Luis Ortega Pe?amar¨ªa,

jefe superior de Polic¨ªa de Zaragoza hasta su reciente relevo por la nueva Administraci¨®n socialista, guardar¨¢ un imborrable recuerdo de su paso por la capital aragonesa. La historia, celosamente guardada en la intimidad de sus protagonistas, es un aut¨¦ntico love story. El r¨ªgido y responsable jefe de la polic¨ªa, ya de mediana edad, era -alto y bien parecido- un cotizado solter¨®n cuando accedi¨® al cargo, informa Rosa Mar¨ªa Artal. Pero un d¨ªa se produce el secuestro de un famoso futbolista, Enrique Castro Quini, que permanece cautivo en Zaragoza y es l¨ªberado en esta ciudad. El jefe de Polic¨ªa cuenta los pormenores del rescate ante las c¨¢maras de televisi¨®n y en alg¨²n lugar de Espa?a te observa una mujer: la antigua novia, cuyo recuerdo le mantuvo a ¨¦l en el celibato. Viuda y madre de tres hijos, tambi¨¦n bella y elegante -para que no falte detalle-, se produce el reencuentro. Boda inmediata y la felicidad tanto tiempo esperada.