Distensi¨®n
Santamar¨ªa se pas¨® el tiempo de seleccionador anunciando que ,,estamos en la l¨ªnea positiva". Nunca se supo qu¨¦ significaba la frase. No se sabe si su sentencia perdurar¨¢ tanto como las de Rafael el Gallo, pero s¨ª fue una larga afarolada para cambiar de tercio. Miguel Mu?oz hizo ayer su deb¨² como selecionador y su primera faena result¨® aseada.La selecci¨®n cambi¨® ayer de cara. Sobre todo porque hab¨ªa muchas nuevas. El ambiente pareci¨® m¨¢s distendido que en la ¨¦poca anterior. Mu?oz atendi¨® a los periodistas con su natural sorna, pero siempre sin descomponer la figura. Respondi¨® a todo sin que se le ocurriera pensar que los informadores iban a por ¨¦l. Con Mu?oz el dialogo siempre resultar¨¢ amable. Pero siempre habr¨¢ algo picante que contar. Su sentido del humor, en la l¨ªnea del tambi¨¦n madridista Rafael Azcona, producir¨¢ sabores agridulces, pero nunca tensiones innecesarias.
Entre los jugadores se not¨® ayer cierto respeto. En la noche de la concentraci¨®n ya dej¨® sentada su seriedad. Se?or lleg¨® con retraso y se excus¨® en el Talgo de Zaragoza. Pedraza y Quique tambi¨¦n acudieron con el control cerrado. Mu?oz se limit¨® a preguntarles: "?Ustedes tambi¨¦n llegan tarde por culpa del Talgo?".
A la primera sesi¨®n preparatoria acudi¨®, aunque de observador, el preparador f¨ªsico Alvarez del Villar. Mu?oz tuvo a su lado a Miera y al doctor Guill¨¦n. Fue un ensayo general con todo. Mu?oz no quiere improvisar.
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