Muri¨® Colin Chapman, autor de los dise?os m¨¢s revolucionarios de F-1

Colin Chapman, director-propietario de la escuder¨ªa Lotus de f¨®rmula 1, muri¨® ayer, de forma inesperada, en su impresionante castillo de Ketteringham Hall, en Norfolk, al este de Inglaterra. Colin Chapman ten¨ªa 54 a?os de edad. La muerte, seg¨²n los primeros informes de la polic¨ªa brit¨¢nica, se debi¨® a causas naturales, probablemente a un fallo cardiaco. Chapman, que estaba casado y ten¨ªa tres hijos, hab¨ªa sido el gran innovador de la f¨®rmula 1, a la que aport¨® la mayor parte de las m¨¢s brillantes e ingeniosas soluciones, posteriormente empleadas por todos los dem¨¢s constructores de monoplazas.

En el campeonato del mundo de F¨®rmula 1, los coches Lotus dise?ados por Colin Chapman tomaron parte en 301 carreras, desde que comenz¨® su actividad en 1958. Su primera victoria fue en Montecarlo, en 1960, con el brit¨¢nico Stirling Moss al volante de un Lotus 18, con motor Coventry Climax, cuya manejabilidad le permiti¨® batir a los mucho m¨¢s potentes Ferrari.Desde entonces, hasta la victoria del italiano Elio De Angelis en Austria, el pasado mes de agosto, los coches de Chapman consiguieron 72 victorias y seis t¨ªtulos mundiales. El primero, el escoc¨¦s Jim Clark, en 1963, quien volvi¨® a repetir dos a?os despu¨¦s. La historia de los Lotus estar¨¢ inevitablemente unida a la de este piloto, considerado por muchos como el m¨¢s grande de toda la historia del automovilismo deportivo al m¨¢s alto nivel. Porque, a?os m¨¢s tarde, Jim Clark muri¨® tr¨¢gicamente en un accidente que los t¨¦cnicos atribuyeron a un fallo en la suspensi¨®n de su coche.

Graham Hill, en 1968, consigui¨® el campeonato del mundo. Precisamente hab¨ªa sido Graham Hill uno de los primeros encargados en el desarrollo t¨¦cnico de los Lotus, lo mismo que Jim Clark. Dos a?os m¨¢s tarde, en 1970, el austriaco Jochen Rindt alcanz¨® gracias a Lotus el t¨ªtulo mundial; pero probablemente tambi¨¦n por culpa de Lotus, la muerte. Una rotura en la suspensi¨®n de su coche le hizo perder el control del mismo e ir a estrellarse de frente contra el guard-rail.

En 1972, el brasile?o Emerson Fittipaldi consigui¨® el t¨ªtulo mundial Para Lotus. A. partir de ese momento, la escuder¨ªa brit¨¢nica entr¨® "en un profundo bache, del que no sali¨® hastala aparici¨®n de la revolucionaria t¨¦cnica Wing-Car -efecto de ala invertida-, que le permiti¨® al italonorteamericano Mario Andretti conquistar el campeonato del mundo, de 1978. Desde entonces, los Lotus nunca m¨¢s consiguieron el t¨ªtulo mundial, y s¨®lo la aislada victoria del italiano Elio De Angelis, el pasado verano, dio un poco de alegr¨ªa al equipo.

Colin Chapman hab¨ªa nacido el 19 de mayo de 1928 en Richmond, Inglaterra. Curs¨® estudios en la universidad de Londres, para alistarse despu¨¦s en la RAF (Reales Fuerzas A¨¦reas brit¨¢nicas). All¨ª fue donde Chapman complet¨® sus estudios iniciales de ingenier¨ªa, que pronto iba a aplicar a los coches de carreras. Tras abandonar el ej¨¦rcito del aire, cuando no hab¨ªa cumplido todav¨ªa los veinticuatro a?os de edad, fund¨® la Lotus, a la que se dedic¨® por entero algo despu¨¦s.

