Un detenido comienza una huelga de hambre en Sevilla tras ocho meses de prisi¨®n sin procesamiento
Desde el pasado d¨ªa 2 de diciembre permanece en huelga de hambre en el hospital de San L¨¢zaro, en Sevilla, el joven Francisco Fortes, en protesta por su an¨®mala situaci¨®n jur¨ªdica. Lleva ocho meses como preso preventivo sin que se haya dictado auto de procesamiento en su contra. Durante este per¨ªodo ha protagonizado tres intentos de suicidio y ahora asegura que continuar¨¢ sin ingerir alimentos y que prefiere morir antes que volver a la prisi¨®n.
Los letrados sevillanos Jim¨¦nez Casanova y Aguilar Garc¨ªa, que dirigen la defensa de Fortes, consideran el caso como un ejemplo extremo de la situaci¨®n anormal de los presos preventivos en nuestro pa¨ªs y de la lentitud burocr¨¢tica de la justicia, ya que el tiempo normal que se tarda en instruir un sumario -alrededor de dos meses- se ha superado con creces, sin que se haya producido ni siquiera el procesamiento del encartado. "Es inconcebible que estos problemas puedan poner en peligro la integridad f¨ªsica y ps¨ªquica de una persona", declararon.Los hechos que han dado origen a este caso ocurrieron en los meses de febrero y marzo de 1982 en Mor¨®n de la Frontera (Sevilla), cuando la discoteca Jumbo sufri¨® tres tentativas de incendio provocadas, la ¨²ltima de las cuales tuvo ¨¦xito y consigui¨® la destrucci¨®n del local y p¨¦rdidas que sus propietarios estimaron en cuatro millones y medio de pesetas. Tras haberse recibido un an¨®nimo en la emisora de radio local, reivindicando la autor¨ªa del incendio para una supuesta organizaci¨®n ultranacionalista denominada Andaluc¨ªa Libre, la polic¨ªa procedi¨® a la detenci¨®n de Francisco Fortes, de veinticinco a?os de edad, casado, propietario, junto a su padre y dos hermanos, de otra discoteca en la misma poblaci¨®n.
Al detenido le fue aplicada la legislaci¨®n antiterrorista y durante su permanencia en la Jefatura Superior de Polic¨ªa trat¨® de suicidarse en dos ocasiones, una cort¨¢ndose las venas con el documento nacional de identidad y otra ahorc¨¢ndose en su celda con un trozo de manta. En sus manifestaciones iniciales admiti¨® que hab¨ªa sido autor de los incendios y del an¨®nimo, pero al serle tomada declaraci¨®n por el juez de instrucci¨®n reconoci¨® s¨®lo haber escrito el an¨®nimo y neg¨® cualquier relaci¨®n con los siniestros.
En el psiqui¨¢trico
Despu¨¦s de inhibirse del caso al juzgado central, que entiende en materia de terrorismo, el juzgado de instrucci¨®n de Mor¨®n decret¨® su prisi¨®n provisional, transformada en internamiento en el hospital psiqui¨¢trico de Sevilla a partir de julio pasado, a petici¨®n de sus defensores. No obstante, a primeros de octubre, y coincidiendo con la oleada de atentados reivindicados por los GRAPO en toda Espa?a, Francisco Fortes fue detenido en uno de sus permisos en el centro psiqui¨¢trico, con nueva aplicaci¨®n de la ley antiterrorista. El juez decret¨® entonces su prisi¨®n provisional en la c¨¢rcel de Sevilla, donde el 2 de diciembre se envenen¨® ingiriendo numerosas c¨¢psulas de Valium que hab¨ªa ido acumulando. Trasladado al hospital de San L¨¢zaro, salv¨® la vida, y desde ese mismo d¨ªa se ha declarado en huelga de hambre para no regresar a la c¨¢rcel y conseguir que se aclare su situaci¨®n jur¨ªdica.A ra¨ªz de su ¨²ltima detenci¨®n el preso aparece como fugado en el registro del hospital psiqui¨¢trico, sin que nadie haya precisado que su incomparecencia obedeci¨® al hecho de ser detenido.
La situaci¨®n de las prisiones espa?olas se encuentra gravemente condicionada, seg¨²n opini¨®n general en medios jur¨ªdicos, por la acumulaci¨®n de presos que no se encuentran cumpliendo sentencia firme. La presencia masiva de presos preventivos, sin procesamiento o a la espera de juicio, agudiza las consecuencias de la falta de personal, la antig¨¹edad de las instalaciones y la insuficiencia de los presupuestos.
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