El compositor Gonzalo de Olavide estrena 'Estigma', dedicada a santa Teresa

Esta tarde a las siete, en el teatro Real de Madrid, la Orquesta Sinf¨®nica de RTVE, bajo la direcci¨®n de Arturo Tamayo, estrenar¨¢ Estigma, una obra encargada a Gonzalo de Olavide por Radio Nacional, con motivo del cuarto centenario de santa Teresa de Jes¨²s. La personalidad de Olavide, uno de los m¨¢s destacados compositores residentes en el extranjero (Suri?ach, Del¨¢s, Balada, Bonet, Ruiz Pip¨®, Valls, R. Halffter, demasiados todav¨ªa) se ha afirmado progresivamente y sus ¨²ltimas creaciones suponen una madurez y una personalidad diferenciada.

Recordemos la Sinfon¨ªa y Cante a Garc¨ªa Lorca -estrenadas por la Nacional-, Quasi una cadenza, C¨¢ntico y Leviathan, presentadas recientemente en Ginebra por Arturo Tamayo. En todas ellas el lenguaje actual (no actualista) de Olavide se apoya en estructuras t¨¦cnico-expresivas de gran firmeza, que buscan, sin ceder al halago, la comunicaci¨®n m¨¢s efectiva con el oyente. Frente al asunto o inspiraci¨®n teresiana, Olavide explica su actitud: "Estigma no est¨¢ prefigurada por la idea de una, conmemoraci¨®n u homenaje, aunque caiga dentro del centenario de Teresa de ?vila (¨²nica santa que me cae simp¨¢tica). No se trata, por tanto, de evocar una imagen sino de haber encontrado un soporte en la personalidad magn¨ªfica y profunda de Teresa de ?vila".Si en el bell¨ªsimo Cante a Garc¨ªa Lorca, la palabra po¨¦tica y la m¨²sica se confund¨ªan en una misma cosa, en el caso de Estigma, "la palabra no perder¨¢ nunca su identidad como medio de significaci¨®n. Seguir¨¢ un itinerario de significante a in-significante en un arco que va de lo comunicable a lo incomunicable". Dentro de lo incomunicable. inscribe Olavide el sentimiento religioso, "entendiendo por religioso una ra¨ªz profunda del hombre, que no se puede institucionalizar, que no puede canalizarse en mitos externos de oficialidad, so pena de profanar lo profundo y m¨¢s respetable de la personalidad".

Gonzalo de Olavide ha partido para su Estigma de una consideraci¨®n casi m¨ªtica del silencio que podr¨ªamos denominar sonoro, en cuanto no es vac¨ªo sino "afirmaci¨®n activa de un fluir sonoro que cualifica el ensimismamiento". "Mi obra est¨¢ concebida y estructurada como un inmenso silencio habitable".

El director Tamayo

Viene a dirigir el estreno de Olavide, el Monumentum pro Gesualdo, de Stravinski, y la Ofrenda musical, de Bach-Barketich, Arturo Tamayo, profesor en la Escuela Superior de M¨²sica de Friburgo, que acaba de obtener un triunfo grande en la Opera de Berl¨ªn, al dirigir el estreno total y dem¨¢s representaciones del ballet Tutuguri, de Wolfgang Rihm, sobre un texto de Artaud. Klaus Geitel, el influyente cr¨ªtico del Berliner Morgenpost, ha escrito que: "Tamayo es un director de m¨¢gica precisi¨®n, bajo cuyo tranquilo y seguro mando la orquesta de la Opera toc¨® como si se tratara de la mejor de esta ciudad", mientras Helmuth Regitz, en Rheinische Post, ve¨ªa en Tamayo "un director de primera clase, cuyo nombre aconsejamos guardar en la memoria", lo que viene a confirmar, despu¨¦s de una d¨¦cada, las predicciones que hicimos ante el entonces juvenil¨ªsimo Tamayo la primera vez que le vimos ponerse ante una orquesta. Este concierto, fuera de abono, me parece uno de los m¨¢s interesantes del presente curso de la Radiotelevisi¨®n Espa?ola. Los verdaderos mel¨®manos har¨¢n muy bien si no se lo pierden.