El palacio de los Reyes de Navarra, abandonado y en ruinas por falta de presupuesto
El palacio de los reyes de Navarra, un edificio del siglo XII y uno de los m¨¢s significativos de Pamplona, se encuentra en un estado de ruina inminente. Si no se realizan con rapidez importantes obras de restauraci¨®n en el tejado, los suelos, vigas, as¨ª como algunas escaleras del palacio, podr¨ªan acabar hundi¨¦ndose, provocando con ello el total derrumbamiento del edificio. Este palacio, que en algunos momentos se pens¨® utilizar como sede del Parlamento de la comunidad aut¨®noma navarra, es utilizado actualmente, y de manera temporal, por numerosos vagabundos.
Esta residencia -que lleg¨® a cobijar bajo su techo a reyes, virreyes, gobernadores militares, as¨ª como autoridades eclesi¨¢sticas- qued¨® deshabitada, por inh¨®spita, en 1972. En los ¨²ltimos a?os se utiliz¨® como sede de la Capitan¨ªa General de Navarra.El palacio, que es propiedad del Estado, y m¨¢s concretamente del Ministerio de Defensa, fue cedido, a precario -seg¨²n un convenio firmado hace cuatro a?os- al Ayuntamiento de Pamplona. Seg¨²n este convenio, el edificio seguir¨¢ siendo propiedad del Estado, mientras que el Ayuntamiento de Pamplona, por su parte, se encargar¨ªa de cuidarlo y protegerlo.
Desde el 28 de julio de 1978 en que tuvo lugar la firma de este convenio entro! el Ayuntamiento de Pamplona y la Junta Central de Acuartelamiento, "este municipio lo ha ofertado por escrito en, al menos, dos ocasiones a la Diputaci¨®n Foral de Navarra, "porque", seg¨²n explic¨® a EL PAIS el alcalde de Pamplona, Juli¨¢n Balduz, "el Ayuntamiento no dispone de los suficientes medios econ¨®micos como para llevar a cabo su reconstrucci¨®n, pero, hasta el momento, no ha habido ninguna respuesta". "He comentado en diversas ocasiones el estado de ruina inminente del palacio y lo que ¨¦ste significa para Navarra", a?adi¨® Balduz, "pero no ha valido para nada, porque ha sido como si hablase en el desierto. Mientras, el edificio se hunde de manera irreparable y, a buen seguro, no haremos nada hasta que no se derrumbe definitivamente".
El palacio lleva diez a?os abandonado desde que qued¨® deshabitado, por inh¨®spito, en 1972. Diez a?os de abandono y vandalismo, que han logrado acabar con esta obra hist¨®rico-art¨ªstica hasta el punto de que en el segundo piso del inmueble resulta peligroso andar. Los sucesivos incendios (siete en todo este tiempo, y todos ellos provocados, seg¨²n los bomberos) han quemado una buena parte de las vigas de madera y, en algunos tramos, el suelo no aguanta ni cien kilos de peso. Subir al tercer piso es pr¨¢cticamente imposible.
El palacio sirve en la actualidad -y de modo provisional- de albergue a numerosos vagabundos y, en ocasiones, a gitanos. Los vecinos de la zona pr¨®xima a este monumento hist¨®rico-art¨ªstico han visto en los ¨²ltimos a?os desde fiestas gitanas hasta varias personas con una camioneta llev¨¢ndose puertas y ventanas, a falta de otros objetos de valor. El palacio ha sido tomado, tambi¨¦n, aunque en este caso durante el d¨ªa, por grupos de ni?os que utilizan el palacio, con sus numerosos recovecos y sus amplios corredores, para jugar en ¨¦l, con el peligro que ello supone, dado el estado de ruina.
Sin embargo, hace ya varios a?os se pens¨® en evitar la situaci¨®n de deterioro a la que en estos momentos se ha llegado en este palacio, incluso se plante¨® la posibilidad de que pudiera convertirse en la sede del Parlamento de Navarra. Y, en este sentido, el 25 de mayo de 1979, el presidente del Parlamento, V¨ªctor Manuel Arbeloa, solicit¨® un informe a la Diputaci¨®n Foral de Navarra sobre la posibilidad de ubicar en el mismo el ¨®rgano legislativo de esta comunidad. Posteriormente, dos parlamentarios acudir¨ªan a visitar el edificio con el fin de estudiar las posibilidades de su restauraci¨®n. Al final de esta iniciativa se rechaz¨® la posibilidad de que el Parlamento navarro tuviese su sede permanente en este viejo palacio "por el estado ruinoso del edificio".
Desde 1979 no se ha planteado de manera oficial la restauraci¨®n de la que fuera sede de los reyes de Navarra, cuyo estado hace prever un importante desembolso econ¨®mico.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.