?Para cu¨¢ndo una reforma de la Administraci¨®n p¨²blica?
El pasado 2 de septiembre acompa?aba a mi esposa, en- situaci¨®n de paro, a la delegaci¨®n que tiene en el barrio de Moratalaz el INEM. Eran las 13.05 horas y, aunque la puerta ya estaba cerrada, un sendo cartel indicaba en la misma: "Horario de atenci¨®n al p¨²blico, de 8.30 a 13.30".Tras utilizar una escalera interior pudimos introducirnos, y all¨ª fuimos r¨¢pidamente interpelados; no bast¨® el que mi mujer llevase en sus brazos una criatura de dos meses; no fue suficiente el que nuestra visita obedeciera a una cuesti¨®n de dos minutos, y mucho menos el alegar que hasta las 13.30 horas ten¨ªamos derecho a ser atendidos. Al querer presentar la correspondiente reclamaci¨®n a dicha situaci¨®n se nos aleg¨®, de malas maneras, que all¨ª no ten¨ªamos nada que hacer y que de acudir a la delegaci¨®n principal s¨®lo obtendr¨ªa, como poco, una p¨¦rdida de tiempo.
Ante esto me pregunto:
- En la empresa privada, el horario de atenci¨®n al p¨²blico es bastante m¨¢s largo y hasta el ¨²ltimo minuto, incluso pasado ¨¦ste, se sigue atendiendo al mismo. Los empleados del INEM, no satisfechos con su horario, se encargan de efectuar sensibles recortes.
- Cualquier reclamaci¨®n, con o sin fundamento, nos produce un cierto respeto a los trabajadores del sector privado, ya que en el acto es atendida la petici¨®n del cliente por parte del superior que se encuentre m¨¢s cerca del lugar de los hechos, y en cualquier caso quedar¨¢ satisfecho.
- Pensaba que la Administraci¨®n p¨²blica era sostenida por el colectivo de todos los espa?oles; sin embargo, la realidad me hace ver que se hayan en un estrato superior.
- R¨¢pidamente se hacen denominar t¨¦cnicos de empleo, si bien creo que ser¨ªa mucho mejor el poder identificarles por su predisposici¨®n, comprensi¨®n e identificaci¨®n con los parados, m¨¢xime cuando ¨¦stos, aun en su situaci¨®n, sirven todav¨ªa para algo, darles trabajo.
- Asimismo he podido comprobar la falta de dignidad con que no fuera poco la terrible situaci¨®n en la que se encuentran los desempleados, ajenamente a su voluntad. /
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
?Tienes una suscripci¨®n de empresa? Accede aqu¨ª para contratar m¨¢s cuentas.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.