨ªs a la apertura pol¨ªtica, permitiendo la formaci¨®n y legalizacion de los cuatro partidos de la oposici¨®n que presentan candidatos a las pr¨®ximas elecciones para los cargos de gobernador, seiladores, diputados federales y estaduales, quienesUeber¨¢n ser elegidos por el pueblo brasile?o el pr¨®ximo 15 de noviembre.

Es obligatorio votar

Por primera vez en veinte a?os, aproximadamente 55 millones de brasile?os deber¨¢n acudir a las urnas -seg¨²n la Constituci¨®n de este pa¨ªs es obligatorio votar- debiendo pagar una multa los que se nieguen a hacerlo. De esta forma, el pueblo brasile?o elegir¨¢ a sus representantes en los Gobiernos estaduales, en el Congreso de Diputados- y en el Senado, los cuales compondr¨¢n el colegio electoral que en 1984 deber¨¢ escoger al sucesor del actual presidente de la Rep¨²blica de Brasil, general Jo¨¢o Baptista Figueiredo.

Los partidos pol¨ªticos que se prsentar¨¢n al comicio son cinco: el partido gubernamental, PDS; el PMDB, que constituye un frente amplio con varias tendencias pol¨ªticas, entre las cuales se encuentran la comunista y la'liberal conservadora; el Partido de los Trabajadores (PT), presidido,y ftiridado por un l¨ªder sindical, Luis Inacio da Silva, Lula (Calamar), quien define al partido como socialista; el Partido Trabalhista Brasileiro (FITB), de car¨¢cter populista y sustentado por la figura del ex presidente Janio Quadros -candidato al Gobierno del Estado de S¨¢o Paulo- y por su presidenta, Ivette Vargas, sobrina-nieta del mandatario brasile?o que se suicid¨®... Getulio Vargas; el Partido Democr¨¢tico Trabalhista (PDT), presidido y creado por el l¨ªder hist¨®rico del antiguo PTB, Leonel Br¨ªzola, quien antes de la revoluci¨®n del 64 lideraba el laborismo en los Estados del sur del pa¨ªs.

El Partido Comunista Brasile?o (fCB) se qued¨® fuera del juego electoral, siendo condenado a seguir viviendo en la sombra de la ilegalidad. Sin embargo, el r¨¦gimen ha dejado de perseguir a los comunistas, los cuales viven su historia en una especie de tolerancia gubernamental.

Y a pesar de su limitada situaci¨®n, el PCB ha topado con los problemas de los partidos comunistas europeos, provocando la expulsi¨®n de su fun4ador y figura hist¨®rica, no s¨®lo en la historia del partido, sino en la de Brasil, Luis Carlos Prestes, jefe ?nilitar durante la revoluci¨®n independentista del Estado de R¨ªo Grande do Sul, en 1924, Prestes lider¨® un movimiento opositor y hasta conspirador -seg¨²n algunos historiadores- contra el Gobierno de Vargas, que culmin¨® con una sublevaci¨®n obrera encabezada por el dirigente comunista en 1935.

Al fracasar, Prestes fue encarcelado y pas¨® diez a?os en prisi¨®n, hasta 1945, cuando volvi¨® a participar en la vida pol¨ªtica del pa¨ªs. Tras sesenta a?os de militancia, Prestes fue expulsado del PCB por su postura prosovi¨¦tica, siendo sustituido por Giocondo Dias, pero que se ha convertido en un partido minoritario y con escasa o inexistente incidencia en la vida pol¨ªtica del pa¨ªs.

Aunque las fuerzas armadas brasile?as, representadas por los jefes de los tres Ej¨¦rcitos, han manifestado reiteradas veces su apoyo a la apertura pol¨ªtica inicida por el general Figueiredo, y hasta el momento han permanecido en actitud de espera atenta al desarrollo del proceso pol¨ªtico, entre la poblaci¨®n persiste la inc¨®gnita de lo que suceder¨¢ los d¨ªas despu¨¦s de las elecciones en el caso de que la oposici¨®n obtenga mayor¨ªa en el Senado y en la C¨¢mara de Diputados y, consecuentemente, en el colegio electoral que deber¨¢ elegir a un nuevo presidente.