Los dirigentes ¨¢rabes dejan en el aire la estrategia para aplicar su plan de paz en Oriente Pr¨®ximo

Salvo una llamada a la buena voluntad y la unidad, el plan de paz aprobado en la 12? cumbre ¨¢rabe que ayer concluy¨® en Fez, dejan en el aire toda previsi¨®n t¨¢ctica o estrat¨¦gica para lograr sus objetivos. O bien no la han formulado abiertamente. La declaraci¨®n oficial sobre este tema ha sido pospuesta por cuatro veces consecutivas.

Aunque todo permanece a¨²n en el terreno de la especulaci¨®n, la esencia del plan, sobre la cual coinciden hasta ahora la mayor¨ªa de los observadores, es la siguiente:1. Creaci¨®n de un Estado palestino en Gaza y Cisjordania, en cuya constituci¨®n la Organizaci¨®n para la Liberaci¨®n de Palestina (OLP) debe jugar un papel preponderante.

2. Garant¨ªa de la seguridad e integridad territorial y la existencia pac¨ªfica de todos los Estados de la regi¨®n a trav¨¦s del Consejo de Seguridad de la ONU.

Sobre este ¨²ltimo punto, que constituye un cierto retroceso del plan Fahd, cuyo punto siete estipulaba ese reconocimiento por todos los Estados de la regi¨®n, subsisten dudas y algunos estiman que la OLP ha sido invitada a extender su reconocimiento de Israel a cambio, naturalmente, de que Gobierno de Tel Aviv haga lo propio.

Este segundo punto, menos comprometido para los ¨¢rabes y susceptible de crear menos divergencias entre ellos, tendr¨ªa la ventaja, puesta de relieve al parecer por el presidente Hafez el Asad, de Siria, de poder asociar en la discusi¨®n de una soluci¨®n a la Uni¨®n Sovi¨¦tica, hasta ahora demasiado postergada, dado el papel dirigente asumido por Estados Unidos con Reagan.

Se ha hablado tambi¨¦n de una delegaci¨®n, integrada por el rey Hassan II de Marruecos; Fahd ben Abdelazis, de Arabia Saud¨ª, y el propio Yasir Arafat, que deber¨ªa viajar a Washington para tratar de conciliar la propuesta ¨¢rabe -cuyos detalles concretos es probable que permanezcan secretos por un tiempo-, con la proposici¨®n formulada hace una semana por el presidente Reagan.

Esta informaci¨®n no ha podido ser confirmada. Se sabe solamente que Arafat efectuar¨¢ pr¨®ximamente un viaje a Argel, T¨²nez, Jordania, Irak, Arabia Saud¨ª y los pa¨ªses del Golfo.

Tal como se especula que ha sido formulado, el plan de paz ¨¢rabe tiene un marcado car¨¢cter testimonial, acentuado por la creciente intransigencia israel¨ª y el rechazo por Men¨¢jem Beguin incluso de la iniciativa del presidente Reagan, que los ¨¢rabes han considerado "positiva, pero insuficiente".

Con su moderaci¨®n actual, los Estados ¨¢rabes demuestran, sin embargo, que la intransigencia israel¨ª, hoy m¨¢s que nunca, impide una salida al secular conflicto.

Lo que s¨ª parece una consecuencia l¨®gica de la nueva actitud ¨¢rabe, que puede resumirse perfectamente diciendo que consiste, por primera vez en la historia, en la disposici¨®n a reconocer la existencia del Estado de Israel, es que la v¨ªa ha quedado libre para que el presidente Ronald Reagan pueda lanzar una nueva ofensiva diplom¨¢tica, estilo de la llevada a cabo por Philip Habib para solucionar la invasi¨®n de L¨ªbano por Israel.

Resoluci¨®n favorable a Irak

La cumbre ¨¢rabe de Fez trat¨® ayer, en reuniones m¨¢s restringidas, de la cuesti¨®n de L¨ªbano, de la readmisi¨®n de Egipto en la Liga Arabe y de una eventual mediaci¨®n en la guerra irano-iraqu¨ª. A este respecto, la cumbre adopt¨® una resoluci¨®n favorable a Irak, en la que se dice que todos los participantes en la conferencia son "solidarios en la defensa de la totalidad de los territorios ¨¢rabes y estiman que toda agresi¨®n contra un pa¨ªs ¨¢rabe es considerado como una agresi¨®n contra el conjunto de la naci¨®n ¨¢rabe".

La delegaci¨®n libanesa present¨® un documento de trabajo que fue mal recibido por sirios y palestinos, por solicitar la retirada de las tropas, tanto sirias como israel¨ªes, pero sin condenar expl¨ªcitamente a Israel por su invasi¨®n.

A mediod¨ªa de ayer, el presidente sirio, que la tarde anterior hab¨ªa aceptado retirar sus tropas a cambio de una retirada israel¨ª y ayuda financiera para restituir las p¨¦rdidas militares sufridas, parec¨ªa haberse retractado de su postura. Intensas gestiones diplom¨¢ticas llevaban a cabo Arabia Saud¨ª y varios pa¨ªses del Golfo para llevarle de nuevo a su primera actitud.