Supuesto fraude al Gobierno regional en la promoci¨®n de una empresa mixta

, El Gobierno regional de Murcia ha recusado al consejero delegado de la sociedad Muracua, en la que participaba la comunidad aut¨®noma con veinticinco millones de pesetas, para lo que se hab¨ªa asociado con una entidad titulada Iberacua y que estaba formada por Jos¨¦ Antonio Hern¨¢ndez Salinas (el socio destituido) y una multinacional filipina. La comunidad aut¨®noma ha desembolsado un total de veinte millones de pesetas, como hab¨ªa acordado con motivo de la fundaci¨®n de la empresa mixta, en donde su socio, Iberacua, deber¨ªa aportar la tecnolog¨ªa de dicha industria, as¨ª como veinticinco millones de pesetas.

Andr¨¦s Hern¨¢ndez Ros, presidente del Gobierno murciano, que se interes¨® por la participaci¨®n de capital p¨²blico en esta industria experimental, reconoci¨® el mi¨¦rcoles que uno de sus socios "ha cometido irregularidades".

No obstante, el Gobierno murciano culpa en exclusiva a Jos¨¦ Antonio Hern¨¢ndez Salinas, socio part¨ªcipe de Iberacua, en donde tambi¨¦n participa el holding filipino Ram¨®n y Ortigas, que tampoco ha cumplido los tr¨¢mites oportunos, y a los que disculpan de la presente situaci¨®n "por tener problemas personales con su socio espa?ol". La multinacional filipina seguir¨¢ probablemente en la empresa que propicia la comunidad murciano, siempre y cuando formalice la parte que le corresponde en la aportaci¨®n de capital. En realidad, esta cantidad es m¨ªnima, ya que s¨®lo deber¨¢ desembolsar dos millones y medio de pesetas, porque el resto lo cubrir¨¢ con "la cesi¨®n de la tecnolog¨ªa precisa para la cr¨ªa y engorde de las larvas artificiales, contra un contrato que se hab¨ªa pactado al principio.

Se da la circunstancia de que el representante de la tercera sociedad accionista de Mococoa, SA, la empresa Chaconsa, es el actual consejero regional de Industria, Jos¨¦ Mar¨ªa Casanova, quien introdujo a Hern¨¢ndez Salinas en la iniciativa porque era amigo personal suyo y confiaba en su gesti¨®n. El consejero delegado destituido estaba cobrando de Muracua, hasta el mes de diciembre, la cantidad mensual de 300.000 pesetas, dinero que, por lo que se deduce de la aportaci¨®n de capital, ha salido del presupuesto de la comunidad murciana.