Legan¨¦s: justicia a la justicia
Legan¨¦s, con sus 200.000 habitantes, inmerso, atrapado en esa invisible tela de ara?a que es la periferia, el cintur¨®n de la capital, con sus l¨®gicas secuencias de violencia, droga, delincuencia, denso y apremiante tr¨¢fico (causa de tanto accidente e infracciones), con sus mil problemas de poblaci¨®n, que crece y crece, tiene para resolver tanta incidencia, tanta querella, tantos diarios conflictos, un solo juzgado de distrito, ubicado en la, misma vieja, peque?a e insuficiente casita pueblerina, con el mismo n¨²mero aproximado de funcionarios que cuando la villa ten¨ªa, hace unos diez a?os, 40.000 o 50.000 habitantes.?Ah, pero eso no es todo! Es que este juzgado de distrito, a su vez lo es, absorbe, tiene jurisdicci¨®n sobre los pueblos de Fuenlabrada y Humanes, que suman un total de 150.000 habitantes m¨¢s. Parad¨®jico, pero es as¨ª. Un solo juzgado de distrito, que tiene que administrar justicia a 350.000 habitantes.
Le¨®n, con 127.000 habitantes, con un 58% menos de poblaci¨®n que Legan¨¦s, tiene tres juzgados de distrito. As¨ª, pues, en nuestro juzgado el trabajo es agobiante. L¨®gicamente, los expedientes se acumulan. Las cosas van lentas, muy lentas. Actores y demandantes son las aut¨¦nticas v¨ªctimas de esta incomprensible incomprensi¨®n. Muchos d¨ªas, el p¨²blico tiene que esperar en la calle o bares cercanos aguardando su turno.
Esperamos de las altas autoridades judiciales, a quienes corresponda, traten de poner remedio a este estado de cosas. / (Madrid).
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