Funestos pregoneros

Todos los ciudadanos espa?oles que deseamos convivir en paz y felizmente en esta nuestra querid¨ªsima piel de toro, arropados por nuestra gloriosa bandera com¨²n, venimos padeciendo en silencio, y como si de penitencia a cumplir se tratase, una serie de extra?os temores, originados por incesantes y f¨²nebres presagios que ciertos mafintencionados e intrigantes fantasmas, pregoneros de miedos, airean con las resonancias de sus nefastos tambores por toda nuestra geografia, tratando de crear con ello una psicosis de angustia e incertibumbre en el seno de la comunidad. Por lo que ¨¦sta, ya harta de oir tantas est¨²pidas y s¨®rdidas sandeces, invita a los susodichos aireadores de tragedias a que retornen a sus castillos de origen para continuar asustando a lugare?os y visitantes tur¨ªsticos, que es la obligaci¨®n de todo buen fantasma que se precie; que aqu¨ª nos quedamos todos los dem¨¢s con nuestros problemas reales para tratar de resolverlos sin que nadie nos dicte, aun¨¢ndonos dirigentes y dirigidos para desarrollar con entusiasmo, honestidad y valor las actividades que a cada cual correspondieren dentro del colectivo a que pertenezca y con un solo y exclusivo pensamiento, que anidado en el cerebro y en el coraz¨®n, se exteriorice gritando: "?Viva Espa?a sana!". /