Paul Breitner se retira "porque 13 a?os de profesi¨®n son suficientes"

El centrocampista y capit¨¢n del Bayern Munich, Paul Breitner, de 31 a?os, anunci¨® que a fines de esta temporada se retirar¨¢ definitivamente del f¨²tbol. Breitner se encuentra en plena forma, todav¨ªa es el cerebro del Bayern Munich, y recientemente fue catalogado como, "futbolista de clase mundial" por el bisemanarlo deportivo alem¨¢n Kicker. Sin embargo, est¨¢ cansado de aguantar los insultos de los aficionados y de los trece a?os de f¨²tbol como medio de trabajo.

Cuarenta y ocho vece intemacional, campe¨®n del mundo con la Rep¨²blica Federal de Alemania, en 1974, a los veintid¨®s a?os, subcampe¨®n mundial el a?o pasado en Espa?a, campe¨®n de Europa de naciones, campe¨®n de Copa de Europa y de la Recopa con el Bayern, varios t¨ªtulos de la Bundesliga y campe¨®n de la Liga espa?ola con el Real Madrid, Breitner en el f¨²tbol lo logr¨® todo. Ahora, a los 31 a?os y en plena forma, Breitner anuncia su retirada, porque dice que trece a?os de profesional son suficientes" y ya est¨¢ harto de que ni?os de ocho y nueve a?os le digan "Breitner, cerdo" y tener que aguantarlo.Breitner fue siempre un personaje conflictivo y contradictorio. En sus primeros a?os en el Bayern y la selecci¨®n nacional llam¨® la atenci¨®n por su peinado afro y sus posturas mao¨ªstas e inconformistas, que despertaron la atenci¨®n en el ambiente futbol¨ªstico y, sobre todo, en Baviera, donde los futbolistas se distingue por sus opiniones derechistas. Beckenbauer lleg¨® a decir en 1969 que consideraba la llegada de Willy Brandt a la Canciller¨ªa como "una cat¨¢strofe nacional". En este ambiente, Breitner fue siempre un marginal. Con los a?os, Breitner dio un giro y parec¨ªa como siqu¨ªsiese escapar de su imagen de izquierdista. Se neg¨® a firmar una resoluci¨®n en contra de la persecuci¨®n de los radicales en la Administraci¨®n P¨²blica y pas¨® a ofrecer su imagen para toda clase de contratos publicitarios. Hasta vendi¨® su barba a una marca de loci¨®n para despu¨¦s del afeitado.

El a?o 1974, despu¨¦s de proclamarse campe¨®n mundial con la RFA, Breitner pas¨® al Madrid, y cambi¨® su posici¨®n de defensa lateral izquierda, a centrocampista. Se dijo que este cambio de posici¨®n fue negativo, porque Breitner no logr¨® en Madrid triunfar plenamente. Todav¨ªa le faltaba aposentar y lograr la madurez necesaria para convertirse en armador de juego.

En Madrid, fiel todav¨ªa a sus ideas progresistas, Breitner llam¨® la atenci¨®n por su donativo de medio mill¨®n de pesetas a unos huelguistas de la f¨¢brica Standard, en los ¨²ltimos a?os del franquismo Breitner recuerda todav¨ªa con a?oranza el tiempo pasado en Madrid. Ayer declar¨® que el Madrid es el mejor club que existe y record¨® que "all¨ª pude vivir y trabajar tres a?os".

Breitner retorn¨® a la RFA y jug¨® un a?o en el Braunschweig, antes de volver definitivamente al Munich, donde se convirti¨® en el amo y cabeza pensante del equipo desde el centro del campo. Su compenetraci¨®n con el delantero Rummenigge es tan perfecta, que los periodistas lanzaron la palabra breitnigge, para calificar la coordinaci¨®n de los dos jugadores. Rummenigge ya ha anunciado que le traen un sustituto de la categor¨ªa de Paul o se va a jugar a Italia, "no me quiero hundir en la median¨ªa".

Renuncia a 65 millones

Breitner renuncia con su retirada a la renovaci¨®n de un contrato con el Bayem de Munich, que le ofrec¨ªa 65 millones de pesetas por dos a?os. En la actual Bundesliga, Breitner es titular indiscutible del Bayern, jug¨® quince de los diecisiete partidos de la primera vuelta y marc¨® cinco goles. Breitner es el jugador del Bayern con mejores calificaciones de la cr¨ªtica especializada y fue elegido por los lectores del bisemanario Kicker, como el mejor centrocampista alem¨¢n por una abrumadora mayor¨ªa de votos.En el pasado Mundial, Breitner tuvo una actuaci¨®n gris, abrumado quiz¨¢ por la responsabilidad que pesaba sobre ¨¦l, que le hizo refugiarse en la botella de vino y los naipes en m¨¢s de una ocasi¨®n. En la fase previa de Gij¨®n, Breitner estuvo mal y mejor¨® algo con el calor de Madrid y Sevilla. En la final marc¨® el ¨²ltimo gol del Mundial y el ¨²nico de la RFA en la final, que perdieron por 3-1 frente a Italia.

Breitner marc¨® fuertemente la pauta del comportamiento insolente de los jugadores de la RFA durante el Mundial, con sus salidas de tono y declaraciones a la Prensa y televisi¨®n del estilo de "me importa un carajo", o "eso son gilipolleces".

El centrocampista no fue capaz de conseguir en la selecci¨®n el mismo de nivel de juego que mantuvo toda la temporada pasada en el Munich y, despu¨¦s del Mundial, anunci¨® su retirada definitiva de la selecci¨®n. Esta retirada definitiva era la tercera de su carrera, porque antes ya se hab¨ªa retirado al final del Mundial de 1974 y en otra ocasi¨®n despu¨¦s de ser criticado fuertemente, cuando jugaba con el Madrid.

Ahora, m¨¢s de uno se pregunta si esta retirada es la ¨²ltima palabra, pero muchos m¨¢s le alaban que se retire en plena forma, cuando todav¨ªa no necesita arrastrar su gloria por los campos de f¨²tbol. Breitner lleg¨® al Bayern Munich de la mano del actual entrenador barcelonista, Udo Lattek, y junto con el delantero Uli Hoeness, hoy gerente del Bayern, que se retir¨® del f¨²tbol a causa de una lesi¨®n de rodilla.

Uli Hoeness hizo todo lo posible para convencer a Breitner de que siga en activo, pero parece haber fracasado.

Ahora, el Bayern tiene el problema de encontrarle un sustituto y entre los hombres que se mencionan est¨¢n los de Bern Schuster, con los inconvenientes de su precio y de su rodilla derecha, Boniek, con el inconveniente de su indisciplina y aficiones alcoh¨®licas, y el del cerebro del Tottenham Hoddle, que s¨®lo costar¨ªa 130 millones de pesetas.

Con Breitner desaparece de las praderas futbol¨ªsticas alemanas una de las pocas personalidades que quedan en el f¨²tbol actual, un futbolista capaz de pensar y poner en pr¨¢ctica con las piernas lo que conceb¨ªa con la cabeza.