"Este es el mayor desastre de la historia de Alcira", afirma Luis Su?er
La riada del J¨²car ha supuesto un duro rev¨¦s para la industria espa?ola de la alimentaci¨®n, que se resentir¨¢ durante largos meses del desastre acaecido a las factor¨ªas de Avidesa del alcire?o Luis Su?er. El rey del pollo y del helado intenta rehacer, como todos los habitantes de las comarcas ribere?as del r¨ªo J¨²car, sus industrias que levantaron la econom¨ªa de Alcira durante las ¨²ltimas d¨¦cadas. Como las calles y comercios de esta ciudad de la Ribera Alta, sus factor¨ªas sucumbieron bajo el barro. En Alcira, en Carcagente..., ayer, domingo, se intentaba rehacer la. vida. Colas de personas abasteci¨¦ndose de v¨ªveres y agua, enseres inutilizados amontonados en medio de la calzada transmit¨ªan una imagen ca¨®tica del esfuerzo sobrehumano que se est¨¢ empleando para normalizar una vida truncada por el diluvio.
"A las cinco y media de la tarde del mi¨¦rcoles se produjo la falta de fluido el¨¦ctrico", afirm¨® Luis Su?er a este: diario, "mientras comprobaba en una visita a la factor¨ªa tres, los irreparables da?os causados por la riada en los archivos del departamento administrativo. Fue all¨ª, en esta misma planta baja, donde los etarras le secuestraron la triste noche del 13 de enero de 1981. "A las seis sal¨ª para comprobar el nivel del r¨ªo. Por la noche sub¨ª a una zona de chalets que ha aqu¨ª detr¨¢s en una monta?a. En una situaci¨®n as¨ª, la gente asusta da huye al campo, a donde sea. En mi familia estamos todos bien".
No se avis¨® a tiempo
Los alcire?os se preguntan porqu¨¦ a sus hijos les dijeron en las escuelas a las doce de la ma?ana que se fueran a su casa y ya no volviera, mientras la poblaci¨®n, que llevaba largas horas desorientada sobre el verdadero peligro de la riada y sobre la amenaza del embalse de Tous, no fue alertada hasta que el agua ascend¨ªa por las calles. La tradici¨®n de riadas en esta ciudad viene de lejos. "En Alcira hubo la riada de San Carlos en 1864. Esta, sin embargo, la habr¨¢ superado en un metro o metro y medio. Y esto simplemente, creo yo", expres¨® sin dudas Su?er, "que ha sido por la autopista del mediterr¨¢neo. Yendo hacia Barcelona uno ve como la autopista descansa sobre dos o tres kil¨®metros de pilares cuando atraviesa una vaguada y aqu¨ª en Alcira esto no sucede. Solo han dejado abierto el ancho del r¨ªo J¨²car, que ser¨¢n quince metros, y lo dem¨¢s es un muro de contenci¨®n... y as¨ª nos han hecho poner las botas. La autopista no la quer¨ªan tocar. Volaron un puente sobre Riola. Por eso Sueca se ha salvado. Todo lo que se vol¨® ha sido un acierto".
Caos y desorganizaci¨®n oricial
El caos y la desorganizaci¨®n con que se hizo frente al siniestro sor prendi¨® al industrial valenciano "Nos han complicado la vida, que si el pantano en Tous se romp¨ªa, que si no se romp¨ªa, y cuando dicen que se rompe el agua ya estaba aqu¨ª. Este es el mayor desastre de la historia de Alcira. Incluso dijeron que las casas de diez pisos las desalojara porque el agua que ven¨ªa del pantano las tirar¨ªa, y eso es una barbaridad. Si el pantano estuviera a un kil¨®metro de aqu¨ª, por supuesto que nos barre a todos, pero a 25 kil¨®metros, comprender¨¢ usted que el agua se va ensanchando, se va ensanchando... y llega poco a poco. Cuando se produjo el grueso, el agua sub¨ªa un escal¨®n de escalera cada tres minutos. As¨ª, desde las once de la noche. A las 3.30 de la madrugada del jueves parece que par¨®".
La recuperaci¨®n de las 86 poblaciones afectadas por la riada, dentro y fuera de la comarca donde est¨¢ Alcira, pasa por normalizar los servicios b¨¢sicos. De alimentos y ropa de abrigo la gente est¨¢ suficientemente abastecida. Faltan botas de agua, palas para quitar el barro, agua mineral, etc. En Alcira, a mediod¨ªa de ayer domingo, no hab¨ªa luz el¨¦ctrica, servicio de agua potable y comunicaci¨®n telef¨®nica. Solo tres cabinas provisionales permit¨ªan llamar fuera de la ciudad. "Luz no tenemos, agua potable tampoco, ?tel¨¦fono?, tampoco. En Alcira hay una central de tel¨¦fonos en una avenida que lleva mi nombre y esto que le voy a contar es otra burrada. Porque con la historia de riadas que ya tiene Alcira no se puede hacer una central para tel¨¦fonos con dos pisos en el s¨®tano".
La recuperaci¨®n de estos pueblos exige tambi¨¦n ayudas econ¨®micas a fondo perdido para los damnificados y la actitud comprensiva de sus acreedores. La medida arbitrada por el Consejo de Ministros de entregar a cada familia da?ada un cuarto de mill¨®n de pesetas parece miserable al primer contribuyente de la hacienda espa?ola. "Esa cantidad sirve para pipas nada m¨¢s. Nosotros... yo, estoy dispuesto a ayudar a mi personal en todo lo que sea necesario. El personal se ha quedado sin muebles, sin coche... casi todos ten¨ªan coche y lo tienen estropeado. En fin, haremos lo que podamos para ayudarles y volver a la normalidad". De Luis Su?er depende una cuarta parte de la poblaci¨®n de Alcira, pues en su industria de cartonajes trabaja medio millar de obreros, y en las factor¨ªas de Avidesa, la plantilla oscila entre 900 y 1.500.
Necesidad de ayuda
En realidad, para rehacer su econom¨ªa no confia en ayudas del estado. Con la fianza de los seguros y el propio esfuerzo de sus industrias, Su?er espera remontar la tragedia. "Lo que no nos paguen los seguros ya lo repararemos de otra forma. Hemos perdido todos nuestros papeles. No sabemos si tenemos dinero. Pero creo que en un mes estaremos en parte trabajando de nuevo. A¨²n no hemos hecho una evaluaci¨®n de p¨¦rdidas, ahora estamos tirando barro fuera. Es lo primero. El agua ha destrozado la flota de camiones de distribuci¨®n que se encontraba en la factor¨ªa tres, la m¨¢s afectada, donde el agua ascendi¨® cinco metros. Subi¨® hasta los techos y la mercanc¨ªa estaba valorado en unos 3.000 millones de pesetas. Tambi¨¦n se han ahogado 30.000 gallinas y todas las pollitas reproductoras. Esto ha sido un desastre, un gran desastre", a?ade Luis Su?er con semblante entristecido.
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