Dise?ador

Como dise?ador y constructor de coches de carreras, Colin Chapman pasar¨¢ a la historia como el autor de la mayor¨ªa de las ideas m¨¢s geniales, que sirvieron para revolucionar la t¨¦cnica de la F¨®rmula 1.En 1963, el brit¨¢nico c¨®menz¨® a construir coches con chasis monocasco. lasta entonces, todos los coches ten¨ªan sus estructura formada por una serie de tubos, pero Colin Chapman pervs¨® que ser¨ªa m¨¢s efectivo un chasis construido como una ¨²nica unidad. Esa t¨¦cnica, entonces revolucionaria -en la actualidad absolutamente generalizada-, le sirvi¨® para conquistar su primer campeonato del mundo.

A?os m¨¢s tarde, en 1967, Colin Chapman volvi¨® a revolucionar la t¨¦cnica del dise?o y construcci¨®n de coches de carreras, al utilizar el motor como parte fundamental de la estructura del coche. Hasta entonces, el motor estaba apoyado y sujeto al chasis, como un elemento incorporado al mismo. Chapman hab¨ªa convencido a Ford, por un lado, y a los t¨¦cnicos Costin y Duckworth por otro, para que le dise?aran un motor para ¨¦l sobre la base de un V-8 de Ford.

Ese motor, utilizado primero de forma exclusiva por Lotus y m¨¢s tarde generalizado, consigui¨® en sus quince a?os de actividad m¨¢s de 150 victorias. Pero la revoluci¨®n de dise?o concebida por Colin Chapman consisti¨® en que el motor sirviera como anclaje de la suspensi¨®n trasera, con lo que dejaba de ser un elemento a?adido para formar parte de la estructura Tambi¨¦n, como sus otros inventos acab¨® siendo utilizado por todos sus competidores.

Un negociante

Chapman ten¨ªa un gran sentido para el negocio. Esto le llev¨® a ampliar su f¨¢brica a peque?as series de coches deportivos comerciales, algunos de notable ¨¦xito, a fabricar barcos y a diversificar sus negocios con inmobiliarias.Tambi¨¦n fue el primero en sorprender al mundillo de la competici¨®n automovil¨ªstica al presentar un a?o su coche totalmente pintado con los colores y el nombre en grandes caracteres de una firma de cigarillos, algo que nunca se hab¨ªa hecho hasta entonces y que, tambi¨¦n, fue copiado por todos los dem¨¢s.

La ¨²ltima revoluci¨®n t¨¦cnica, la m¨¢s reciente, fue la de concebir los chasis de los coches como si fueran alas invertidas que, gracias al Efecto Venturi, permit¨ªan un important¨ªsimo incremento de la estabilidad en las curvas. Esa ¨²ltima revoluci¨®n t¨¦cnica le dio su tambi¨¦n ¨²ltimo t¨ªtulo mundial en 1978, porque, despu¨¦s, los imitadores mejoraron el original y, desde entonces, otros coches con estructura Wing-Car ganaron a los Lotus de Colin Chapman.

Sin embargo, Chapman fue criticado muchas veces por la fragilidad de sus coches, hasta el punto de tener problemas con la justicia por hab¨¦rsele considerado culpable indirecto de la muerte de algunos de sus pilotos. La obsesi¨®n por la manejabilidad y la agilidad de sus coches le llev¨® siempre a dise?ar coches y piezas superligeras que, en ocasiones, resultaban demasiado fr¨¢giles y se romp¨ªan, provocando accidentes que, en ocasiones, fueron fatales para sus pilotos. Jim Clark, Mike Spence y Jochen Rindt pudieron morir por alguna de esa roturas.

La muerte de Ronnie Peterson, que falleci¨® tambi¨¦n tr¨¢gicamente al volante de un Lotus en el circuito de Monza -circuito maldito para Chapman-, no puede ser sin embargo atribuida a un fallo mec¨¢nico.